Cerca de media hora estuvo el canciller Heraldo Muñoz en el panel de Tolerancia Cero, quien se refirió a dos temáticas que competen al gobierno chileno en materia de relaciones exteriores: el conflicto en la Franja de Gaza y la demanda marítima boliviana.
"Vamos a exigir un cese al fuego inmediato y sin condiciones", indicó el ministro cuando fue consultado respecto a la posición de Chile en los enfrentamientos en Medio Oriente, agregando que las soluciones para poner fin al conflicto deben ser "políticas, no militares". Asimismo señaló que el gobierno hará una donación de 150 mil dólares a las Naciones Unidas con el propósito de ayudar a los refugiados palestinos que han sido desplazados de sus hogares.
A la vez, Muñoz fue consultado frente a la competencia de Chile como parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que, según el periodista Fernando Paulsen, es un puesto sin influencia mayor, a lo cual el canciller contestó que"estamos frente a un desafío más fuerte", agregando que "no se le puede exigir al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas más de lo que están dispuestos a hacer los miembros".
En relación a la demanda por la salida soberana al mar que reclama Bolivia, el ministro ratificó la posición del gobierno de objetar dicha solicitud frente a la Corte de Justicia (CIJ) en La Haya, estableciendo que "nosotros nos vamos a defender con todos los recursos necesarios". No obstante, el titular no pierde la esperanza en que, luego de la decisión del tribunal internacional, se mantengan las buenas relaciones con Bolivia. "Tenemos integración y buenas relaciones con nuestros vecinos, si la corte rechaza la demanda, debemos seguir y centrarnos en aquellos que nos une", recalcó.
En tanto, el Ministro indicó que "la opción de que el tribunal internacional acoja la demanda boliviana es una posibilidad remota del 2%", debido a que las peticiones son en torno al acceso soberano al mar a través de territorio chileno, lo cual vulnera el tratado de 1904, cuyo contenido fue propuesto por Bolivia, el cual fijó las fronteras actuales y es anterior al Pacto de Bogotá de 1948, por lo que la CIJ no tiene competencia.