El sólido crecimiento registrado en los últimos años por las economías de la Alianza del Pacífico está llevando a los inversionistas y expertos a dividir a la región en dos, con los países de la costa Atlántica, como Brasil y Argentina, marcados por el estancamiento.
Pero esa división va más allá del favoritismo de los mercados y se está traduciendo en diferencias prácticas, con tres de las cuatro economías de la Alianza embarcadas ya abiertamente en una política monetaria expansiva para apoyar el crecimiento, mientras que vecinos como Brasil dan señales de endurecimiento para hacer frente a las presiones inflacionarias.
Tras recortar la tasa de interés en un cuarto de punto a 3,75%, Chile se convirtió el martes en la tercera economía de la región en reanudar los recortes en los últimos dos meses, junto con Perú y México. Los tres países, que forman parte del bloque alabado por los inversionistas por su prudencia fiscal y apertura económica, precisamente han podido echar mano a una política monetaria más expansiva gracias a la ausencia de presiones inflacionarias.
Brasil bajo presión
Su situación contrasta con vecinos como Brasil, que el miércoles mantuvo la tasa sin cambios en 11%, su nivel más alto desde enero de 2012. Ese año los tipos cayeron a un mínimo histórico de 7,25%, con el banco central presionado por la presidenta Dilma Rousseff para recortar el costo del dinero y ayudar a combatir el estancamiento de la economía. Pero, a medida que la inflación daba señales de salirse de control, en abril del año pasado el instituto emisor inició una racha de nueve incrementos.
Pese a la última decisión, los analistas apuestan a que los tipos seguirán su camino ascendente. Tras su última reunión, el banco central de Brasil dejó la puerta abierta a un mayor endurecimiento. El cambio de énfasis se produjo una semana después de que el IPC superara en junio por primera vez el techo del rango meta de 6,5%.
“Existe la posibilidad de que la inflación siga subiendo y tenga que subir las tasas, y existe la posibilidad de que el menor crecimiento reduzca la inflación y abra una venta para recortes”, comentó a Bloomberg el economista jefe de Banco Espírito Santo, Jankiel Santos. Aunque la mayoría de los analistas proyecta que no habrá cambios en lo que resta del año, Bank of Tokio Mitsubishi ve los tipos llegando a 12% en el cuarto trimestre. Por su parte, Santander proyectó que alcanzarán 12,5% a fines del próximo año. “El escenario más probable es que el menor crecimiento del PIB esperado para 2014 no sea suficiente para reducir la inflación en 2014”, señala un informe de la entidad.
Margen para actuar
En Chile, en cambio, las menores presiones inflacionarias dejaron espacio para retomar los recortes de tasas, tras la rebaja de un cuarto de punto porcentual aplicada en marzo. El Índice de Precios al Consumidor se desaceleró por primera vez en ocho meses en junio a 4,3%, por debajo del 4,5% que proyectaban en promedio analistas encuestados por Bloomberg y del 4,7% de mayo.
Además de Chile, Perú y México también han aplicado recortes en los últimos dos meses a medida que el crecimiento pierde fuerza. En Perú, la actividad económica se expandió 1,8% en mayo, casi la mitad del 3,1% que esperaban los analistas, mientras que en México el PIB creció 1,8% en el primer trimestre, por debajo de las estimaciones de 2,1%.
Las autoridades en la nación azteca sorprendieron al mercado al anunciar un recorte de 50 puntos base a comienzos de junio, llevando los tipos a un mínimo histórico de 3%. Aunque el banco central sólo ha cumplido su meta de inflación de 3% en un mes desde que Agustín Carstens asumió al mando del emisor, en 2010, los precios han tendido a la baja. El índice se desaceleró a 3,5% en abril y mayo, su menor nivel desde noviembre y aunque repuntó en junio está lejos del 4,48% que marcaba enero.
También en Perú el recorte de un cuarto de punto del 10 de julio llegó como sorpresa, luego de que los tipos se mantuvieran estables por ocho meses. La inflación en Perú registra ya cuatro meses de declive, acumulando un avance de 3,45% en junio, desde 3,56% en mayo. La autoridad monetaria, que tiene un rango meta para la inflación de entre 1% y 3%, afirmó en el comunicado tras su último encuentro que la inflación seguirá convergiendo hacia la meta este año para caer a 2% en 2015.
Colombia, la excepción
Dentro de la Alianza, Colombia es la única nación que está subiendo los tipos. El emisor colombiano elevó la tasa por tercer mes consecutivo en junio, aplicando un incremento de un cuarto de punto a 4,0%.
Con un crecimiento del PIB de 6,4% en el primer trimestre, la economía se expandió a su ritmo más acelerado en más de dos años. Las autoridades locales han advertido que el crecimiento ya se encuentra cerca de su potencial, lo que está acumulando presiones inflacionarias. Para fines de 2015 los tipos llegarían 5,25%, espera Juana Tellez, economista jefe de BBVA Colombia.