A pesar que el Gobierno anunció que el Gasoducto Sur Peruano (GSP) -a adjudicar este 30 de junio- daría seguridad energética al país con un sistema de redundancia, que transporte más gas natural a Lima, ProInversión reconoció que ello no se concretará en esta licitación.

En la ficha del proyecto original del GSP, que ProInversión promociona en su página web, figura el citado sistema de redundancia, que consiste en dos tuberías (una de gas y otra de líquidos del gas), denominado “Tramo C”, que se tendría que construir desde un punto de conexión entre el planeado GSP (en Cusco) y la zona de Chiquintirca, en Ayacucho.

No obstante, el informe N° 295-2014-GART de Osinergmin, que evaluó el proyecto, indica que si bien en la versión final del contrato de concesión figura el sistema antes citado como parte del GSP, “sin embargo, el alcance del contrato contempla que el Tramo C y los gasoductos regionales, no serán construidos por el concesionario”.

El documento observa que el concesionario del GSP, solo deberá elaborar los estudios de ingeniería básica y de línea de base para el tramo C, así como estudios de los ductos regionales que partirán del GSP hacia las ciudades de Apurímac, Puno, Arequipa, Moquegua y Tacna.

Nueva licitación
Los estudios que elaborará el que gane la concesión del GSP se deberán entregar al Ministerio de Energía y Minas (MEM), que para su construcción, convocará a una posterior licitación, indica Osinergmin.

Consultado sobre este informe, ProInversión explicó que, en efecto, por razones de seguridad que enfrenta la empresa Transportadora de Gas del Perú (TGP) para ampliar el actual gasoducto de Camisea, en el tramo de selva se decidió que el proceso de concesión del GSP no incluya el tramo C.

“En tal sentido, se consideró dicho tramo en una segunda etapa, luego que se superen los inconvenientes de seguridad pública en la zona que comprende dicho tramo”, confirmó.

Al respecto, el MEM informó que está previsto que la ampliación del gasoducto de TGP concluya en el segundo semestre del 2016. No obstante, anteriormente había estimado que esas obras para traer más gas a Lima concluirían en el primer semestre del 2015.

OTROSÍ DIGO

COES. Si es que -como parte del proyecto del GSP-, no se concreta la construcción del tramo C, que traerá más gas a Lima, se seguirá manteniendo la situación de riesgo para el sistema eléctrico en caso sucediera una falla en el gasoducto de Camisea, advirtió César Butrón, presidente del COES.