Un inédito acuerdo se está gestando entre los agricultores de la zona del río Maule y dos de las principales eléctricas del país, Endesa y Colbún, que terminaría con las disputas por el uso del agua del embalse ubicado en dicha zona y que es una de las mayores reservas del país.
Según señala Cristián Soto, presidente de la Junta de Vigilancia del río Maule –organismo que agrupa a los usuarios del recurso en esa cuenca-, las eléctricas estarían interesadas en integrarse como accionistas a la entidad, para lo cual ya se formó una mesa de trabajo para reformar los estatutos de la misma.
Añade que si bien el mecanismo no está definido –para ello están siendo asesorados por la abogada Natalia Dasencich-, la idea es que las eléctricas participen de la mesa directiva, lo que se concretaría hacia fin de año.
Con esto se pondría fin a largas disputas entre agricultores y eléctricas, pues este organismo es el encargado de determinar las prioridades de uso del embalse. El principal conflicto aquí es económico, pues en la época del año en que los agricultores buscan acumular agua para la temporada de riego, las eléctricas tienen la mejor perspectiva económica para su generación hidroeléctrica y, por ende, les interesa utilizar las reservas.
En Colbún confirman su participación en las negociaciones, pero en calidad de “oyentes” y añaden que una vez que haya un borrador de la reforma a los estatutos decidirán.
“Nos parece que aún se debe trabajar para lograr los consensos necesarios que permitan que todos los usuarios se sientan correctamente representados. Colbún ha dado reiteradas señales de tener una cultura dialogante, y eso se mantendrá, pero pensamos que hay puntos medulares por trabajar, antes de tomar una decisión en estas materias”, dicen en Colbún.
La participación de Endesa en la junta de vigilancia es parte del acuerdo que viabilizó la construcción del proyecto Los Cóndores –150 MW y una inversión de US$ 660 millones-, al que los agricultores se oponían. En 2008, Endesa demandó al Estado para que reconociera que la administración de los embalses se regía por la ley sectorial y el Cdec-SIC, y no por el Código de Aguas.
Este modelo de participación existe hace varios años en otras cuencas donde se replica la pugna entre usuarios de distinto perfil, como en el Maipo, donde AES Gener –que hoy desarrolla el proyecto Alto Maipo- fue la primera eléctrica en integrarse al organismo.