En el aire enrarecido por el fantasma de un probable default, se siguió avanzando en el trabajo de precisión que permitiría un pacto petrolero más o menos digerible, con acuerdo entre Nación y Provincias, para después enviar al Senado un proyecto de Ley de Hidrocarburos.
Este martes, desde Taquimilán, el neuquino Jorge Sapag lanzó una nueva advertencia, asentado en el respaldo de su propio partido, el MPN, y de la mayoría política que incluso lo corre por izquierda, para destacar que “el gas de los neuquinos, primero es para los neuquinos, y después para toda la República”.
En Buenos Aires, el ministro de Planificación Julio De Vido se reunió con el presidente de YPF, Miguel Galuccio, para repasar exhaustivamente el borrador que dejaron los gobernadores del club petrolero. No trascendió gran cosa de esa reunión, solo la reafirmación de que se persigue obsesivamente el propósito de alentar inversiones para recuperar la producción nacional de hidrocarburos, y por ende, la soberanía energética.
Pero se dice que se ha dejado atrás el intento de hacer revisar contratos a las empresas petroleras provinciales, como es el caso de G&P. Y que podrían flexibilizarse otras cuestiones, como una banda más o menos ancha en función de las regalías, con la aplicación de cánones extras según la ocasión.
En Taquimilán, Sapag seguía de cerca lo que sucede. “Cuando no hacemos obras que tengan contenidos, nos confunden con distintas lenguas…nosotros en la provincia del Neuquén planteamos -junto a las provincias hermanas y a la Nación- unificar el idioma, hablar el mismo idioma, no confundirnos con idiomas distintos”, disparó en su discurso.
Más allá de la posición del gobierno provincial respecto del pacto, se anticipa que en el Senado, cuando llegue el proyecto, se encontrará con una urdimbre que está tejiendo el senador neuquino Guillermo Pereyra.
Pereyra, por su condición de sindicalista petrolero, conoce bien el rubro. Ahora le ha agregado los puntos políticos más urgentes según la óptica neuquina. Por ejemplo, quiere poner el énfasis en los precios, que según la legislación vigente, le cabe como rol al Estado nacional fijar. Si no hay mejores precios, más acordes con los internacionales, la renta provincial seguirá perdidosa, se dice entre los provincialistas.
Por supuesto, todo se reanaliza ahora en el contexto de la renovada discusión por los holdouts. A Neuquén le interesa sobremanera que el país salga airoso lo antes posible de la encerrona, porque se necesita mucho dinero para poner en funciones de una vez por todas a Vaca Muerta. Y ese dinero solo puede llegar por inversiones desde el extranjero, y para eso hace falta un horizonte despejado.
Parecía que así estaba, después del arreglo con Repsol y con el Club de París. Pero se demostró que las nubes vuelven rápido cuando se dejan asuntos sin cerrar.
Entonces, los discursos patrióticos ya no sirven, y esto lo saben bien quienes empujan denodadamente para poner la vaca de pié.
Un día después de la reunión que mantuvo en Buenos Aires con el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, y el titular de YPF, Miguel Galuccio, en la que se discutió la contrapropuesta presentada por los gobernadores petroleros a la ley de hidrocarburos, Jorge Sapag salió ayer a marcarle la cancha al gobierno nacional. Desde Taquimilán, el mandatario neuquino advirtió que “hay temas que son conducentes y procedentes” y otros que no lo son “en absoluto”, a lo que afirmó que Neuquén “no permitirá cuestiones improcedentes”.
En este sentido, sostuvo que acompañará al gobierno nacional “en todos los temas que sean correctos y justos”, ayudando a la construcción de una “Nación soberana, que debe tener educación, trabajo, alimentos y energía”.
A su vez, se refirió a los derechos que asisten a la Provincia en cuanto a la propiedad de los recursos del subsuelo y, en tal sentido, ratificó que “el gas de los neuquinos primero (es) para los neuquinos y después para toda la República”.
Sapag llamó a los neuquinos “a la reflexión para estar unidos, detrás de objetivos que no sean vanos, que tengan contenido y profundidad”, porque “cuando no hacemos obras que tengan contenidos, nos confunden con distintas lenguas”.
Y resaltó: “Nosotros en la provincia del Neuquén planteamos -junto con las provincias hermanas y a la Nación- unificar el idioma, no confundirnos con idiomas distintos”.
Sapag aseguró que la Provincia y los neuquinos “seguiremos siendo fieles defensores de una Nación soberana, pero constituida bajo la base de provincias fuertes, autónomas y federales”. Y subrayó que “no trabajaremos en torres de Babel, sino en contenidos, en calidad de vida de nuestros habitantes y con el debido respeto a todos los poderes, recursos y facultades que poseen los estados provinciales”.
Reafirmó “el compromiso que Neuquén tiene para con la patria”, pero aclaró que “tiene que haber una debida compensación para Neuquén, en un marco federal, hablando el mismo idioma de la democracia, el federalismo, la grandeza y el respeto que nos debemos, para así facilitar las inversiones y la generación de nuevas fuentes de trabajo”.
Aniversario
Obras y entrega de equipamiento
Durante la visita por el 45º aniversario de Taquimilán, Sapag y el intendente Juan Carlos Montesino entregaron módulos habitacionales y títulos de propiedad a vecinos de esta localidad y parajes aledaños, al tiempo que se anunció la ejecución de importantes obras de infraestructura.
Además, el gobernador informó que se trabaja en la obra nueva planta de gas licuado de petróleo para la localidad. La inversión será de 11 millones de pesos, financiada con fondos obtenidos por la colocación de los bonos Ticafo. La planta ya posee la autorización por parte del Enargas.
A su vez, se entregó equipamiento para establecimientos escolares de la localidad y parajes cercanos, kits de instrumentos musicales, indumentaria para el equipo de salud de la localidad y la constancia de nombramiento de la enfermera del centro de salud.
Por otra parte, se realizó el descubrimiento de la nueva cartelería de las calles, que son parte del proyecto presentado por los alumnos de la Escuela 112 para revalorizar la identidad del pueblo.
Después de una larga jornada de trabajo, los gobernadores petroleros acordaron llevar el lunes como contrapropuesta al gobierno nacional que se discuta una ley marco para la promoción de inversiones en el sector de los hidrocarburos, haciendo énfasis en los “no convencionales”.
Diario Patagónico había publicado en su edición de ayer que uno de los puntos abordados y coincidentes entre los diez mandatarios que conforman la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI) era la necesidad de “atraer inversores con capacidad para llevar adelante los emprendimientos”.
Esa es la idea de la OFEPHI para complementar la Ley Nacional de Hidrocarburos -que regula la actividad en todo el país- y la Ley Corta -que transfiere la propiedad a las provincias de los yacimientos que estén en su jurisdicción-. Al mismo tiempo, cada gobernador plantea sus problemáticas particulares.
LEYES PROVINCIALES
Uno de los aspectos que se resaltó en la mañana del lunes es la Ley Provincial de Hidrocarburos que promovió el gobierno de Martín Buzzi y que sancionó la Legislatura de esta provincia en diciembre de 2012. Bajo el marco de esa legislación, el gobierno chubutense renegoció contratos con Tecpetrol, YPF y Pan American Energy.
La letra de esa ley interesó a otras provincias de la OFEPHI, especialmente a Francisco Pérez, de Mendoza; Alberto Weretilneck, de Río Negro, Oscar Jorge de La Pampa y Fabiana Ríos de Tierra del Fuego. Esos distritos petroleros quieren sus propias leyes provinciales, antes de discutir otra ley marco a nivel nacional.
Hasta ahora, solamente Chubut redactó y puso en actividad un marco regulatorio para los hidrocarburos. Esto fue posible a través de la Ley Corta, una legislación nacional que reconoce el dominio originario de los recursos petroleros y gasíferos a los estados provinciales.
Neuquén, donde gobierna Jorge Sapag, y Santa Cruz, donde está Daniel Peralta, tienen leyes que establecen las condiciones para renegociar contratos con empresas petroleras, pero no contemplan la totalidad de la industria (la ley chubutense incluye “regalías extra”, regulación al transporte y de residuos, entre otros aspectos).
PROMOCION DE LOS “NO CONVENCIONALES”
A nivel nacional, y en el contexto del descubrimiento de recursos no convencionales de petróleo y gas en Vaca Muerta y en D-129 (la formación ubicada en la cuenca del Golfo San Jorge), el gobierno nacional propuso discutir una ley complementaria a la Ley Nacional de Hidrocarburos y a la Ley Corta que tenga por objetivo el autoabastecimiento.
Por esto es que desde la OFEPHI buscaron unificar su postura en la Casa del Chubut y propusieron como alternativa a una ley marco nacional que se redacte una ley de promoción de inversiones, con el objetivo de atraer compañías del sector a los yacimientos no convencionales de hidrocarburos, incentivando la exploración.
En el medio, Neuquén busca proteger el sistema de acarreo, que no comparte el CEO de YPF, Miguel Galuccio: que una empresa obtenga la concesión con la condición de asociarse con la empresa estatal-provincial. GyP de Neuquén lo viene aplicando y la negociación ahora sería eliminar el acarreo de la etapa de exploración.
Los gobernadores de las provincias petroleras sorprendieron al Gobierno en su propio juego. Hacía ocho días ayer que la presidentaCristina Kirchner les había pedido que congelaran las regalías, eliminaran a las empresas provinciales que participan del negocio y congelaran impuestos para atraer inversiones que permitieran disminuir el déficit energético, por el cual este año se irán más de 10.000 millones de dólares enimportaciones de energía .
Los mandatarios provinciales, en cambio, les dijeron anteayer por la tarde a Carlos Zannini (secretario legal y técnico de la Presidencia), Julio De Vido (ministro de Planificación) y Miguel Galuccio (presidente de YPF) que el problema para las inversiones no pasa por la manera en que ellos mismos manejan la actividad, sino por la macroeconomía. El argumento perfecto para reclamarles a los funcionarios que paulatinamente liberen los precios del gas y del petróleo mediante el establecimiento de un sendero de precios a mediano plazo. Es exactamente lo que el kirchnerismo se resiste a hacer.
Ayer se reunieron De Vido y Galuccio para analizar el tema. Según el comunicado oficial, ambos "se mostraron optimistas en avanzar rápidamente en este tema fundamental para el autoabastecimiento y la soberanía energética".
En la práctica, fue la primera muestra pública después de una reunión muy tensa con los gobernadores. El más duro fue el neuquino Jorge Sapag. Enfrentó a los funcionarios, en especial a Galuccio, y se esforzó por arrancarles al menos dos promesas: la futura ley de hidrocarburos no regirá hacia atrás, por un lado, y sólo regulará sobre el negocio de los no convencionales y la actividad en el mar.
Los gobernadores cerraron filas el lunes por la mañana, en un almuerzo que mantuvieron en la Casa de Chubut en la ciudad de Buenos Aires.
Mientras comían lomo con panceta, puré mixto, higos salteados y ensalada de rúcula, acordaron defender el documento que habían elaborado durante el fin de semana Neuquén y Chubut. El gobernador chubutense, Martín Buzzi, es también el presidente de la Ofephi (reúne a las provincias productoras de hidrocarburos) y estaba preocupado por mostrarle al Gobierno una posición de unidad por parte de los distritos petroleros.
El texto que presentaron por la tarde a Zannini, De Vido y Galuccio tiene siete páginas. Su nombre tentativo es "Régimen federal de promoción de inversiones y responsabilidad empresaria para la extracción de gas y petróleo no convencional".
Tomó algunos criterios del decreto 929 del año pasado, firmado por la presidenta Cristina Kirchner, que ofrece algunos beneficios a la inversión y salió poco tiempo antes del acuerdo entre YPF y Chevron. Pero fueron más generosos con los premios a las empresas. El documento recomienda, por ejemplo, que la comisión que supervisa las inversiones en energía, en la práctica a cargo del ministro de Economía, Axel Kicillof, pueda definir qué cantidad de la producción de hidrocarburos accede a un valor internacional (el decreto establece el 20% en cinco años) según las características del proyecto en cuestión.
Los gobernadores sugirieron que en algunos casos ese premio podría llegar al 100%, por ejemplo, en los casos de la exploración off shore, de muy alto riesgo.
Las provincias le hicieron más pedidos a la Nación. El documento recomienda aplicar la amortización acelerada de las inversiones (un viejo pedido de los empresarios petroleros), otorgar diferimientos y descontar de las inversiones en exploración el impuesto a las ganancias.
Aunque todas las partes que participan en la discusión acordaron encontrarse en una nueva reunión para avanzar en las propuestas, el inesperado revés de la Corte Suprema norteamericana sobre la deuda en poder de los holdouts enfrió, por el momento, las negociaciones.
Los senadores Ernesto Sanz, Laura Montero y María Eugenia Estenssoro (legisladora porteña) presentaron ayer un proyecto de ley de hidrocarburos. La iniciativa establece un único régimen legal para la toda la Nación, resguarda el dominio de las provincias sobre sus recursos petroleros y crea el Consejo Federal y la Agencia Federal de Hidrocarburos, que participa en la elaboración del Plan Estratégico Hidrocarburífero Nacional.
Montero expresó que "el tema energético es el talón de Aquiles de este gobierno, ya que generó numerosos problemas de difícil resolución en materia fiscal y también complicaciones a las provincias productoras".
Estenssoro señaló que "en la última década se ha perdido producción. La de petróleo cayó 27% desde 2002. Hoy se producen menos hidrocarburos que hace dos décadas".
Las provincias petroleras y la Nación avanzaron el lunes en la elaboración de un nuevo proyecto de ley de hidrocarburos, que hará eje esencialmente en shale y gas oil y crudo pesado, en un encuentro que mantuvieron los mandatarios de 10 distritos que integran la OFEPHI con los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Planificación Federal, Julio De Vido.
“Fue una reunión en la que hemos logrado grandes avances en la redacción de un marco general”, dijo a la prensa el gobernador de Mendoza Francisco Pérez, al término del encuentro. Aunque se abstuvo de brindar precisiones sobre la norma que se encuentra bajo discusión porque “no se está trabajando en el detalle, en artículo por artículo, sino más bien en las grandes líneas” del proyecto de ley que el Poder Ejecutivo planea enviar al Congreso.
Incluso, el tema del “acarreo” por el cual las empresas deben asociarse con las compañías hidrocarburíferas de cada provincia, “no se tocó, porque no todas tienen una compañía, y en algunos casos, se le ha cobrado (a las empresas) por otros conceptos”, dijo el mandatario cuyano.
Junto con De Vido y Kicillof estuvo el presidente y CEO de YPF, Miguel Galuccio, y el secretario de Legal y Técnica de la Presidencia, Carlos Zannini.
Si bien durante el fin semana previo al encuentro el gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, pidió “no caer en enfrentamientos innecesarios” con la Nación por este tema, y destacó que “lo que se está discutiendo es quién cobra por el valor de la tierra” a las petroleras. Ayer indicó que no habrá “normas retroactivas” y aseguró que podría haber una “banda” porcentual para el cobro de regalías por sobre el 12% que estipulaba la ley.
Así Mendoza, Santa Cruz, Neuquén y Río Negro cobrarían 3 puntos más por regalías, mientras que también habrá zonas dentro de las provincias que tendrán hasta 4,5% más, al igual que Chubut, sin contar el canon extra a la producción que se aplica en algunos yacimientos neuquinos. Esto sería parte de la propuesta.
Ayer en ocasión de celebrar el aniversario de Taquimilán, Sapag advirtió que “el gas de los neuquinos primero (es) para los neuquinos y después para toda la República”.
Aseguró que la provincia y los neuquinos “seguiremos siendo fieles defensores de una Nación soberana, pero constituida bajo la base de provincias fuertes, autónomas y federales”, y subrayó que “no trabajaremos en torres de Babel sino en contenidos, en calidad de vida de nuestros habitantes y con el debido respeto a todos los poderes, recursos y facultades que poseen los estados provinciales”. Y señaló que Neuquén tiene un compromiso con “la Patria” pero que “tiene que haber una debida compensación” para la provincia, “en un marco federal, hablando el mismo idioma de la democracia, el federalismo, la grandeza y el respeto que nos debemos, para así facilitar las inversiones y la generación de nuevas fuentes de trabajo”.