El Centro Atómico Bariloche fue sede de los festejos por el 64º aniversario de la creación de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), dependiente del Ministerio de Planificación Federal. El evento se realizó en el salón de actos del CAB el viernes 6 de mayo, y en el mismo hubo reconocimientos para empleados que trabajan hace más de 30 años en la Administración Pública Nacional.
La ceremonia estuvo encabezada por Norma Boero, presidenta de CNEA, Carlos Gho, gerente de Área Energía Nuclear, Edgardo Isnardi gerente del Complejo Tecnológico Pilcaniyeu y Osvaldo Calzetta, gerente de área del CAREM. Estuvieron presentes Gerentes de la Comisión y autoridades del CAB y del Instituto Balseiro.
En el inicio del acto se proyectó un video institucional sobre las principales actividades, proyectos e hitos de la CNEA, en particular la puesta en marcha de Atucha II.
En su discurso, Boero destacó: “Hoy podemos decir que estamos concretando los desafíos que enfrentamos desde el relanzamiento del Plan Nuclear en el año 2006. La central nuclear Néstor Kirchner (Atucha II) ya entró en criticidad y su puesta en marcha es un logro que enorgullece a todos los argentinos. La nueva central además le brindará al sector un nuevo impulso, dinamizando áreas que son estratégicas para su funcionamiento independiente, como por ejemplo la ampliación de la capacidad de producción de dióxido de uranio en DIOXITEK, por lo que se está encarando la instalación de una nueva planta en la provincia de Formosa”.
Además, Boero anticipó que “la Argentina en muy breve tiempo va a poder decir que después de 31 años recupera su capacidad de enriquecer uranio, haciendo valer su posición de pertenecer al selecto grupo de 11 países que el Organismo Internacional de Energía Atómica reconoce como poseedores de esta tecnología. Por otro lado, el Complejo Minero San Rafael está cumpliendo con los requisitos ambientales de la provincia de Mendoza y realizando actividades tendientes a su reactivación”.
Por su parte, Carlos Gho remarcó: “Hoy festejamos el cumpleaños de la CNEA y de toda la actividad nuclear. Es un día de alegría que se repite desde hace 64 años”. Y señaló que es una semana muy especial, ya que el martes 3 de junio se produjo la primera criticidad del reactor Atucha II. “Esta será una fecha histórica, es el momento en el cual Atucha II dejó de ser un conjunto de edificios, instalaciones, equipos y componentes y pasó a ser una verdadero reactor nuclear”, dijo Gho.
Gho también recordó a los compañeros del CAB que fallecieron en los últimos 12 meses, y destacó que se los recuerda con cariño y agradecimiento. Asimismo, hizo hincapié en la importancia del homenaje que se realiza cada año en este acto a los empleados que han cumplido 30 y 45 años de labor ininterrumpida con la Administración Pública. Mencionó que gracias a todo el personal de profesionales, técnicos, administrativos y de apoyo “es que el CAB puede aportar a la CNEA su contribución a proyectos como Atucha II, Embalse, CAREM, RA-10 y el Centro Tecnológico Pilcaniyey, entre otros.
Asistieron al acto, el Subsecretario de Ciencia, Tecnología y Desarrollo para la Producción de la Provincia de Río Negro, Daniel Quattrini; el Presidente del Concejo Municipal de la ciudad, Ramón Chiocconi; el Secretario de Desarrollo Estratégico de la Municipalidad de la ciudad; la Secretaria de Medioambiente, Susana Moyano; el Cnel. Ricardo Daniel Secotaro, Director de la Escuela Militar de Montaña; y autoridades del Escuadrón 34 de la Gendarmería Nacional, de INVAP S.E. y de Bomberos de la Policía Federal del CAB; y autoridades de distintas instituciones y fuerzas de la ciudad.
Luego de los discursos, miembros de la Sección Protección Ambiental y Radiológica del CAB entregaron al Presidente del Concejo Municipal Ramón Chiocconi, el Informe Ambiental Anual del CAB correspondiente al año 2013. En el documento por profesionales de la mencionada Sección, el Centro Atómico Bariloche hace públicas las actividades de gestión ambiental que realizan los distintos grupos de la Institución.
Reconocimiento a trabajadores del CAB
Siguiendo la tradición de cada aniversario de CNEA, trabajadores del CAB con 30 años de servicio en la Administración Pública Nacional, recibieron una medalla por su labor. Este año fueron reconocidos: María Fernanda Alonso, Rafael Ancalao, Eduardo Calfin, Jorge Calfinao, Alejandro Clause, Conrado Eggenschwiller, Pablo Fainstein, Julio Guimpel, José Luis Lago Fernandez, Angel Mayorga, Jorge Micuda, Sixto Fernando Millaman, Ruben Orecchia, Jorge Ruben Pérez, Julio Cesar Pérez, Federico Roge, Marcos Sade Lichtmann, Eduardo Sovarzo, Marisa Velazco Aldao, Guillermo Zampieri.
También recibió un llavero como distinción por 45 años de servicio en la Administración Pública Nacional, Ricardo Gludovatz. Por otra parte, se entregaron placas recordatorias a jubilados de la Institución: Mariano Aranda, Alejandra Brown, Conrado Melin, Víctor Hugo Ponce y Graciano Zanella.
Historia de la CNEA
El 31 de mayo de 1950, mediante el Decreto Nº 10.936/50, el Presidente Juan Domingo Perón crea la Comisión Nacional de Energía Atómica. Desde entonces, el organismo se dedicó al estudio, al desarrollo y a las aplicaciones en todos los aspectos vinculados con la utilización pacífica de la energía nuclear. Hoy es el organismo promotor del área en nuestro país.
La Argentina se destaca por impulsar el uso de la energía nuclear con fines pacíficos, apostando a la investigación y a la innovación en el ámbito nuclear. De hecho, desde su creación hace más de seis décadas, la CNEA aporta logros de importancia, que acompañan y contribuyen al crecimiento del país, de la región e incluso de la ciencia en todo el mundo.
El campo nuclear se empezó a desarrollar en el país con la formación profesional en las ciencias y tecnologías asociadas; luego, se crearon laboratorios y se iniciaron actividades específicas, como la radioquímica, la metalurgia y la minería del uranio.
Posteriormente, se consolidaron actividades específicas para la construcción y operación de reactores de investigación y sus combustibles, la producción de radioisótopos y el empleo de las radiaciones ionizantes para diagnóstico y tratamiento médico, y se alcanzó la madurez con el acceso a la nucleoelectricidad (que llegó a producir, con solo 2 centrales, el 8 % de la energía eléctrica del país), lo que implicó la construcción y operación de centrales de potencia y el dominio del ciclo de combustible. En la actualidad, la CNEA avanza en la construcción del proyecto CAREM, primera central de diseño 100 % argentino.
El liderazgo a nivel regional también se observa en el campo de la medicina nuclear y, muy particularmente, en el de la producción de radioisótopos. Cabe destacar que la CNEA produce el molibdeno-99, e incluso exporta otros radioisótopos —como el iodo-131 y el cobalto-60— que contribuyen al tratamiento de ciertos tipos de cáncer.
La CNEA tiene presencia, a través de sus instalaciones, delegaciones y exploraciones mineras, en las provincias de Salta, Catamarca, La Rioja, Mendoza, Córdoba, Formosa, Santa Fe, Entre Ríos, Buenos Aires, Capital Federal, Chubut, Neuquén, Río Negro y Santa Cruz.