Por Nicolás Fiorentino
Subir el tope de regalías o estimarlas sobre el precio internacional del petróleo son algunas de las ideas que circulan entre los gobernadores de provincias petroleras, que este lunes volverán a reunirse con la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, para exponer pedidos, sugerencias y críticas al borrador de la nueva ley nacional de hidrocarburos que se llevaron esta semana.
Los gobernadores buscarían con esto recuperar parte de las ganancias que perderían al quedar prohibido en el nuevo régimen la posibilidad de instalar el “carry” a sus proyectos. Es decir, la obligación de las empresas concesionarias de yacimientos de asociarse con las empresas provinciales de hidrocarburos, lo que le permite a los gobiernos provinciales una doble captación de renta: por regalías y por distribución de ganancias, al ser socios de las firmas explotadoras. En la nueva ley se reconocerá a las regalías como “único mecanismo de percepción de la renta petrolera”.
En Chubut, una de las provincias miembro de la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (Ofephi), el gobernador Martín Buzzi no tendría problemas en renunciar al carry, como puerta de ingreso a inversiones para el desarrollo de proyectos no convencionales. “Es imposible clavarle un 20% de participación de la empresa provincial, porque se cae el proyecto”, aclaró una alta fuente gubernamental a BAE Negocios. “En la etapa de desarrollo queremos todas las facultades y todos los incentivos”, agregó. Aunque planteó dudas para los proyectos que ya están en etapa de extracción o en casos de renegociación, algo que el Gobierno no quiere discutir en este momento.
Por otro lado, Chubut expone a sus pares de la Ofephi que, si se va a impedir cerrar proyectos con carry, habría que plantear un tope de regalías más alta o una liquidación de regalías a precio internacional. “Si me decís que las provincias podemos arreglar hasta un 20% de regalías sobre el precio internacional, es otro hablar”, admitieron. Francisco “Paco” Pérez, gobernador de Mendoza, confirmó que apunta en la misma dirección. Explicó que “en las últimas licitaciones que han hecho Chubut, Neuquén y Mendoza, las regalías están por ley al 12% y se ha agregado 3% que se llama ‘canon extraordinario’. La idea es modificar eso y establecer 15% de regalías para todas las provincias”.
Negativa
Pero fuentes de la negociación confirmaron a este diario que ni el Ministerio de Economía ni YPF aceptarán regalías por encima del 12% ni más de 3% de tope al cobro de Ingresos Brutos, porque creen que eso trabaría las propuestas de inversión que se necesitan para desarrollar la exploración de combustibles no convencionales. En esos términos buscarán unificar el cuadro legal y fiscal de los distintos distritos petroleros.
En el borrador, en cambio, no se explicita la imposibilidad de las provincias de cobrar un canon de ingreso, un modelo aceptado por el titular de YPF, Miguel Galuccio (lo aplicó con Chevron en Vaca Muerta), el principal opositor a que las provincias ponderen la sociedad de sus empresas estatales en los negocios petroleros por sobre los márgenes de inversión. “Si una empresa, sea la estatal provincial o YPF, ganan una licitación para desarrollar un yacimiento, nadie les impedirá cobrar un canon de ingreso si deciden asociarse con otra compañía en el proyecto”, detallaron.
Guiño a las inversiones
Lo que contemplan en el Gobierno nacional es que cada Legislatura provincial deberá refrendar la ley nacional, para adherirse. Y que en algunos casos esa sanción será compleja, como ocurre en Mendoza o Neuquén. Esa es una de las razones por las que para acceder a los beneficios fiscales planteados en los decretos 927/13 y 929/13 (suspensión de retenciones, libre disponibilidad de divisas, quita de impuestos a la importación de materiales, etc), que serán ley con la nueva reglamentación, el mínimo de inversiones se bajará de 1.000 a 250 millones de dólares. “Con 250 millones no avanzas nada con no convencional, pero podrán desarrollarse proyectos off shore o extracción tercerizada”, explicaron a BAE Negocios. Un guiño a provincias sin reservas de hidrocarburos sheil. Eso permitirá a algunos distritos reactivar yacimientos paralizados por falta de inversiones, algo que podría empujar a los parlamentos locales a aprobar la adhesión de las provincias al nuevo régimen nacional, una vez que sea sancionado”.
El borrador que la presidenta Cristina Fernández entregó el lunes a la Ofephi sienta las bases de una profunda reforma en el mercado petrolero. En los términos que está planteado, las provincias pierden mucho peso, aunque aún no está nada definido.
Los gobernadores presentarán el lunes una contrapropuesta para que la redacción final del proyecto les sea más favorable. Hay varios puntos del documento que recibieron de Nación que rechazan de plano. Ayer se difundió el texto, que fue ampliamente repudiado en la escena política local y que tiene seis puntos:
1) Plazos de exploración y explotación diferenciados por tipo de yacimiento. Se reducen los plazos de exploración, se revisan las condiciones para su renovación y se distingue su duración entre convencionales, no convencionales, plataforma continental y mar territorial. En las concesiones se mantiene el plazo de 25 años para el convencional, se establecen 35 años para el shale y 30 para en aguas profundas. En los tres casos habrá una prórroga de 10 años.
2) Mantenimiento de las regalías y aportes en concepto de responsabilidad empresaria (RSE) y para infraestructura. Las regalías son el único mecanismo de percepción de la renta petrolera. Gobernadores como Paco Pérez, de Mendoza, quieren que el techo quede en el 15% de la producción.
Aunque no está en la redacción del proyecto, las petroleras aportarían a las provincias el 0,5% de la inversión comprometida en concepto de RSE, y se destinaría el 1% a obras de infraestructura.
3) Mecanismos de adjudicación de áreas por licitación competitiva. Se priorizarán las empresas que propongan la mayor inversión y actividad exploratoria. Los pliegos de las licitaciones deben ser uniformes en todas las jurisdicciones y se eliminan las reservas de áreas. Además, desaparece el sistema de acarreo que aplican las compañías provinciales como GyP.
4) Programas fiscales y tributarios provinciales y municipales homogéneos y estables. Se establece un régimen especial para la importación de bienes e insumos. Además se impide que los municipios dicten impuestos sobre la industria petrolera. Se fija la alícuota de Ingresos Brutos en el 3% (hoy en Neuquén está en el 3,5%), y se busca quitar el impuesto a los sellos en los contratos, algo difícil de aceptar por parte de las provincias. Otra cuestión es importante es que se buscará con los gremios “nuevas modalidades laborales”.
5) Mecanismos promocionales para grandes inversiones. Se replican los beneficios del Decreto 929, que posibilitó el acuerdo YPF-Chevron, aunque esta vez el piso de las desembolsos que entran en este esquema será de 250 millones de dólares.
6)Adopción de estándares mínimos comunes en cuidado del medio ambiente.
El borrador tiene términos que reducen el margen de maniobra de las provincias, que plantearán sus discrepancias el lunes con una contrapropuesta. Elevar el techo del porcentaje de las regalías, mantener el impuesto a los sellos y recibir los fondos del canon de ingreso a las áreas son temas centrales que están en discusión.
José Brillo cuestionó “duramente” el recorte de potestades a las provincias en el diseño de las futuras concesiones que propondría la nueva ley de hidrocarburos, al señalar que “las provincias productoras no pueden ser la variable de ajuste de YPF, ni estar sujetas a los caprichos de la petrolera ni del gobierno Nacional”.
En una charla que ofreció en el Colegio de Abogados y Procuradores de la ciudad de Neuquén, en su carácter de Presidente de la Fundación FESOL, Brillo manifestó: “hace tiempo que veníamos advirtiendo de la intención de YPF de monopolizar la actividad petrolera y quedarse con Vaca Muerta. Con el proyecto que redactó YPF para que discutan los Gobernadores, ha sincerado esa postura; por eso hoy más que nunca los neuquinos tenemos que defender la autonomía sobre nuestros recursos naturales y la potestad de pensar y decidir sobre nuestro gas y nuestro petróleo, y si utilizamos o no herramientas como G&P”. “No puede ser que como dueños del recurso nos hagan competir en un plano de igualdad con empresas líderes, y además nos digiten donde va el dinero de las concesiones”. “Con la sanción de decretos como el 1277 y ahora este recorte de potestades provinciales, la Ley Corta termina absolutamente degradada”
Brillo refutó la inconveniencia del sistema de acarreo al momento de generar inversiones como lo plantea YPF. “Cómo es posible – se preguntó- que mediante ésta modalidad G&P haya logrado 57 asociaciones con empresas líderes en la industria a nivel mundial, entre ellas 23 con YPF”. “He tenido muchas diferencias con la política energética del Gobernador Sapag – continuó – pero siempre resalté la concepción de G&P como una herramienta que pone valor agregado a nuestra condición de dueños del recurso”.
“Es erróneo plantear la discusión entre G&P e YPF, cuando lo que hace rentable o inviable una inversión son aspectos como el precio del gas y del petróleo y su previsibilidad. El Gobierno Nacional y, en particular sus autoridades económicas y/o energéticas, han demostrado en la última década una gran incapacidad e incompetencia para resolver esta encrucijada energética”.
“Producto de ello, estamos frente a un serio problema - manifestó - las reservas de petróleo en Neuquén cayeron un 59 % y las de gas en un 56 %. La producción de petróleo en Neuquén bajó un 50,5 % en la última década. En tanto que la producción de gas en la Provincia ha bajado un 37 %. La declinación equivale a regalías que se pierden por lo tanto son viviendas, rutas, hospitales, escuelas que pierde cada rincón de la provincia, tenga o no petróleo”. “Parece contradictorio, pero en la década ganada para el gobierno nacional, Neuquén perdió en forma catastrófica”.
“Adhiero a una nueva ley Federal de Hidrocarburos que arroje luz sobre los baches legislativos que se presentan fundamentalmente con los no convencionales, pero que no nos quieran engañar o confundir, no son las provincias productoras ni sus empresas las que desalientan inversiones. hay que generar certidumbre en los precios en las cuencas productoras, en la política cambiaria, el comercio exterior en materia energética, la remisión de utilidades, las facilidades aduaneras de manera previsible y de largo plazo. Aspiro a un diseño ensamblado entre el ejecutivo nacional, las provincias productoras, las empresas provinciales de energía, e YPF, para salir del tremendo momento que en materia energética padecemos los argentinos”.
El senador Guillermo Pereyra (MPN) cuestionó los ejes esbozados en el borrador de la nueva ley petrolera, entregado por Nación a los gobernadores de la Ofephi.
"Claramente proponen una ley que no toca la Ley Corta, no la toca porque directamente la barre", expresó el también titular del Sindicato Petrolero. "Se avasalla la autonomía de las provincias, cómo puede ser que Nación nos diga qué porcentaje de regalías o ingresos brutos cobrar", dijo.
El legislador anticipó que se reunirá con el ministro de Energía, Guillermo Coco, y el gobernador Jorge Sapag para "elaborar un proyecto común", que pretenden acercar al próximo encuentro con Nación.
Si bien reconoció que se trata de un borrador dijo que así "es imposible que se apruebe en el recinto (del Congreso Nacional).