Simple, franco y sin temas vedados. Así fue la primera intervención mediática en Chile del nuevo CEO de Enel, Francesco Starace.
El máximo ejecutivo de la italiana que controla las operaciones de Endesa España en la América Latina, anunció las medidas que implementará en las próximas semanas para adaptar la estructura de la compañía y de sus filiales a los ejes de su gestión.
Reducir la deuda de Enel (mediante la venta de activos de distribución en Rumania y Eslovaquia) y lograr una gestión que administre eficientemente el Ebitda de la compañía, que anualmente ronda los 15.000 millones de euros, generando caja suficiente para desplegar sus planes de inversión, son las bases de la batería de ajustes que Starace comenzará a implementar dentro de algunas semanas.
En este sentido y tal como se venía especulando, el CEO de la italiana confirmó que por estos días sigue analizando la opción de trasladar desde Madrid a Roma el control del brazo de inversiones de Endesa España en Latinoamérica. Sin embargo, precisó que aún no existe una decisión al respecto, pues esto podría hacerse a través de varias figuras.
“No es nada nuevo, es algo que hace años está al examen de los accionistas. Lo que pasa es que en Enel tenemos como 800 sociedades y varias son coligadas. Esa complejidad tiene que ser gestionada, en cierta manera, arreglada. En ese contexto está esa idea de poner a Enersis directamente en Enel. Es una de muchas alternativas pero no la única. Y vamos a trabajar en eso”, precisó.
Este trabajo, dijo, debería estar definido hacia septiembre u octubre. Algo que se despejaría antes, dentro de unos 15 días, añadió es la reorganización de los negocios de la italiana a nivel global, lo que constituye el segundo eje de su gestión y que, obviamente, incluye las operaciones agrupadas bajo el paraguas de Enersis.
“Estamos simplificando la estructura del grupo. Como he dicho tenemos demasiadas sociedades y no todas tienen una justificación ahora”.
Starace explicó que este diseño considera establecer cinco divisiones que gestionarán los distintos negocios de Enel. Este ordenamiento, dijo, sólo tiene fines de gestión y no de ordenamiento societario.
“Vamos a poner el negocio como centro de la organización”, apuntó. De esta forma, las nuevas áreas serán de distribución de electricidad, generación no renovable (incluirá activos hidroeléctricos que superen los límites de ERNC fijados ne cada país); generación renovable no convencional, que quedará en Enel Green Power; y exploración de gas en Enel Upstream, otra sociedad ya existente.
Otra área se encargará de comercializar la energía y tendrá equipos en cada país, considerando las regulaciones locales y será la encargada de generar los flujos de caja que luego se invertirán.
Starace dijo que con esta reorganización se alivianará la estructura de Enel y con ello, por ende, la de Enersis, cuya dirección en el mediano plazo, precisó, se mantendrá en Chile. “Se busca reducir la complejidad de gestión y los cargos. El objetivo es reducir el número de estaciones” que intervienen en la gestión de la compañía, explicó el CEO de la italiana.
Proyectos en revisión
En el caso de Enersis no sólo su estructura está en revisión, sino que también los proyectos de su brazo de generación, Endesa Chile, debido a los conflictos sociales que han derivado en el rechazo de varias inversiones.
Starace está consciente que los problemas de la eléctrica en el Cono Sur no se limitan sólo al rechazo de HidroAysén ni a Chile, sino que la empresa también enfrenta conflictos en otros países de la región.
“Si tuviésemos la inversión a la mitad de la construcción y surge un inconveniente tendríamos un problema, pero en la etapa en la que está HidroAysén se puede cortar, se puede postergar diez años… hay muchas cosas que se pueden hacer con él”, precisó.
Starace agregó -sin rodeos- que éste “es un proyecto que no gusta a los chilenos y no se puede hacer algo contra un país”, por lo que cree que no es posible continuar con él.
Por ello, el máximo ejecutivo de la italiana adelantó que pondrán en revisión todo el portafolio de proyectos de Endesa en la región, para detectar aquellos que tengan problemas sociales latentes, a fin de solucionarlos, así como priorizarán la construcción de aquellos que tengan consenso y no vayan a ser detenidos a raíz de los conflictos.
Reuniones con Bachelet y políticos
La agenda de Starace contempló ayer un encuentro en La Moneda con la presidenta Michelle Bachelet. Al respecto, el máximo ejecutivo de Enel, explicó que esta cita con la mandataria fue de cortesía, que en ella no abordó la situación de ninguno de los proyectos de la compañía que tiene conflictos, y que aprovechó para manifestarle su aprobación por la Agenda de Energía. "Es un ejemplo de política buena en un plazo corto", dijo.
Anoche, Starace tenía previsto reunirse con figuras políticas, como el ex presidente Eduardo Frei. "Los amigos políticos me ayudan a comprender la evolución de la sociedad chilena, porque no podemos estar bien en un país sin comprender esto". Añadió que "cada vez este país me interesa más, pero lo comprendo menos, eso es algo muy complejo". Esta mañana, en tanto, se reunirá con el ministro de Energía, Máximo Pacheco, para profundizar sobre algunos puntos de la Agenda de Energía, dijo.
El ascenso de Francesco Starace como el hombre ancla de Italia en la estatal Enel generó una fuerte incertidumbre sobre el futuro de Endesa España y, por ende, de las operaciones de Endesa y Enersis en Chile y en el resto de la región. En abril, el gobierno italiano, que tiene el 31,5% de la propiedad de Enel, nombró a Starace como nuevo consejero delegado y director general de la compañía. Su misión principal es reducir la deuda de la italiana, que ronda los US$ 67 mil millones.
Para cumplir la meta, se espera que el ejecutivo diseñe una hoja de ruta, que contemplaría cambios en España, los que impactarían también a Chile y a los futuros desarrollos que impulse la compañía.
Francesco Starace llegará a Chile ahora como el máximo ejecutivo de la italiana. En junio de 2013 vino al país, como CEO de Enel Green Power, para inaugurar el parque eólico Talinay, en la Región de Coquimbo. Dos días son los que el máximo ejecutivo pasará en el país, comenzando el lunes con una visita a La Moneda, donde se reunirá con la Presidenta Michelle Bachelet. A la cita llegará acompañado por la alta gerencia de Endesa y Enersis en Chile. Luego tendrá una reunión con la prensa local y el martes al mediodía asistirá a la inauguración de Smartcity Santiago, la primera ciudad inteligente, iniciativa que impulsa Enersis y que se desarrollará en Ciudad Empresarial. El evento contará con la presencia del ministro de Energía, Máximo Pacheco.
La visita de Starace se da en una semana clave para el grupo, ya que HidroAysén debería recibir formalmente la notificación sobre el rechazo a la construcción del proyecto que Endesa impulsa con Colbún en Aysén. El ejecutivo de Enel aún no se ha manifestado respecto de las inversiones del grupo en el país, declaración que sería clave para dilucidar el camino que podría seguir la iniciativa. Antes de conocerse el pronunciamiento de los ministros, la italiana era enfática en destacar que HidroAysén sólo podría llevarse adelante con la venia del gobierno y con la gestión que éste realice sobre todos los procesos y sus licencias. Hasta ahora, la señal de Endesa es esperar las definiciones sobre el uso de las cuencas y también del territorio, aspectos considerados en la agenda energética que impulsa el gobierno y que tendrían que estar en 2015.
¿Nueva estructura?
En los casi tres meses que lleva en el nuevo cargo, Francesco Starace ya ha dado señales. En junio visitó las oficinas de Endesa en España y se reunió con los máximos ejecutivos de la hispana. En la ocasión ratificó a Borja Prado como presidente de la eléctrica y también aseguró que la italiana no dejará España y que no se desprenderá de Endesa. “Endesa es y será parte integrante de Enel”, dijo.
Esta semana, Starace dio otra señal que ya sonaba fuerte en el mercado y que tendría impacto directo en Chile y la región. Según la prensa hispana, en su primera reunión protocolar, el ejecutivo planteó al ministro de Industria de España, José Manuel Soria, la intención de Enel de controlar directamente las filiales de Endesa en Latinoamérica, lo que toca directamente a Enersis, el brazo inversor de la hispana en la región, donde tiene 60,62% de participación. Esa alternativa, habría sostenido Starace según los medios españoles, es “la más probable” de concretar, pero aún está bajo estudio por los efectos legales, fiscales y corporativos de la nueva estructura.
Hace unas semanas, el banco de inversiones UBS consideró ese escenario en un informe donde indicó que, probablemente, el holding Enersis dejará de pertenecer a Endesa España y será controlado directamente por Enel. Según el banco, la integración en Latinoamérica parece “un paso natural” para Enel, lo que también le serviría para reducir su endeudamiento, convirtiendo a Endesa en una gran filial ibérica, distribuidora de dividendos y donde la italiana podría vender participación. Estimó que el proceso se haría en los próximos 12 meses.
Ese escenario no es tan lejano. Starace ha dicho que en América Latina “es necesario simplificar la estructura societaria”. En una entrevista al diario italiano 24 Ore, afirmó que en la región “tenemos una situación corporativa compleja” y que la participación del controlador se cruza con la de los minoritarios, “lo que complica la gestión y el tránsito aguas arriba del valor creado”. Enersis tiene operaciones en Chile, Argentina, Brasil, Perú y Colombia, y con el aumento de capital que culminó en marzo de 2013 se consolidó como la principal eléctrica listada de Sudamérica, con un valor de mercado de US$ 17 mil millones. Enersis hoy está elevando su participación en firmas donde es minoritaria. Ya ha concretado la compra de Coelce y aún tiene US$ 2.100 millones para nuevas adquisiciones, los que podría usar para elevar su presencia en Pehuenche, donde tiene 55,6% y podría adquirir 7%; Chilectra, en que posee 99,1% y sumaría 0,9%, y en Endesa, donde agregaría 5% para llegar al límite de 65%. También podría aumentar su participación en la peruana Edelnor.
Simplificar la estructura es relevante para Enel. En la junta de accionistas de marzo, en Italia, Fulvio Conti, a quien reemplazó Starace, planteó que el programa 2014 a 2018 contempla concentrarse en el plan de optimización de inversiones, lo que implica aumentar la compra a minoritarios, sobre todo en América Latina. Starace ha indicado que el plan de adquisiciones sigue. En un reciente foro en Naciones Unidas precisó que diseñan una lista de activos que podrían ser objeto de venta, elevando el número de propiedades prescindibles para ampliar su capacidad de elección. El compromiso es desinvertir 4.400 millones de euros este año.
Focos de crecimiento
América Latina es uno de los focos de crecimiento del grupo, según Starace. En una entrevista a Financial Time dijo que quería subir el gasto de capital en las economías emergentes, para evitar el impacto de la crisis europea. Es que el máximo ejecutivo de Enel estima que en los países emergentes es donde el alza de la demanda eléctrica será más fuerte. Enel mira toda Latinoamérica, incluido México. En esa zona quieren participar con todo tipo de tecnología: renovables, tradicionales y en el área de distribución.
También está mirando Africa, por su potencial de crecimiento, dadas las necesidades energéticas, lo que podría beneficiar la concreción de un programa de inversión extranjera.