Expendedores de San Juan advierten que en el caso de gasoil se nota una merma como consecuencia de la suspensión del proyecto minero binacional Pascua-Lama, encarado por la canadiense Barrick Gold. Sumando las naftas en promedio estiman bajas del 10 por ciento.
Cada provincia presenta sus potencialidades económicas. Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, alcanzaron mayor diversidad por el desarrollo de la industria; otras regiones están abocadas al agro, tal es el caso de Santiago del Estero y La Pampa, mientras que en Cuyo, por caso, las producciones de ajo, vid y la minería son las más importantes.
Bernardo Turcumán, presidente de la Cámara de Expendedores de San Juan (CECA) explica que en su zona el emprendimiento de Pascua Lama “movía el mercado” y sostenía la demanda de combustible. Hace referencia a la iniciativa de Barrick que involucra a Chile y Argentina, consistente en explotar una mina a cielo abierto para extraer oro, plata y cobre, entre otros minerales.
Turcumán analiza que es por este motivo que “disminuyó la actividad” en la provincia. Localiza un período en concreto: desde que se paralizaron las obras, sobre finales del año pasado, debido a incumplimientos de la compañía de las normas medioambientales y por protestas de sectores de la sociedad civil que rechazan la iniciativa.
La merma de la facturación en las bocas de expendio indica, es de aproximadamente un 10 por ciento, no sólo en lo que a gasoil respecta, que es uno de los insumos básico de la industria minera, sino “también se nota en las naftas”. Sostiene que “la gente está cuidando el presupuesto y el bolsillo economizando en combustible”.
Como hace mucho tiempo no se veía asegura que los consumidores están siguiendo con mayor atención los precios de las marcas. Observa que se desesperan por cargar en los puestos de YPF – que son más baratos – y muestran mayor interés por los sistemas de gas.
Tal es así que la participación de la estatal no cesa de crecer en la provincia y a la par aumenta el expendio de GNC. “Se mantiene firme”, señala. Este es el nicho que encontraron las estaciones sin bandera para permanecer en el negocio. Representan el 33 por ciento del parque global de locales de San Juan.
En relación al GNC Turcumán destaca que “el abastecimiento está normalizado”, a diferencia de años anteriores, cuando en esta época del año las estaciones sufrían interrupciones de fluido por parte de la distribuidora para garantizar el servicio domiciliario.
Luego de años de sufrir cortes periódicos en invierno reconoce que se mejoró la infraestructura en gasoductos. “Hemos tenido días fríos pero se han concretado obras en Mendoza que han respondido bien”, resalta el empresario.