Es como consecuencia del del acuerdo con los países acreedores, luego del cierre del acuerdo con el Club de París.
El acuerdo con el Club de París fue celebrado por el gobierno de Jorge Sapag. “Es muy importante haber cerrado el acuerdo con el Club de País. Creo que haber llegado a un acuerdo con Repsol por una parte, luego haber estructurado esta deuda con el Club de París y además avanzar con las represas del sur y con Chihuido como ingreso de divisas, son situaciones que ponen a la República en un nivel superlativo en lo que hace a nuevas inversiones que van a empezar a llegar”, destacó el mandatario neuquino luego de finalizado el acto de apertura de sobres para Chihuido.
Sapag elogió el papel del ministro de Economía, Axel Kicillof. “En su momento lo habíamos hablado y él decía que era lo que le faltaba terminar de cerrar para poner Argentina en una carrera distinta, donde nosotros necesitamos esta apertura de capitales para Vaca Muerta, los recursos no convencionales, el gas y el petróleo”, remarcó el mandatario neuquino.
En tanto, El ministro de Economía, Axel Kicillof, resaltó el acuerdo con el club de París y auguró más inversiones para la formación de Vaca Muerta.
"Al no pagar al Club muchas agencias de crédito internacionales que querían invertir en la Argentina, decían que se les complicaba darnos el financiamiento que les interesaba realizar. La expectativa es que aparezcan nuevos interesados en invertir en la Argentina. Antes eso no se tenía en cuenta", dijo Kicillof, en declaraciones a Radio Continental.
En particular dio ejemplos como la explotación de hidrocarburos no convencionales en la formación de Vaca Muerta o en turbinas eléctricas.
Cabe recordar que, como se informó en la madrugada del jueves 29 de mayo, el acuerdo con el Club de París implica un pago de U$S 650 millones el próximo mes de julio y otro de U$S 500 millones en mayo de 2015, en efectivo. Entre ambos montos, habrá pagos en efectivo por U$S 1150 millones, mientras el resto de la deuda, de U$S 8550 millones, será financiada a cinco años.
Además, se estableció un pago mínimo que deberá afrontar la república cada año y se fijó un criterio de pagos adicionales en caso de incremento de las inversiones provenientes de los países miembros del Club. Si durante el plazo de cinco años las inversiones adicionales fueran insuficientes –cuestión que todavía no se informó cómo se evaluará– el país puede posponer los vencimientos hasta dos años más totalizando siete años, con lo que podría incrementarse el costo financiero en alrededor de un punto porcentual adicional para el período completo.
El acuerdo con el Club de París fue saludado por el gobierno de Jorge Sapag con entusiasmo. La noticia llegó el mismo día en que se abrieron las ofertas para construir la represa Chihuido, y sumó optimismo en el porvenir provincial, ya que se interpreta como una señal muy positiva para alentar más inversiones en Vaca Muerta.
El fantasma de esa deuda impaga era una condición negativa para los inversores, sin duda. Aunque no significa que este acuerdo cambie todo –hay otros temas pendientes, como la revisión del INDEC por parte del FMI- es indudable que posibilidades como la que representa Vaca Muerta están más cerca ahora de recibir inversiones nuevas.
“Es muy importante haber cerrado el acuerdo con el Club de País. Creo que haber llegado a un acuerdo con Repsol por una parte, luego haber estructurado esta deuda con el Club de París y además avanzar con las represas del sur y con Chihuido como ingreso de divisas, son situaciones que ponen a la República en un nivel superlativo en lo que hace a nuevas inversiones que van a empezar a llegar”, destacó el gobernador Jorge Sapag, a poco de finalizado el acto de apertura de sobres para Chihuido.
Sin reservas, Sapag elogió el papel del ministro de Economía, Axel Kicillof, en el acuerdo. “En su momento lo habíamos hablado y él decía que era lo que le faltaba terminar de cerrar para poner Argentina en una carrera distinta, donde nosotros necesitamos esta apertura de capitales para Vaca Muerta, los recursos no convencionales, el gas y el petróleo”, remarcó el mandatario neuquino.