Yamana Gold aunuinció que invertirá USD 220 millones en reactivar el antiguo proyecto El Desquite, ahora denominado Suyai. El yacimiento de oro y plata se ubica en el cordón montañoso de Esquel, a unos 10 kilómetros de la ciudad del mismo nombre, en la provincia patagónica de Chubut.
Suyai comprende los cuerpos mineralizados de Veta Julia, Helena, Cancha de Fútbol, Galadriel y Galadriel Sur, cuya extensión es de aproximadamente 2 kilómetros. El proyecto - impulsado por la filial de Yamana, Minas Argentinas- tuvo un fuerte rechazo de parte de la comunidad hace algunos años, por lo que ha sido reformulado: uno de los cambios más importantes es la transformación desde una explotación a rajo abierto, a una mina subterránea.
Además, según explica el Directivo de Minas Argentinas, Mario Hernández, en declaraciones que recogen diversos medios de Argentina, “no se utilizará el proceso de cianuración, sino que concentración de mineral”. Este procesamiento del concentrado se realizaría en Cerro Moro, situado en Puerto Deseado, en la Provincia de Santa Cruz, que demandaría una inversión de USD 450 millones.
Aunque no existe una carta gantt completamente definida para Suyai, Hernández cree que estará pronto disponible. ‘’Tenemos que reconfirmar algunos datos exploratorios, hacer el estudio de impacto ambiental y luego ya podemos tener más claro cómo avanzar’’, aseguró.
Archivo 16 de mayo
El Chubut
El proyecto Suyai fue formulado ajustándose a la legislación antiminera de la provincia de Chubut. Ya no es a ”cielo abierto”, no es “megaminería” y la extracción del oro con cianuro se hará en otra provincia donde no hay restricciones al uso de moderna tecnología. El nuevo proyecto respeta la ley antiminera y satisface los reclamos de los manifestantes antimineros, ¿alcanzará, o se seguirán oponiendo?
Fue la génesis de la Ley Provincial 5001 que determinó la prohibición en suelo chubutense de la megaminería. Desde 2008 Minas Argentinas SA comenzó un proceso alternativo y acaba de anunciar que su Proyecto Suyai no es a cielo abierto ni tiene la necesidad de utilizar cianuro. Suyai es el proyecto minero propiedad de Minas Argentinas SA diseñado sobre el yacimiento polimetálico de oro y plata ubicado en el denominado Cordón Esquel.
En ese yacimiento se había proyectado la explotación a cielo abierto con lixiviación en solución de cianuro para la recuperación de los valiosos minerales. Pero hubo un antes y un después en Chubut sobre la cuestión minera a partir de que la población decidió hacer valer su opinión obligando a dar marcha atrás a las autoridades y al proyecto inicial, motivando incluso la aprobación de una ley, la 5001, a aún hoy marca una cuestión que hay quienes pretenden revisar para determinados lugares de la provincia.
Pero ahora, «fruto de 3 años de diálogo y negociación con la comunidad, Minas Argentinas SA está en condiciones de anunciar que además de que su Proyecto Suyai ya no es a Cielo Abierto, cuenta con la tecnología suficiente como para recuperar el mineral sin la necesidad de utilizar cianuro», informó la empresa.
En su portal MasaChubut.com, la minera destaca que «de esta manera el proyecto de Mina Subterránea Suyai cumple con la legislación vigente en la provincia del Chubut: No es un proyecto de megaminería, no es a cielo abierto y ahora, no usará cianuro».
EL PROCESO La explicación del proceso según la empresa, es que «tras el trabajo de laboreo y minado subterráneo, el mineral de oro y plata se dispondrá en una plataforma transitoria y de allí pasará por cintas transportadoras para ser triturado hasta obtener un tamaño similar al de una arena». Posteriormente «el material estéril», es decir que no contiene oro ni plata, se acumulará fuera de la mina en una escombrera transitoria y servirá luego para el relleno de túneles. Luego vendrá un paso de molienda para reducir aún más el tamaño del mineral y «se le agrega el agua y reactivos necesarios para la Flotación, el nuevo método que utilizará Suyai, que no necesitará el uso de cianuro para su producción».
La Flotación es un proceso físico-químico, que permite la separación de los minerales sulfurados de oro del resto de los minerales, que componen la mayor parte de la roca original, ahora ya triturada. La pulpa, proveniente de la molienda, se introduce en unos receptáculos similares a unas piscinas, llamadas celdas de flotación.
Desde el fondo de las celdas, se hace burbujear aire y se mantiene la mezcla en constante agitación para que el proceso sea intensivo. Las burbujas arrastran consigo los minerales sulfurados de oro y plata hacia la superficie, donde rebasan por el borde de la celda hacia canaletas que las conducen hacia estanques especiales, desde donde esta pulpa es enviada a la siguiente etapa. El proceso es reiterado en varios ciclos, de manera que cada ciclo va produciendo un producto cada vez más concentrado.
Luego de varios ciclos en que las burbujas rebasan el borde de las celdas, se obtiene el concentrado, el cual toma su nombre por el hecho de tratarse de un producto de mucho menor tonelaje que el inicial, pero conteniendo alrededor del 85% de los metales de interés.
Este concentrado final es secado mediante filtros y empaquetado en bolsas de plástico de alta resistencia, conteniendo como máximo un 8% de humedad en su interior, para su transporte fuera de la provincia. Aunque no está especificado en el informe de la minera, el destino de lo transportado podría ser la vecina provincia de Santa Cruz, que cuenta con una legislación distinta a la de Chubut en materia del proceso de la minería.