El Cierre de Minas adquirió trascendencia en los países mineros de mayor desarrollo tecnológico en los últimos 15 años, a favor del impulso de los que ven en este capítulo de la minería la clave de la sostenibilidad de la industria, el cual afirma que “actualmente la gloria consiste no solo en lograr abrir exitosamente una mina sino en garantizar su cierre de acuerdo a las mejores prácticas”.
Tales preceptos vienen incorporándose progresivamente a la minería de Sudamérica. en la Conferencia “Mine Closure Solutions”, Ouro Preto, Brasil, 27 al 30 de abril pasados, se realizó una evaluación sobre este proceso, en el que subyacen los objetivos definidos en el 2004 por el Consejo Internacional en Minería y Metalurgia (ICMM la sigla en inglés, establecido en 2001 como catalizador para el perfeccionamiento de la performance en la industria de minas y metales), especialmente el objetivo N° 9:
… Ciclo completo de vida del proyecto con horizonte de largo plazo
Una evolución importante de la actividad minera en el mundo está reflejada en el reconocimiento de la industria, las comunidades, la sociedad civil y los gobiernos de que debe considerarse el ciclo de vida completo del proyecto – desde la exploración hasta el largo período de post-clausura - en el diseño de una mina y su análisis financiero (traducción del autor de la nota).
Este enfoque, vinculado con la creciente exigencia de las sociedades con relación a la compatibilidad de los métodos de explotación con el ambiente, significa que no es admisible incrementar el legado de pasivos de la actividad minera.
Tales objetivos parten de que los requerimientos de minerales y metales seguirán siendo crecientes, a la vez que la aceptabilidad de la industria dependerá del perfeccionamiento de las prácticas.
El desarrollo del Cierre de Minas y Compatibilidad Ambiental de la industria minera se podría sintetizar como la concreción de consensos entre gobiernos, industria y actores locales, mediante normas de soluciones técnicas aptas y seguras para cada instalación.
Esto se reafirma con un análisis de riesgo, e imponiendo la obligación a las empresas de depositar una garantía que ponga a cubierto respecto a la financiación del cierre final, cuyo costo debe ser minimizado mediante su planificación e implementación tempranas.
Consenso. La primera parte de este consenso se concreta en la estandarización de las soluciones definidas por la experiencia de la actividad, que integran normas para facilitar la aprobación de los proyectos, fijadas por la autoridad de aplicación. Dichas normas incluyen una estimación de los costos unitarios que implica cada medida implementada, lo que permitirá estimar la financiación que requiere la actividad de cierre en total, a fin de calcular el monto de la garantía a depositar por el operador.
Una referencia de este tipo que tiene amplia aplicación es el Standardized Reclamation Cost Model utilizado desde 2004 en Nevada, USA (versión 2009 en internet). En otros países mineros de gran producción se aplican esquemas similares, desde fines de los ‘90, siendo el más reciente el que está en desarrollo en Chile, por la implementación de la Ley 20.551 (Cierre de Minas, nov. 2012). Aquí a través del SERNAGEOMIN se está completando la reglamentación para la aplicación de garantías, con tres componentes: Análisis de riesgo, Estimación de costos y Definición del mecanismo para las garantías.
En la ley se definen los instrumentos financieros aptos, así como los plazos para el depósito de la garantía, que dependen de la envergadura del proyecto. En el artículo 13 de la ley se definen los objetivos generales, que indican su identificación con los postulados del ICMM, tales como el planeamiento continuo desde las etapas tempranas de la planificación del proyecto. La ley exige elaborar un análisis de riesgo, de acuerdo a una guía basada en la norma ISO 31000:2009 (Gerenciamiento del Riesgo), donde se determina la probabilidad de que se produzca un evento natural así como derivado de los factores técnicos de la operación minera, y los impactos en las etapas de cierre y post-cierre, mientras que las consecuencias se determinan en base a las características de la población y el ambiente del área de influencia de la mina. Caso chileno. Hasta noviembre de 2014 las empresas mineras de Chile deberán presentar sus proyectos de cierre actualizados, incluyendo estimaciones de costos y otras obligaciones (Ley 20.551). El proceso chileno en esta materia es el más avanzado en Latinoamérica. Perú tiene en vigencia una ley de cierre de minas desde el 2005, basada en similares principios y procedimientos. En Brasil, se observan esfuerzos mancomunados de las autoridades regulatorias, entidades empresarias mineras, universidades y empresas, para avanzar hacia la aplicación de estos estándares. En este caso el proceso es complejo dada la alta incidencia de la minería informal en la producción. Incluso Uruguay, en previsión de la puesta en marcha de un proyecto de producción de hierro “de gran porte” (Aratirí), emitió recientemente una ley minera que incorpora procedimientos de cierre basados en los principios descriptos. Argentina. En cuanto a la situación argentina en este contexto, es preocupante que no se observen avances en la legislación nacional hacia una actualización, en un retraso de la normativa que rige la actividad minera en lo relativo a la obtención de la licencia social de acuerdo con las prácticas vigentes en el contexto internacional. Objetivamente, el cumplimiento de las previsiones de cierre está sujeto a las exigencias y normas impuestas por las autoridades ambientales mineras provinciales, apoyadas en las referencias generales de las leyes 24.585 y 24.196 sobre Cierre de Minas, y las diversas políticas corporativas. La actualización de estas prácticas requiere un proceso de acuerdos y fijación de políticas acorde con un proceso de orden nacional, además de la participación de autoridades de todos los ámbitos, organizaciones empresarias, empresas mineras, y una amplia divulgación en la población. Probablemente se requiera un período de optimismo en la actividad para que se produzca una revisión profunda y actualización de esas características. Sin embargo, no conviene perder de vista que esto puede coadyuvar a superar recelos que persisten en amplios sectores de la sociedad argentina sobre la compatibilidad de la minería con el cuidado del ambiente.
En Portugal por la empresa estatal Empresa de Desenvolvimiento Mineiro, sobre numerosas minas de antigua data, se considera importante la transparencia y espíritu empresario de esta tarea.
Entre los organizadores y disertantes en la Conferencia se encontraban los conocidos expertos Andy Robertson (Infomine), Dirk van Zyl (Universidad de British Columbia), Jeff Parshley (SRK USA), y entre los patrocinantes universidades, entidades empresarias, consultoras internacionales, y empresas mineras de Brasil.
Como temas técnicos generales, deberían destacarse los aportes de Robertson, quien sostiene que cada 1/3 de siglo se multiplica por 10 la capacidad de producción de las plantas de procesamiento, y se duplica la altura de los diques de cola, lo que hace que el riesgo potencial de estas instalaciones se incremente 20 veces tras estos períodos. Tal incremento del riesgo exige altos estándares de investigación, diseño y construcción en la operación, monitoreo y mantenimiento de las instalaciones, desde el inicio de la producción hasta el post-cierre inclusive.
Dirk Van Zyl indica que los requerimientos del cierre comprenden la estabilidad, química, física y biológica del área del emprendimiento, así como programar el uso del suelo luego del post-cierre, mientras que la estrategia a desarrollar puede comprender el abandono del área, o bien su cuidado pasivo o activo, pero siempre exige cumplimentar un plan previsto, compatible con el ecosistema y aceptado por la sociedad.
En relación al avance del proyecto minero, el Plan de Cierre Conceptual o Inicial debe desarrollarse junto con el diseño de mina y obtención de permisos, y abarcar:
*Estudio de opciones de cierre, basado en la factibilidad y análisis de riesgo. *Proceso de consulta, involucrando a las partes interesadas, para determinar el uso post-cierre adecuado.*Estimación de los costos de cierre para alcanzar los objetivos establecidos.*Establecer un programa de estudios y ensayos para confirmar las premisas inherentes a los objetivos del cierre.Asimismo debe producirse una actualización del plan de cierre durante las operaciones, incluyendo los resultados de los estudios piloto, hasta la obtención del Plan de Cierre Final. No menos importante es el Involucramiento de la compañia minera con los objetivos del cierre luego de la clausura de la producción.En el proceso de planeamiento del cierre de mina a lo largo de su ciclo de vida debe considerarse que la planificación tardía del cierre incrementa los costos finales y reduce las opciones técnicas para resolver esta etapa.