Un grupo de 50 palmicultores, en representación de los más de 7 mil que se dedican a dicha actividad en la Amazonía, protestó ayer en el frontis de la sede de Indecopi, en Lima, para exigir que no se modifique la Norma Técnica del Biodiésel.

Y es que dicha modificación los sacaría completamente del mercado peruano para la producción de biodiésel a base de palma aceitera.

Así lo explicó el presidente del Comité Nacional de Palmicultores (Conapal), Ledgar Arévalo, quien señala que es Petroperú la entidad que insiste en la modificación de dicha norma, la cual favorecería a la importación del biodiésel argentino, pese a que es política del Estado el desarrollo de la palma aceitera.

El ingreso del combustible argentino es el motivo por el cual los pamicultores ven afectada la industria nacional, compuesta en gran medida por la empresa Palmas del Espino del Grupo Romero.

Wattson Garay (46), productor de palma aceitera de Tocache, dueño de tres hectáreas que producen entre 4 a 5 toneladas al mes, expresó su preocupación ante el incremento de la importación del biodiésel argentino al país porque afecta a su modo de subsistencia. "Cultivé la hoja de coca pero cuando el Gobierno dio la opción de un cultivo alternativo, elegí la palma aceitera", dijo.

El año pasado, Indecopi inició una investigación para la aplicación de medidas compensatorias sobre las importaciones de biodiésel de EE.UU.,pues había indicios de daño en la industria.