El ministro de Energía y Servicios Públicos de Neuquén, Guillermo Coco, advirtió hoy que "podrían aumentar los despidos" en la empresa privada Más Energía debido a la crisis financiera que atraviesa la firma por "quedarse fuera del mercado" de combustibles, situación sufrida también por otras pymes del sector.
Coco señaló en diálogo con NA que el gobernador Jorge Sapag y el senador nacional Guillermo Pereyra (que además es el jefe del sindicato de petroleros) están "liderando las negociaciones con funcionarios del Gobierno nacional" para resolver la situación.
El ministro neuquino indicó que la compleja situación financiera de las refinerías de este grupo empresario privado "está generando despidos y está dejando a la gente (suspendida) sin goce de haberes".
"Desde Refipymes nos han planteado que las empresas más chicas se están quedando fuera del mercado argentino, desfavorecidas por los subsidios a las grandes compañías decididos por el Gobierno Federal", dijo el ministro.
Refipymes, un segmento de empresas que no comparte la magnitud operativa de las más grandes pero sin su aporte el abastecimiento interno se vería en problemas, viene sufriendo desde hace dos años un fuerte crisis financiera por no poder colocar su producción en el mercado interno.
El problema está en que el Gobierno nacional le otorga una exención de impuestos a grandes compañías como YPF, Axion, Shell y Oil, por lo que a esas compañías les conviene traer el producto de afuera antes que comprárselo a firmas locales.
Así, petroleras como Shell, YPF y Petrobras están importando nafta exenta del Impuesto a la Transferencia de Combustibles (ITC), lo que no ocurre con la producida en el país que sí debe afrontar tributos.
"El escenario cambió en 2014 dado que a las grandes petroleras les convenía importar que comprar dentro del país. Y bueno, el faltante se importó y no se compró aquí", dijo el ministro en diálogo con esta agencia.
La federación de sindicatos petroleros acordó ayer una suba salarial del 32% en dos cuotas, que, de acuerdo con el gremio, tendrá para los operarios un impacto de bolsillo del 38 por ciento. El arreglo alcanzó también el sector de producción de gas licuado, que desde ayer se encontraba paralizado por una protesta del sindicato y que amenazaba con generar desabastecimiento de garrafas en pleno invierno.
El cierre de esta paritaria se suma al que había concretado la semana pasada, en términos similares, el sindicato petrolero de Neuquén, Río Negro y La Pampa, separado de la federación nacional. El gremio patagónico, en tanto, suspendió un paro que tenía previsto llevar a cabo hoy en defensa de los puestos de trabajo en el segmento de las refinerías pequeñas. Antes de la huelga intervino el Gobierno nacional, que convocó a una audiencia para la semana que viene.
El acuerdo de ayer fue alcanzado por la Federación Argentina Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustibles con las cámaras de empresas productoras de hidrocarburos en el Ministerio de Planificación.
Alberto Roberti, jefe nacional del gremio y diputado nacional por el Frente Renovador, explicó que el entendimiento con las compañías del sector "implica un aumento salarial retroactivo a mayo del 32 por ciento, más incrementos en otros conceptos salariales hasta totalizar 38 por ciento". La suba fue dispuesta en dos tramos no acumulativos del 16 por ciento cada uno, el primero retroactivo a mayo y el siguiente, en septiembre próximo.
La paritaria de los petroleros es una de las que involucra ingresos más altos en todo el sector privado. En el área de yacimientos, en las denominadas "bocas de pozo" el propio gremio calculó que los peones percibirán con el actual aumento salarios cercanos a los 30 mil pesos mensuales.
El acuerdo de ayer incluyó el segmento de trabajadores de las fraccionadoras de gas en garrafas. En el Ministerio de Trabajo la federación nacional pactó con la Cámara de Empresas de Gas Licuado (Cegla) un aumento del 30 por ciento. El pago se concretará en dos cuotas iguales de 15 por ciento en mayo y octubre.
De acuerdo con el convenio firmado también subirán las sumas fijas no remunerativas preexistentes: una, a $ 150 por día "efectivamente trabajado" desde mayo, y a 160 pesos desde octubre, y también los montos pactados en concepto de licencia anual ordinaria. Con ese entendimiento, Roberti ordenó poner fin a la huelga que ayer mismo había iniciado en el fraccionamiento de gas.
El gremio de las provincias patagónicas, liderado por el senador nacional Guillermo Pereyra, había cerrado un acuerdo en valores nominales similares la semana pasada. Sin embargo, en el sindicato explicaron que esa suba, del 30% en dos cuotas, tendrá vigencia por nueve meses, entre abril y diciembre de este año, lo que implicará necesariamente una ventaja respecto de lo pactado por la federación. Mientras Roberti integra el espacio de Sergio Massa, Pereyra secunda a Hugo Moyano en la CGT opositora y desde este año ocupa una banca -su espacio ganó las dos por la mayoría- por el Movimiento Popular Neuquino en el Senado nacional.
El Sindicato de Petróleo y Gas Privado levantó ayer por la tarde el paro anunciado para hoy en reclamo por los despidos de los empleados del Grupo Más Energía, ante la crítica situación financiera de sus refinerías Renesa y Petrolera Argentina, de Plaza Huincul.
El titular del gremio y senador nacional Guillermo Pereyra suspendió la huelga tras una convocatoria a una reunión el martes próximo en Buenos Aires con el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada; el secretario de Legal y Técnica Carlos Zannini, el presidente de YPF, Miguel Galuccio, y el titular de Más Energía, Miguel Schvartzbaum.
El jueves, la empresa ya había comenzado a enviar telegramas de despido y avisos de suspensiones de los trabajadores porque trabaja a pérdida, según informaron sus directivos.
El problema, indicaron, pasa porque YPF obtiene más ganancias con la importación de naftas exentas del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC) que comprando a las pequeñas refinerías locales.
Schvartzbaum reconoció que YPF hace el negocio que le resulta conveniente y dijo que no tiene ninguna pelea con la empresa que conduce Galuccio. Señaló que su reclamo va dirigido a Nación para obtener algún tipo de reconocimiento como la exención del ITC para ser competitivos.
Otra de las opciones que plantea el empresario es alguna especie de subsidio al precio del petróleo. Indicó que su refinería paga 83 dólares el barril porque está diseñada para procesar crudo de calidad Medanito, el más caro en el mercado interno, mientras que el resto de las destilerías grandes pueden mezclarlo con Escalante, con lo cual pagan un promedio de 73 dólares.
El ministro de Energía, Guillermo Coco, respaldó el reclamo. Señaló que “las grandes compañías salieron a importar combustibles con subsidios sin respetar la Ley de Emergencia Nacional que obliga a las compañías a comprar los productos dentro del país”.
“Entre dinero propio apalancado en el sistema financiero argentino y los programas de promoción que tomó el gobierno nacional, el Grupo Más Energía tiene invertidos más de 150 millones de dólares, y de un día para el otro la planta queda fuera del mercado”, indicó Coco, a la vez que repudió el “cambio de políticas de un día para otro”.
Consideró que la responsabilidad de la situación de las refinerías pequeñas es de la Nación que cambió las reglas de juego “por querer ayudar a YPF”. Aunque dijo que la petrolera nacional no tiene “la obligación” de rescatar a Más Energía “porque es una empresa pública”.
“YPF no reemplazó producción local”
NEUQUÉN
YPF aseguró ayer que en los “dos últimos años realizó esfuerzos para mantener y construir una relación comercial estable con Renesa, sin encontrar respuestas empresarias acordes con los estándares que requiere la refinación de combustibles”.
Mediante un duro comunicado, la compañía señaló que le compró a la refinería todo el producto que puso a disposición, a pesar del incumplimiento en los compromisos de volumen y calidad de los combustibles establecidos por contrato.
“YPF, por lo tanto, no reemplazó producción local por importada”, señaló. Agregó que su política de precios para con Renesa ha sido equivalente a los del mercado interno o superiores, y que ambas tienen el mismo régimen tributario, igual al del resto del parque refinador del país. “En cambio, Renesa cuenta con beneficios especiales del programa Refipyme y fue construida con aportes de programa Refino Plus”, agregó la petrolera.
YPF recordó que le compró en 40 millones de dólares su porcentaje del bloque La Amarga Chica “frente a los reiterados incumplimientos por parte de Petrolera Argentina de sus compromisos de inversión” en la sociedad que ambas compartían. Le recordó que se hizo de esa suma millonaria cuando nunca erogó un peso.
Coco defendió el pago por el ingreso a las áreas
NEUQUÉN
El ministro de Energía, Guillermo Coco, volvió a defender ayer el sistema de acarreo de GyP y el pago de un canon por parte de las petroleras que ingresan a las áreas en la provincia.
“Las áreas y los recursos son de la provincia por Constitución. En cualquier parte del mundo eso se paga”, dijo en referencia a la discusión por la reforma de la Ley de Hidrocarburos que tienen las provincias con la Nación y la petrolera YPF.
Señaló que Chevron le pagó a la empresa nacional una suma por ingresar a Loma Campana. “Si una le paga a otra compañía, por qué no se lo va a pagar al Estado neuquino. No hay ninguna diferencia”, indicó.
“YPF hace lo que hace GyP: se da vuelta y busca un socio que le pague un porcentaje, no está invirtiendo todo lo que tiene que invertir en las áreas”, agregó.
Comentó que el mercado argentino estaba acostumbrado a que los estados provinciales y Nación les entregaran las áreas sin valorizar los recursos. “La provincia de Neuquén, a partir de la llegada de Jorge Sapag al gobierno, comenzó a valorizarlos. Porque se paga en el mundo”, señaló.
Dijo que, para acceder a las áreas, las compañías deben pagar “cash” o llevar a GyP con carry, haciéndose cargo del porcentaje de inversiones que le corresponde a la empresa provincial.
“YPF le vendió un porcentaje de su UTE a Chevron y le hizo un carry. Le pagó lo que había invertido más el valor del acre”, aseguró.
Consideró que “hay que llegar a un acuerdo” con Nación, y que no se debe cambiar “el status quo” de las concesiones, sino establecer estímulos fiscales.
Dijo que lo que está en discusión es quién maneja los recursos, si las provincias o Nación. “Ninguna compañía se quejó de la Constitución, de la Ley Corta ni del carry. Se quejan de que no hay una verdadera promoción de inversiones, no pueden sacar dividendos, importar equipos”, agregó Coco.
Diarimente Neuquén
El sindicato petrolero que conduce el senador Guillermo Pereyra suspendió el paro previsto para el viernes en protesta por la situación de las refinerías del grupo Mas Energía en Neuquén, tras obtener el compromiso de una reunión, el martes próximo.
Fue el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, quien convocó al senador nacional, con el expreso compromiso que del encuentro participarán también el presidente de YPF, Miguel Galuccio; el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zanini; y el presidente de la refinería Renesa, Miguel Schvartzbaum.
Pereyra informó que el cese de actividades fue levantado “por especial pedido” del ministro Tomada, y anticipó que el temario de la reunión girará expresamente en torno a “encontrar una solución a la inequidad impositiva y de condiciones de comercialización que sufren las pequeñas refinerías”.
El Sindicato encabezado por Pereyra hace meses que viene solicitando la intervención del gobierno nacional para revertir la situación de esas pequeñas empresas, que “ante la imposibilidad de competir en igualdad de condiciones con las empresas multinacionales comenzaron a concretar despidos y suspensiones de trabajadores”, sostuvo en un comunicado la oficina de prensa del Senador.
Tras intensas negociaciones que involucraron a distintos sectores, Petrolera Argentina logró acercar posiciones con el gobierno nacional y el gremio de petroleros suspendió el paro que tenía convocado para el viernes 4 de julio.
Si bien se mantienen los despidos y las suspensiones en la refinería (ver aparte), se abrió un canal de diálogo. El martes próximo se espera funcionarios de primera línea de la Casa Rosada reciban al dueño de la firma, Miguel Schvartzbaum.
Así lo confirmó el propio empresario en diálogo con "Río Negro".
El sindicato de Petróleo y Gas Privado de Neuquén, Rio Negro y La Pampa, que conduce el senador Guillermo Pereyra, había dispuesto una medida de fuerza para el viernes luego de que efectivizaran al menos 12 despidos y 65 suspensiones (ver aparte).
El ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, se reunirá el próximo martes con Pereyra. Participarán el CEO de YPF, Miguel Galuccio, Carlos Zanini y representantes de Renesa.
Pereyra indicó que el cese de actividades fue levantado "por especial pedido" del ministro Tomada, y anticipó que el temario de la reunión girará expresamente en torno a "encontrar una solución a la inequidad impositiva y de condiciones de comercialización que sufren las pequeñas refinerías".
"Necesitamos respuestas, y si no las tenemos en las sucesivas semanas vamos a tener noticias como esta", aseguró a "Río Negro" el director de Negocios del grupo Más Energía, Miguel Ryndycz.
El empresario sostuvo que el negocio parecía auspicioso para 2011, con un barril de petróleo a 50 dólares. "Subió el crudo, subió el dólar y los combustibles no subieron al mismo ritmo", explicó. Dijo que el tema se agravó cuando Nación autorizó a la importación de combustibles sin impuestos para cubrir la demanda local. Eso desalentó la compra a nivel local, donde sí se pagan tributos y terminó generando para las pequeñas refinerías "una crisis de rentabilidad", detalló.
"Nosotros proponemos un tratamiento igualitario", señaló Ryndycz. "Del mismo modo que se beneficia a las grandes empresas, queremos que se nos beneficie a nosotros. La diferencia es que nosotros no giramos divisas al exterior y damos trabajo a nivel local", expresó. "No podemos seguir convalidando pérdidas, no podemos trabajar sin tener un margen que permita garantizar reinversión y la sustentabilidad", afirmó el empresario.
Señaló que por estas horas tanto Petrolera Argentina como Renesa (ambas refinerías pertenecen al grupo empresaio) están paradas. Explicó a su vez que el único mercado que tienen es el interno pero que es "muy difícil" cerrar un contrato con los grandes marcas por la falta de competitividad.
Según Ryndycz, la refinería que se puso en marcha en 2011 costó 142 millones de dólares. La mitad fueron aportados por Nación a través del plan Refino Plus. El año pasado, YPF le compró su participación en el área La Amarga Chica por 40 millones de dólares, de los cuales una parte se cobró en efectivo y otra en petróleo.
En tanto, desde el Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa anunciaron que el viernes harán un paro. Así fue confirmado por su titular, Guillermo Pereyra: "Lo único que puede hacer levantar la medida es que queden los despidos sin efecto".
Por su parte, el gobernador Jorge Sapag pidió una audiencia urgente con el ministro de Economía, Axel Kicillof, pero éste se encuentra en Estados Unidos abocado a la crisis por el fallo de los fondos buitres.
