El trato no incidiría en el precio a los consumidores, pero mejoraría las finanzas de Enap, ya que la estatal podría comprar el insumo a valores más competitivos.En los primeros días de marzo, el Diario Oficial informó sobre un hecho que pasó casi inadvertido: la promulgación de un decreto que eliminó el arancel de 6% para una serie de países petroleros ubicados en su mayoría en África y Asia. El decreto permite importar, a precios competitivos, crudo de países como Angola, Sudán y Senegal. Un gran avance, considerando que hoy la Enap interna crudo de un reducido pool de suministradores (básicamente desde Ecuador, Brasil y Argentina, entre otros), justamente por la existencia del mencionado arancel. Esto reduce la capacidad de negociación de la firma.
Según trascendió, aproximadamente en tres semanas más una comitiva del Gobierno con representantes del Ministerio de Energía y de la firma estatal, y que incluso podría encabezar la Presidenta Bachelet, viajaría a Angola a firmar un acuerdo para importar petróleo. A partir del convenio, el país africano suministraría cerca del 30% de las necesidades locales de crudo, transformándose en uno de los principales proveedores del combustible para Chile.
Según datos de la CNE, a febrero de 2014 el 45% de las importaciones de crudo venían de Ecuador, el 20% de Brasil, el 20% de Canadá, el 10% de Inglaterra y el 5% de Argentina. El acuerdo alteraría ese orden.
Un producto más competitivo es el que comenzaría a recibir Enap desde el país africano. Según entendidos, el crudo de Angola es menos pesado, porque tiene un bajo contenido de azufre, por lo que su procesamiento sería más barato, al igual que como ocurre, en general, con este insumo en Medio Oriente, que es más liviano. Esto, sumado al arancel cero, permitirá a Chile acceder a un mejor precio. Así —explica una fuente del sector energía—, los países que hoy proveen de petróleo a Chile podrían verse forzados a reducir sus valores. “Hay que ver el diferencial de precios entre Angola y los otros países. Pero sin duda aumentará la capacidad competitiva”, asegura.
Sin embargo, la misma fuente explica que como el petróleo es un commodity y se vende según el precio paridad —es decir, considerando el valor que marca la costa del golfo de México más el tipo de cambio—, el acuerdo con Angola no incidiría en el precio final al consumidor y significaría un mejor margen para la Enap. De hecho, en la industria se estima que solo la eliminación del arancel le permitiría a la firma estatal un ahorro de entre US$ 30 millones y US$ 60 millones anuales por la compra de crudo a mejores precios.
El actual gobierno de la Presidenta Bachelet pretende impulsar un rol más activo del Estado en materia energética, lo que considera un fortalecimiento de Enap.
Por su parte, desde el gobierno anterior que la estatal viene pidiendo una capitalización por US$ 1.000 millones, un proyecto de ley de gobierno corporativo y la supresión del arancel a países africanos.
Meses atrás, la Presidenta anunció la capitalización de Enap con US$ 400 millones. Junto con estos recursos, se avanzaría en el proyecto de ley que modificará el gobierno corporativo de la estatal. Estas iniciativas podrían ser enviadas al Congreso el primer trimestre de 2016, según estima el Gobierno.