Un seminario organizado por BTG Pactual fue el evento escogido por Sebastián Piñera para realizar su primera exposición en calidad de ex presidente de la República, oportunidad en la que analizó la actualidad del país frente a empresarios e inversionistas locales y extranjeros. Y como era de esperar, dedicó parte importante de los 40 minutos que duró en total su presentación para analizar el tema que concentra el debate económico y político: la reforma tributaria.

Partió recordando que en su gobierno también se realizó una reforma tributaria para financiar el proceso de reconstrucción post terremoto-tsunami de febrero de 2010, pero recalcó que en ese caso además de cumplir con ese objetivo, adicionalmente se aumentó la capacidad de crecimiento, de creación de empleo, de inversión y de oportunidades.

“Desde ese punto de vista, no cabe la menor duda que una reforma que afecta en forma tan directa y tan categórica la capacidad de ahorro e inversión de un país va a tener un impacto sobre el crecimiento, sobre el empleo, sobre la productividad, sobre las oportunidades, sobre la creación de nuevos emprendedores”, afirmó el ex mandatario sobre el proyecto que impulsa el actual gobierno.

Piñera también hizo referencia a la eliminación del Fondo de Utilidades Tributables (FUT) aunque sin nombrarlo, señalando que le parecía “muy curioso” eliminar el mecanismo que diferencia la tasa de impuestos entre las utilidades que se reinvierten de las que se distribuyen, “y que ahora estemos preocupándonos de cómo compensar o cómo incentivar el ahorro y la inversión”. 
“Es una situación en que yo siento que no se han analizado a fondo las consecuencias de esta reforma tributaria y espero que tengamos una oportunidad de discutir en serio cuál es la mejor forma de recaudar los recursos que el país necesita para avanzar en áreas tan importantes como la educación, la salud, la seguridad, la lucha contra la pobreza”, expresó.

Impacto en el crecimiento


De acuerdo a lo expuesto por Piñera, los mecanismos de recaudación que propone el actual proyecto de reforma tributaria van a tener un impacto mayor del que era estrictamente necesario en uno de los puntos vitales para cualquier país: su capacidad de crecimiento.

En esa línea, expuso que cada punto de crecimiento significa más empleo, más oportunidades, mejores salarios, más emprendedores y al cuantificarlo, cada punto se traduce en US$ 600 millones más para el fisco y US$ 3.000 millones más para la economía en su totalidad.

“Si perdemos dos puntos de crecimiento, vamos a haber sacrificado US$ 5.000 millones al año 2017, que es cuando la reforma tributaria estaría en plena vigencia”, manifestó y ante ese escenario, señaló que tanto la reforma tributaria como la educacional requiere de una mayor madurez y perfeccionamiento.

También recalcó la importancia de que la discusión se realice en un clima de mayores acuerdos, indicando que un clima de confrontación y crispado como el que se reconoce actualmente en el debate tiene efectos en la economía, principalmente en lo referido en las expectativas, como lo que ha sucedido, en su opinión, con las expectativas de los inversionistas y también de los consumidores.

Finalmente, y ante la serie de reformas que viene por delante como la constitucional, la electoral y la laboral, que se sumarán a la tributaria y educacional, Piñera llamó a mejorar la capacidad de diálogo independiente del tema de debate.

“Siento que la sociedad chilena tiene que recuperar la capacidad de diálogo, la capacidad de acuerdo, dejar de lado tanto ideologismo, dejar de lado tanto espíritu confrontacional y lograr lo que fue tal vez la esencia del éxito de la transición chilena que se hizo en un contexto de legítimas diferencias, pero también en un contexto de buena voluntad, de diálogos y de acuerdo como fue lo que caracterizó a la década de los 80”, expresó.

Eyzaguirre "está entrando a un callejón muy difícil"

En el contexto del tema tributario, el ex presidente Piñera enfatizó la importancia de aclarar el destino de los recursos que se recaudarán con el proyecto hoy en trámite en el Senado, tal como -según recordó- se lo hizo ver al entonces ministro de Hacienda, Alejandro Foxley, cuando se debatía la reforma impositiva a comienzos de los '90. "Yo espero que en el Senado predomine más sentido común, más sentido de país, menos ideología, menos imposición y se discuta primero que nada en que vamos a gastar esos
US$ 8.200 millones anuales que la reforma pretende recaudar. El costo de eso es perder dos puntos de crecimiento anual, que es lo que estiman en promedio los expertos".

Sobre el punto, añadió que si la reforma tributaria es para comprar escuelas que hoy existen y que los sostenedores no quieren vender, "no hace absolutamente ningún sentido". De paso, advirtió sobre la reforma educacional: "El gobierno se está encontrando con demasiados frentes, no la quiere la Confech, la Cones, el colegio de profesores, la DC, la Alianza, ¿quién la quiere?, y el ministro Eyzaguirre no se ha dado cuenta de que está entrando a un callejón muy difícil porque está empujando una reforma no ha dado a conocer."
"Si nos pusiéramos de acuerdo en el destino de los recursos y después dijéramos cuánto se quiere recaudar...Acá nos dicen que el corazón no se toca y esa no es la forma de negociar y de llegar a acuerdos. Si se sigue con el camino de empujar reformas que no están bien y no han sido debatidas, está equivocado. El presidente de la republica es quien tiene que favorecer un clima de conversación".

"Lo realista es plantear que la economía chilena va a crecer menos de 3% en 2014"

Fiel a su formación de economista, el ex presidente Sebastián Piñera no dejó de lado su análisis sobre la coyuntura macro y defendió el legado de cifras de crecimiento de su administración.
"Las proyecciones para 2014 no son buenas para Chile. Lo realista es plantear que la economía chilena probablemente va a crecer menos de 3%, va a crear muy pocos empleos, va a tener una caída significativa en la tasa de inversión y vamos a tener un incremento importante en las tasas de desempleo", dijo Piñera en el encuentro de BTG Pactual.

Aseguró que "esto es producto no del azar, porque la verdad es que hay otros países que están enfrentando las mismas condiciones que Chile y que, sin embargo, han logrado sortear mucho mejor esta crisis y, por tanto, tenemos que de una vez por todas abandonar esa mala práctica de echarle la culpa al empedrado y asumir cuáles son nuestras propias cuotas de responsabilidad en el hecho que nuestro país no logre mantener por períodos largos como se requiere una tasa de crecimiento sólida y sustentable, acompañada, por supuesto, de reformas que permitan una sociedad más justa, una sociedad más prospera y una sociedad más libre".

Piñera graficó este escenario como "una pérdida grave y tal vez más duradera de lo que se imaginaba que es nuestra capacidad de crecer, de crear empleos, de invertir y de crear emprendedores".
El ex mandatario citó un estudio de su fundación Avanza Chile, que dice "muestra que la mayor capacidad de creación de empleos está en las nuevas empresas. Una empresa nueva crea en promedio 2,2 trabajos netos en sus dos primeros años. Se crearon más de 250 mil empresas en el período anterior, lo cual explica más de la mitad del millón de empleos del período anterior".
Sin embargo, advirtió que "hoy en lugar de estar aumentando el número de empresas, se está disminuyendo el número de sociedades y eso va a tener un impacto muy fuerte en la capacidad de crear empleos de la sociedad chilena".

Piñera también amplió el espectro de reparos sobre la gestión económica a otros ex presidentes de la Concertación. "La promesa que hicieran el presidente Frei y Lagos de que íbamos a llegar al Bicentenario como país desarrollado se frustró... Esa es la promesa que los chilenos tenemos que ser capaces de resucitar y plantearnos como meta para esta generación y para esta década, transformar a Chile en el primer país de América Latina -ojalá no el único- que logre dejar atrás la pobreza, el subdesarrollo y cree una sociedad que le dé seguridades, es decir, dignidades y oportunidades para desarrollar sus talentos a todos sus habitantes", dijo.

Piñera concluyó en el encuentro con ejecutivos que "hoy día estamos enfrentando cinco grandes reformas: la tributaria, la educacional, la constitucional, la electoral y la reforma laboral. Uno puede discutir en su mérito y en su contenido cada una de estas reformas y creo que este ha sido el debate de las últimas semanas en forma muy extensa y muy profunda".