Así lo aseguraron diferentes especialistas, al referirse a la solicitada que sacó el American Task Force Argentina y los estudios de "supuestos analistas objetivos".
Primero fue la solicitada que anunciaba el default argentino y la polvareda que llevó a que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, respondiera tajante: "Argentina pagó y por eso no puede entrar en default". Luego llegó el artículo que publicó el profesor Bernard Weinstein, contratado por los lobbistas de los fodnos buitre, en un medio norteamericano. En diálogo con minutouno.com, economistas cuestionaron el interés de los fondos de inversión "carroñeros en Vaca Muerta y todos los recursos argentinos".
"No es ninguna novedad lo que hace el ATFA, son lobbistas profesionales, una parte importante de sus negocios pasa por ahí, con políticos, con empresarios, con la sociedad civil. Destinan millones de su presupuesto. Y Weinstein, que se escuda en una supuesta objetividad técnica, también es parte de ese engranaje", explicó Fernanda Vallejos, la responsable de militancia de La Gran MaKro.
A su vez, la economista explicó que "desde los principios de los tiempos los fondos buitre vienen demostrando su interés en los recursos nacionales, como con Vaca Muerta" y por eso, aseguró, amenazan con que desaparecerán las inversiones en caso de no negociación con los holdouts.
"Lo que buscan, en el fondo, es la caída de la reestructuración de la deuda y la aplicación de la cláusula RUFO por lo que Argentina debería renegociar con todos los acreedores", indicó Vallejos, a la vez que descartó que se cayeran las inversiones en Vaca Muerta: "En ese sentido, coincido con Aldo Ferrer: si el negocio es buena las inversiones van a venir igual".
Agustín D'Attelis, responsable de comunicación de la misma organización que Vallejos, dialogó en C5N y coincidió con Vallejos en que los fondos buitre -a través de sus lobbistas- buscan "generar extorsión y zozobra" a la vez que dejar asentado el interés que tienen en los recursos argentinos.
Además, explicó que tanto la solicitada como el artículo de Weinstein "son pagados por el ATFA y buscan plantear el fantasma apocalíptico de un default en Argentina".
"Son sectores con intereses específicos para explotar Vaca Muerta como negocio privado. Se preocupan porque Argentina en bloque como con los países de los BRICS trabaja en explotación como activo fundamental para el país y no lo entrega a intereses privados", aseguró D'Atellis.
InfoNews
El grupo American Task Force Argentina (ATFA), creado por Paul Singer para hacer lobby en favor de los fondos buitre, difundió hoy un artículo de Bernard Weinstein, profesor de negocios de la Universidad Metodista del Sur de Estados Unidos, que advierte que si Argentina entra en "default técnico" podrían peligrar las inversiones para explotar el yacimiento de Vaca Muerta, el principal proyecto energético del país.
En su columna publicada en el Investor’s Business Daily, Weinstein, que según los buitres es "un reconocido experto en el desarrollo del mercado energético a nivel mundial", sostiene que "un default nuevo reduciría sustancialmente las perspectivas para la inversión extranjera en el futuro (…) en el sector económico con el mayor potencial de crecimiento".
Al citar esta nota en un sitio web creado para "verificar" y contrarrestar los supuestos "mitos" del gobierno argentino en el conflicto, la ATFA opinó que es "es irónico que, siendo una importadora neta de energía, Argentina se encuentra emplazada arriba de una de las más grandes áreas petroleras sin desarrollar en todo el planeta".
"Chevron acaba de firmar un acuerdo por 1,600 millones este año y se ha comprometido a invertir hasta 15 mil millones en el futuro. Pero si Argentina entra en default el 30 de julio, es posible que Chevron reconsidere sus decisiones", afirman los buitres y, según analiza Weinstin en la misma línea, tal vez "otros inversores extranjeros prefieran esperar a ver qué pasa o pidan condiciones más favorables para garantizar su participación".
Qué es el grupo ATFA
El grupo American Task Force Argentina (ATFA) es uno de los encargados de crear una imagen negativa del país en el mundo de cara al conflicto con los fondos buitre que no ingresaron al canje.
La agrupación fue creada por Paul Singer, uno de los principales titulares del holdout, que está en litigio con la Argentina y que fue beneficiado por el reciente fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos.
Según informó el sitio de noticias Infojus, su forma de acción radica en realizar tareas de lobby político a través de reuniones con jueces y legisladores. Además, operan a través de los medios de comunicación y organizan manifestaciones públicas en la calles -frente a la embajada Argentina en Washington- y campañas a través de redes sociales.
El Gobierno rechazó el default técnico
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aseguró hoy que "Argentina no está, no va a estar y no puede estar en default porque Argentina paga, cumple regular y responsablemente sus obligaciones" y, además, "el default técnico es un eufemismo articulado por las calificadoras de riesgo, un argumento que pretenden esgrimir algunos bonistas para ejecutar acciones judiciales".
En ese sentido, Capitanich denunció que "existe una estrategia deliberada para que los acreedores no perciban los pagos, que ya están depositados" y reiteró que "el eufemismo del default técnico no existe más que en la literatura de agentes nacionales e internacionales que pretenden poner a la Argentina en una posición en la que no está".
El artículo original se publicó en un diario de negocios norteamericano -el Investor's Business Daily- y está firmado por el profesor Bernard Weinstein, un especialista en materia energética que, sin embargo, es financiado por el propio American Tasck Force Argentina, el organismo de lobby de los fondos buitre.
Además, en la web oficial de los buitres, se reproduce el texto en el que se analiza la situación financiera argentina, las inversiones requeridas para el desarrollo del emplazamiento Vaca Muerta en la Patagonia y se concluye que, sin negociación con los holdouts y pago de la deuda, no habrá inversiones para lograr la "soberanía energética" mentada desde el gobierno nacional.
El artículo refiere a Vaca Muerta como una de las reservas más grandes del mundo y lo contrasta con la "irónica" situación de que el país deba importar combustible. A la vez, advierte que Chevron, con quien se selló un acuerdo para invertir 1600 millones de dólares y hasta 15 mil millones en el futuro -de los 250 mil millones que el propio especialista dice que serán necesarios para desarrollar todo el potencial de la reserva- podría rever su decisión en caso de default.
Y va más allá Weinstein: "Otros inversores podrían esperar a ver que pasa o pedir condiciones más favorables".
Finalmente, el artículo ataca al Ministro de Economía, Axel Kicillof, a quien acusa por su ideología y señala que "prefiere importar combustible para calefacción a perpetuidad, o aún hipotecar las reservas de Vaca Muerta a China y a Rusia, antes de resolver su conflicto con los holdouts".
Weinstein es además empleado del George W. Bush Institute y es director asociado del Instituto SMU-COX (una universidad especializada en energía).
Un economista financiado por la ATFA aseguró que la Argentina tendrá problemas para desarrollar inversiones en el yacimiento de gas y petróleo no convencional si no acata el fallo de Griesa en favor de los fondos buitre. Respuesta del Gobierno.
Los fondos buitre ahora amenazan con Vaca Muerta. La advertencia sobre la tercera mayor reserva de combustible no convencional del mundo lleva la rúbrica del economista del George W. Bush Institute, Bernard Weinstein, especialista en energía, quien es financiado por el órgano de lobby buitre American Task Force Argentina (ATFA). Weinstein sostuvo que no acordar con ellos podría derivar en una reversión de las inversiones en ese yacimiento neuquino, situación que llevaría al país a continuar importando energía. Por su parte, el grupo de tareas que representa a estos fondos especulativos publicó ayer una solicitada, difícilmente legible en su traducción, con errores de ortografía groseros, en la que insiste en que el país podría caer en default técnico si no acata la orden del juez Thomas Griesa. La publicación recibió duras críticas de funcionarios, especialistas, economistas y organizaciones de distintos ámbitos académicos.
El economista financiado por la ATFA publicó un artículo en el Investor Business Daily con el título "Argentina: al borde del default", en el que analiza las supuestas repercusiones que tendría una eventual cesación de pagos sobre el sector energético de Argentina. Defensor del fracking y de la liberalización del mercado petrolero, Weinstein considera que "otro default podría reducir las perspectivas para la inversión extranjera" en el sector económico con más potencial de crecimiento. "Irónicamente, como un importador neto, Argentina se sienta encima de una de las más grandes reservas de petróleo del planeta", advierte, tras lo cual estima que el pleno desarrollo del potencial de esas reservas de petróleo no convencional podría requerir hasta 250.000 millones de dólares en inversión. "Recientemente, Chevron firmó un acuerdo para invertir 1600 millones de dólares este año y hasta 15.000 millones de dólares en un futuro, pero si Argentina cae en default el 30 de julio, Chevron podría reconsiderarlo y otros inversores extranjeros probablemente podrían esperar o pedir condiciones más favorables para participar", especula en su artículo.
Fuentes oficiales señalaron a este diario que el artículo de Weinstein revela las verdaderas intenciones de los buitres, "Escudado en una supuesta imparcialidad técnica, pone de manifiesto que de no cumplir con las exigencias de la Justicia norteamericana, se comprometería el desarrollo hidrocarburífero y energético del país", advierten. "El artículo refleja que están buscando quedarse con la riqueza hidrocarburífera de nuestro país y ya han intentado adueñarse de Vaca Muerta a través de embargos", agregan. "¿Cómo se explica si no que el fondo buitre NML haya conseguido la aprobación de la Justicia de Estados Unidos para buscar información de los activos de YPF dentro y fuera del país, en especial de aquellos localizados en la provincia de Neuquén?", fue la pregunta a modo de ejemplo que dieron en el Gobierno.
La solicitada de la ATFA también enojó a los funcionarios. El texto se compone de sentencias breves, con groseros errores gramaticales y de sintaxis --producto de una mala traducción--, que buscan un impacto directo en el lector. "¿Estará la Argentina sentando las bases de un default?", es el título. La interpretación del equipo económico es que un default como el que intentan imponer los fondos buitre les dejaría el camino libre a quien quiera quedarse con el yacimiento. También apuntan a cierta connivencia de Estados Unidos, que se propone obstaculizar no solo el desarrollo de la Argentina, sino la formación de un nuevo bloque político y económico internacional como son los Brics. La publicación de ATFA y Weinstein apareció el mismo día en que Cristina Kirchner se reunía con este grupo.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, replicó la maniobra de los buitres y aseguró que el país "no está, no estará y no puede estar en default" porque el Estado paga a sus acreedores. El economista de la Gran Makro Agustín D`Attellis remarcó que el objetivo de los buitres y la ATFA es claro: "Van por Vaca Muerta, y lo hacen pretendiendo asustar con la posibilidad del default técnico". La economista Fernanda Vallejos coincidió que el interés de los fondos especulativos en los recursos estratégicos argentinos "no es nuevo, pero ahora se plantea de forma más orgánica con las declaraciones del lobbista Weinstein".
El grupo American Task Force Argentina (ATFA), creado por Paul Singer para hacer lobby en favor de los fondos buitre, difundió ayer un artículo de Bernard Weinstein, profesor de negocios de la Universidad Metodista del Sur de Estados Unidos, que advierte que si Argentina entra en “default técnico” podrían peligrar las inversiones para explotar Vaca Muerta.
En su sitio web, la ATFA menciona que Chevron acordó este año invertir 1.600 millones de dólares en su sociedad con YPF en Loma Campana, con un horizonte de 15 mil millones de dólares para desarrollar el yacimiento, pero advierte que “si Argentina entra en default el 30 de julio, es posible que Chevron reconsidere sus decisiones”.
En la misma línea, en su artículo, Weinstein aseguró que es posible que “otros inversores extranjeros prefieran esperar a ver qué pasa o pidan condiciones más favorables para garantizar su participación” en Vaca Muerta.
Entre a China y Rusia
La American Task Force Argentina también apuntó al ministro de Economía, Axel Kicillof, al considerar que se mueve “por intereses ideológicos hasta tal punto que prefiere importar combustible para calefacción a perpetuidad, o aún hipotecar las reservas de Vaca Muerta a China y a Rusia, antes de resolver su conflicto con los holdouts”.
La ATFA es uno de los grupos de lobbistas encargados de crear una imagen negativa del país en el mundo de cara al conflicto con los fondos buitre que no ingresaron al canje.
Ayer economistas afines al gobierno nacional salieron a responder al grupo financiado por Paul Singer. Ernesto Mattos, del Centro de Investigación y Gestión de la Economía Solidaria, indicó que los fondos buitre no quieren que prospere “ningún tipo de acuerdo” y tienen la intención de frenar inversiones en Vaca Muerta, ya que les preocupa la posibilidad de que Argentina sea una potencia energética.
“La idea de ellos es que Argentina llegue al default para mejorar las condiciones de negociación de Chevron y de esa forma frenar las inversiones de otras empresas”, consideró
Por su parte, el economista de la Gran Makro y profesor investigador de la Universidad Nacional de Moreno, Agustín D’Attellis, aseguró que “los fondos buitre van por Vaca Muerta y lo hacen pretendiendo asustar con la posibilidad del default técnico”.
Comentó que el artículo de Weinstein “se publica en un momento poco casual, ya que se hace cuando la Argentina participa de la reunión de los BRICS; es decir, cuando está en un ámbito donde a estos intereses neoliberales, realmente les asusta la posibilidad de que consigamos apoyo y hasta un eventual financiamiento”.
“Se trata, en definitiva, de presentar un escenario apocalíptico para realizar un negocio privado porque además, tanto los fondos como este economista gritan a quien quiera oír, la importancia de, por ejemplo, desregular los mercados energéticos”, agregó D’Attellis.
Cristina Kirchner volvió hoy a juguetear con la idea de un nuevo default del país, aunque lo hizo eligiendo las palabras con el cuidado de una abogada. Negó enfáticamente que la Argentina se encamine a un nuevo default, pero condicionó el pago a los buitres a que sea un “pago justo y soberano”.
En su intervención en la cumbre de los BRICS en Brasilia, que reunió a varios mandatarios de la región, Cristina centró su discurso en la batalla que mantiene con los fondos buitres, ligándola a la necesidad de construir un nuevo orden financiero internacional, con nuevas instituciones como el Banco de Desarrollo y el fondo estabilización que acordaron crear los BRICS.
“Planteamos un nuevo ordenamiento económico mundial justo y razonable. La Argentina sufre un fortísimo ataque especulativo por parte de los denominados fondos buitre", alertó en su discurso en la cumbre realizada en el Palacio Itamaraty.
"Argentina va a seguir pagando porque el default es no pagar y solamente puede declarar el default o la cesación de pagos el país que no paga, como ya sucedió. Pero la Argentina seguirá pagando por que es un país solvente y está convencida que debe honrar sus deuda con el 100% de sus acreedores en forma justa, equitativa y racional", afirmó la Presidenta.
Esa afirmación pareció despejar los temores de que el país enfrente una nueva cesación de pagos de su deuda externa, tal como reveló ayer LPO en exclusiva, luego que trascendiera que la Presidenta esta dispuesta a sufrir un nuevo default si el juez Thomas Griesa no repone el stay o le da alguna garantía de que el pago a los buitres no disparará la cláusula RUFO y la Argentina enfrentará reclamos de todos los bonistas reestructurados.
Sin embargo, la Presidenta volvió a dejar abierta esa posibilidad, al agregar que sólo está dispuesta a pagar bajo ciertas condiciones. “No estamos diciendo que no les vamos a pagar nada, estamos diciendo que queremos pagar en forma justa y soberana”, sostuvo y advirtió que podría caer toda la reestructuración de la deuda, en caso de que "paguemos más a los que quedaron afuera del canje que a los que aceptaron el canje".
Y agregó que si los fondos buitres entraran al canje de deuda al igual que el resto de los bonistas "en dólares ganarían una tasa de 300%”. Esta afirmación es casi una provocación a los buitres que precisamente fueron a un juicio que llegó hasta la Corte Suprema de Estados Unidos, porque se negaron a entrar a ese canje que denominaron “coercitivo”.
Ahora esos fondos tienen un fallo de Griesa ratificado por todas las instancias de la justicia norteamericana, que les da derecho al pago del 100% del valor de sus bonos más intereses, lo que supera los U$s 1.300 millones, cifra que crece con cada día que pasa sin que la Argentina firme un entendimiento.
Las contradicciones de Griesa
Luego en uno de los tramos más filosos de su discurso se refirió a la evidente incomodidad en la que quedó el juez neoyorkino Thomas Griesa, al prohibir al Banco de New York y otras instituciones concretar el último pago a bonistas reestructurados.
"Los que decidieron no entrar a los canjes hicieron más de 900 juicios por todo el mundo y llegaron a embargarnos el buque insignia de la Argentina (La Fragata Libertad) en Ghana, en un hecho insólito, violando todas las normas internacionales, pero que después de dos meses, y de un intenso juicio, la recuperamos", comenzó.
Y advirtió que "ahora, ante la imposibilidad de seguir embargando han avanzado con lo que no les pertenece: han embargo lo que le corresponde al 92% de los bonistas que entraron a los canjes", al calificar de esa manera la orden de no pago de Griesa del último Discount.
Para luego centrarse en ciertas inconsistencias de Griesa ante esta peliaguda situación. "Ha habido disposiciones disímiles con esos bonos, porque no saben qué hacer. Los de legislación argentina se pagaron. Pero el Citibank se presentó ante el juez y le permitieron pagar, y no lo hicieron con el Bank of New York, Euroclear y Eurobank. Estamos hablando de interpretaciones inéditas y totalmente irracionales", afirmó.
Y volvió a amenazar con cambiar la jurisdicción de pago de los bonos por el incumplimiento de las entidades contratadas para ese fin. "Los recursos depositados son propiedad legítima y legal de los tenedores de bonos de los canjes de 2005 y 2010. Las instituciones bancarias deberán hacerse responsables de no transferir esos recursos", advirtió.
Vacas y Buitres
Luego la Presidenta avanzó en una de sus clásicas teorías conspirativas, y sostuvo que detrás de la intransigencia de Griesa habría una suerte de complot para derrumbar el proceso de reestructuración dela deuda externa Argentina y así poder avanzar sobre el control de la reserva de shale de Vaca Muerta, tema rápidamente replicado por sus dirigentes más cercanos en las redes sociales.
"Los fondos buitre no fueron inversores en la Argentina. Compraron bonos que ya habían sido defaulteados en 2008, después de ocho años del default, y tres años después de la primera reestructuración. Nunca le prestaron plata a la República Argentina y los compraron por centavos, por u$s 48 millones, y la sentencia de Griesa les reconoce una renta en dólares del 1608%", recordó al inicio de ese tramo de su discurso.
"¿Qué ejemplo es para el mundo que alguien que pone u$s 48 millones solamente con un juicio obtiene una rentabilidad de 1.608% en solo seis años?", se preguntó, y agregó que encima los buitres "tienen domicilios en paraísos fiscales" y cuentan con "fuerzas policiales políticas, como la ATFA, que incluye a lobbistas estadounidenses y publican solicitadas contra la Argentina", como hicieron esta mañana en los diarios de la Argentina.
De inmediato, vinculó ese ataque al interés que despiertan los recursos energéticos de Vaca Muerta. "La Argentina cuanta con la segunda reserva de Shale gas y la cuarta de petróleo del mundo, que en 2017 o 2018 nos convertirá en autosuficientes y con capacidad de exportar energía", detalló y alertó por el reciente artículo del economista republicano Bernard Weinstein, que advirtió sobre la posibilidad de que un nuevo default del país ponga en riesgo la inversión de Chevrón en Vaca Muerta.
"Se refiere en forma ofensiva a dos importantes miembros del G-20 como Rusia y China y hace mención a la inversión de Chevrón en Vaca Muerta", comentó Cristina, sobre el escrito del defensor de los buitres. "Amenaza que de no arreglar como ellos quiere, se retiraría Chevrón ¿realmente ustedes creen que el problema es jurídico, o por u$s 1.500 millones de dólares? ¿O lo que realmente se pretende hacer es hacer caer la reestructuración de la deuda argentina, de la que ya pagamos 190.000 millones de dólares?", preguntó Cristina inquietante.
"Vienen nuevamente para imponer un sobreendeudamiento en una Argentina muy rica", enfatizó y reiteró que el precio de "tener la segunda reserva de shale gas y la cuarta de petróleo, además de ser un productor de alimentos, lo que constituye al país en "una presa muy codiciada para todos".