La desaceleración de la economía y el deterioro de las expectativas fue una de las variables clave que el gobierno puso sobre la mesa para sellar el protocolo de acuerdo con la oposición. Sin embargo, para el gerente de Estudios de Gemines Consultores, Alejandro Fernández, no es suficiente para calmar las expectativas del mercado ni mucho menos para que se reactiven los proyectos paralizados.
“No será suficiente para cambiar las tendencias de aquí a fines de año, ya que además el consumo se está desacelerando y eso va compensar cualquier recuperación que podría haber en la inversión”, indicó el economista.
- La señal que quiso dar el gobierno con el acuerdo tributario, ¿es suficiente para calmar la incertidumbre y reactivar la economía?
- Puede tener más relevancia para el próximo año, porque pese a los cambios que se le introdujeron a la reforma no hay que olvidarse que sigue siendo negativa para el ahorro y la inversión. Por ello, no debiéramos esperar una gran recuperación.
- ¿Qué otro factor de riesgo ve que estará presente durante este año y que generará incertidumbre?
- Más allá de la reforma tributaria, hay una serie de reformas adicionales que se van a presentar en el Congreso. Está la reforma a la educación y reforma laboral. A ello se suma la reforma previsional, que no se reduce a la AFP estatal, ya que también está la comisión Bravo que entregará su propuesta próximamente y, por último, está también la reforma constitucional que puede ser mucho más importante en las expectativas y en el desarrollo de las inversiones.
- ¿Entonces la incertidumbre no se acaba con el pacto para aprobar la reforma tributaria?
- No se acaba la incertidumbre con la aprobación de la reforma tributaria...
- El gobierno ha dicho que la economía irá de menos a más durante este año. ¿Ve posible que se cumpla lo propuesto por Hacienda?
- Si uno toma como referencia la encuesta del Banco Central, que considera un 2,9% este año, 3,8% para el próximo y 4% para 2016, nos llevará a un crecimiento de 3,6% en promedio. Lo que es bastante bajo, y sería el peor trienio desde 2001-2003.
- ¿Este menor crecimiento impactará en el PIB potencial y en las principales variables que se consideran para elaborar el Presupuesto?
- Es un tema muy relevante para la política fiscal. Si bien el crecimiento 2010-2012 fue alto, fue explicado por la reconstrucción y por las holguras de capacidad que generó la recesión, pero como no se hizo nada en materia productividad durante el gobierno anterior, el PIB potencial difícilmente estará por arriba del 4%.
- ¿El Banco Central tiene espacio para impulsar la economía a través de su política monetaria?
- No mucho, porque si bien el Banco Central puede bajar la tasa de interés en los próximos meses, eso tendrá muy poco efecto en estimular la inversión o el consumo, porque las causas tiene que ver con razones más estructurales.