Los gobernadores de las provincias petroleras mantienen una tensa negociación con el Gobierno Nacional por la nueva ley de hidrocarburos que regulará la explotación de petróleo no convencional. La Nación argumenta que para garantizar la llegada de inversiones se debe establecer un esquema de incentivos y en ese marco las provincias deben desistir del sistema de acarreo, pero los estados agrupados en la OFEPHI lanzaron como contrapropuesta que la Nación liquide las regalías “al precio real del crudo”.

Plantean llevar paulatinamente, la liquidación de las regalías de petróleo y gas estimadas sobre valores de mercado y no de boca de pozo como es en la actualidad y que contemple offshore y áreas de frontera.

El Diario pudo conocer en detalle lo que ha sido el planteo de la mayoría de los gobernadores de la OFEPHI ante los ministros Julio De Vido, Axel Kicillof y el secretario legal y técnico, Carlos Zannini y que el Gobierno Nacional ya lo está analizando.

Incluido offshore y áreas de frontera

La contrapropuesta cuyo nombre es “Régimen Federal de Promoción de Inversiones y Responsabilidad Empresaria para la extracción de Gas y Petróleo no convencional” consiste en un régimen de promoción para los hidrocarburos “no convencionales”, abarcando también el offshore, los crudos pesados y las áreas de frontera.

Además, “se propicia crear un régimen especial, temporario, para los proyectos de desarrollo de reservorios hidrocarburíferos no convencionales, offshore, petróleo pesado, pozos profundos y de frontera”, dice el texto elaborado por los gobernadores de provincias con yacimientos de hidrocarburos.
“La aplicación de nuevas técnicas para la explotación y desarrollo de horizontes geológicos más complejos y de gran profundidad hace necesario el dictado de nuevas normas en cada órbita de gobierno con el compromiso de coordinar y concertar un conjunto de reglas uniformes y coherentes para la actividad”, señalan los gobernadores.

El documento al que accedió El Diario indica que es muy difícil pensar que el problema del autoabastecimiento se resuelve con una sola norma o desde un solo lugar, “lejos de ellos la solución a una situación compleja requiere aportes y soluciones que deben venir, en el marco del federalismo de concertación, acompañada por todos los niveles de gobierno”.

Inversión a 5 años

En otra parte del texto se indica que el futuro régimen debe velar por lograr inversiones en los próximos 5 años por 100 mil millones de dólares para aumentar la producción, ahorrar divisas, sustituir importaciones, generar empleo genuino y creación de medianas y pequeñas empresas.
“La aplicación de nuevas tecnologías para la explotación y desarrollo de horizontes geológicos más complejos y de gran profundidad hace necesario el dictado de nuevas normas en cada orbita de gobierno con el compromiso de coordinar y concertar un conjunto de reglas uniformes y coherentes para la actividad”.

Asimismo, las provincias plantean que se liquiden “al precio real del crudo” es decir el valor que se cotiza en los mercados y no al precio de “boca de pozo” como ocurre hoy. Esto implicaría un alto impacto en las arcas provinciales, ya que en la actualidad el barril de petróleo supera los 100 dólares y se está liquidando, en el mejor de los casos, a 70 dólares.

Los puntos de la contrapropuesta

1) Los gobernadores propician “crear un régimen especial” a los efectos de que “los permisionarios y concesionarios, obtengan un plazo adecuado para su explotación, con reglas claras y adaptadas a las especiales exigencias de este tipo de inversiones (hidrocarburo no convencional). Plantean que este régimen especial sea “temporario” y sólo para los proyectos de desarrollo de reservorios no convencionales, en el caso del off shore, el petróleo pesado, pozos profundos y los de frontera.

Reconocen la posibilidad de otorgar un plazo excepción de hasta 35 años para estos casos pero se plantea que los beneficiarios “NO podrán reclamar una extensión adicional, como sí lo permite hoy la ley 17.319”.

2) En el marco de la promoción y fomento de la actividad no convencional, se sugiere que se amplíen los beneficios a la mayor cantidad de sujetos posibles, bajo un esquema promocional flexible que permita la evaluación integral de estos beneficios, atados al desarrollo del proyecto. Coinciden que los mismos no sean sólo para los que inviertan más de mil millones de dólares, sino que sea a partir de los 250 millones de dólares.

Pero plantean que se ate, el porcentaje a promocionar a un porcentual del total de la inversión y el momento de la misma.

Análisis de los tributos: Piden un análisis general de toda la carga tributaria de la actividad, plantean un régimen de amortización en el impuesto a las ganancias, otorgar la posibilidad de exportar divisas y que provincias y municipios acompañen con sus propios regímenes promocionales.

En ese punto en particular, se hace énfasis en el “precio” y consideran que para “favorecer el aumento de la recaudación de regalías” todo pago o aporte que la Nación efectué a las empresas (por ejemplo subsidios al gas) se considere parte del precio sobre el cual se deben liquidar las regalías.

Y piden en este punto el “equilibrar los valores internos en forma progresiva y con un sendero de precios que mantenga la rentabilidad de las operaciones como también que el diferencial de precios internos, respecto de las diferentes calidades de crudo no se aparte más del 6% proporcionalmente a su calidad”.

3) Cuidado y Protección del Medio Ambiente: Estará a cargo de las provincias.

4) Responsabilidad Social Empresaria: cada proyecto promocionado, deberá prever un porcentaje de la renta petrolera para atender a cuestiones referidas a la RSE.

5) Obras de Infraestructura Urbana: Por cada proyecto aprobado por el Gobierno Nacional deberá disponer de las partidas presupuestarias para absorber el impacto de crecimiento poblacional y aumento de circulación de vehículos y equipos.

En defensa de la Ley Corta

Recordemos que el primer borrador elaborado por el Gobierno Nacional planteaba regular la explotación convencional y no convencional de hidrocarburos con una ley complementaria a la Ley Nacional de Hidrocarburos y a la Ley Corta.

Justamente, al respecto de la Ley Corta, que transfiere la titularidad de los yacimientos de petróleo y gas a las provincias, es uno de los aspectos que se subraya en el proyecto de OFEPHI. En las primeras líneas de la contrapropuesta ratifica en todos los términos la Ley 26.197, indicando que “hace 20 años la reforma de la Constitución Nacional estableció el dominio provincial del gas, del petróleo y en general de los recursos naturales y hace siete la Ley Corta N 26.197 que determinó que las provincias son autoridades de aplicación de la Ley de Hidrocarburos y poder concedente en sus respectivas jurisdicciones y la Nación lo es el Mar Territorial más allá de las 12 millas marinas”.

Los gobernadores petroleros insistirán esta semana para consensuar un programa de incentivos a las inversiones con el Gobierno nacional. La contrapropuesta a la que recibieron en Olivos consiste en un régimen de promoción para los hidrocarburos “no convencionales”, abarcando también el offshore, los crudos pesados y las áreas de frontera.

Como vino adelantando Diario Patagónico, el proyecto de los diez mandatarios que integran la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI) consiste en un marco para las inversiones. El nombre tentativo es “Régimen Federal de Promoción de Inversiones y Responsabilidad Empresaria para la extracción de Gas y Petróleo no convencional”.

“La aplicación de nuevas técnicas para la explotación y desarrollo de horizontes geológicos más complejos y de gran profundidad hace necesario el dictado de nuevas normas en cada órbita de gobierno con el compromiso de coordinar y concertar un conjunto de reglas uniformes y coherentes para la actividad”, señalan los gobernadores en el proyecto al que accedió Diario Patagónico.

“Es muy difícil pensar que el problema del autoabastecimiento se resuelve con una sola norma o desde un solo lugar. Lejos de ello la solución a una situación compleja requiere aportes y soluciones que deben venir, en el marco del federalismo de concertación, acompañada por todos los niveles de gobierno”, argumentan en el texto.

“Se propicia crear un régimen especial, temporario, para los proyectos de desarrollo de reservorios hidrocarburíferos no convencionales, offshore, petróleo pesado, pozos profundos y de frontera en el marco de las leyes nacionales 17.319, 26.197 y 26.741 sus modificatorias y complementarias, aplicable en todo el territorio nacional, con un plazo para adherir al mismo”, sostienen.
“Por ello se propicia crear un Régimen Especial a los efectos que los permisionarios y concesionarios obtengan un plazo adecuado para su explotación, con reglas claras y adaptadas a las especiales exigencias de este tipo de inversiones, todo ello en el marco de un régimen de beneficios adecuados”

SEMANA MOVIDA
El gobernador Martín Buzzi, y presidente de la OFEPHI, confirmó a Diario Patagónico en la edición del sábado último que esta sería una semana de reuniones para seguir dándole forma al proyecto que pretenden desde la Casa Rosada. El primer borrador planteaba regular la explotación convencional y no convencional de hidrocarburos con una ley complementaria a la Ley Nacional de Hidrocarburos y a la Ley Corta.

Justamente, al respecto de la Ley Corta, que transfiere la titularidad de los yacimientos de petróleo y gas a las provincias, es uno de los aspectos que se subraya en el proyecto de OFEPHI. En las primeras líneas de la contrapropuesta ratifica en todos los términos la Ley 26.197.

Ayer, hubo contactos entre los gobernadores. Especialmente entre el chubutense Buzzi y el neuquino Jorge Sapag. Este último es el que más fuerte ha protestado, ya que consideró que el borrador que surgió el Gobierno nacional buscaba limitarle poder a las provincias y a las empresas provincial-estatales.

La propuesta de los gobernadores plantea la necesidad de un esquema promocional flexible, esto quiere decir que debería evaluarse la magnitud del proyecto y el tipo de yacimiento.

“Es así que proponemos ampliar los beneficios promocionales no solamente a los inversiones en yacimientos no convencionales, sino también para las inversiones que se realicen en pozos a gran profundidad y de frontera, offshore y en yacimientos de petróleos pesados”, indican los mandatarios petroleros.

“Sugerimos también que los montos de inversión requeridos para ser considerados beneficiarios de este régimen promocional, sean flexibles en función del tipo de empresa, características del yacimiento, costos de las tecnologías aplicadas, volúmenes de producción, cantidad de empelados contratados y otras variables sociales y económicas. Caso contrario se establecería un régimen promocional sólo para grandes empresas”, añaden.