El Gobierno brasileño aprobó hoy la contratación directa de la petrolera Petrobras, sin necesidad de licitación, para que explote los volúmenes excedentes de crudo en cuatro áreas del presal, el horizonte de exploración con gigantescas reservas descubierto por Brasil en aguas profundas del Atlántico.
Petrobras ya tenía el derecho a extraer hasta 5.000 millones de barriles equivalentes de petróleo de esas cuatro áreas gracias a un contrato de cesión del Estado brasileño y ahora podrá explotar el excedente a cambio de una participación en la operación.
La elección de Petrobras como la socia del Estado brasileño en la explotación del petróleo excedente en tales yacimientos fue aprobada este martes por el Consejo Nacional de Política Energética (CNPE) del Gobierno brasileño, según informó hoy la petrolera en un comunicado.
Los campos que serán explotados son los de Buzios, Florim, Entorno de Iara y Nordeste de Tupí, según anunció el ministro de Minas y Energía, Edison Lobao, tras la reunión del CNPE, que esta vez contó con la presencia de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff.
Las cuatro áreas están ubicados en el presal, un horizonte exploratorio en aguas muy profundas del océano Atlántico por debajo de una capa de sal de dos kilómetros de espesor y cuyas gigantescas reservas de hidrocarburos pueden convertir al país en uno de los mayores exportadores mundiales de crudo.
Según un comunicado de Petrobras, el CNPE autorizó a la empresa a explotar por 35 años las cuatro áreas bajo el régimen de asociación de los volúmenes que superen los 5.000 millones de barriles que ya habían sido contratados.
Por el régimen de asociación, el Estado brasileño autoriza a una empresa a explotar yacimientos estatales a cambio de una participación en los resultados.
De acuerdo con la reguladora Agencia Nacional de Petróleo (ANP), el potencial de los excedentes en los cuatro campos es de entre 9.800 millones y 15.200 millones de barriles de crudo equivalente.
A cambio de los derechos, Petrobras tendrá que pagarle al Estado un bono de 2.000 millones de reales (unos 898 millones de dólares) el día de la firma del contrato; la misma cantidad el próximo año y 3.000 millones de reales (unos 1.347 millones de dólares) en 2016.
En 2017, la compañía tendrá que desembolsar por la anticipación del excedente 4.000 millones de reales (unos 1.796 millones de dólares) y el mismo valor en 2018.
Las acciones de la estatal brasileña Petroleo Brasileiro SA, Petrobras, ampliaban el miércoles las pérdidas de la sesión anterior, ante el temor a que la decisión del Gobierno de vender nuevos derechos petroleros a la empresa pesará en los altos niveles de deuda y en sus débiles ganancias.
Algunos inversores dijeron que la medida, de vender los derechos de entre 5.000 millones a 9.000 millones de barriles de petróleo costa afuera, era un intento por transferir futuras ganancias de Petrobras a las arcas del Gobierno, en momentos en que una prevista bonanza petrolera no se ha materializado con la rapidez esperada.
Las acciones preferentes de Petrobras llegaron a caer hasta un 2,7 por ciento en los primeros minutos de actividad en la Bolsa de Sao Paulo, ampliando las pérdidas de 3,6 por ciento registradas el martes.
Los papeles cotizaban con mermas de 1,6 por ciento a 17,35 reales, cerca de mínimos de tres semanas.
Las acciones se dirigen a su tercera sesión consecutiva a la baja.
Las acciones comunes de la firma caían 2,7 por ciento, a 16,34 reales.
(Reporte de Walter Brandimarte; Traducido por Maria Cecilia Mora. Editado en español por Silene Ramírez)