El senador y sindicalista Guillermo Pereyra redobló la presión sobre el gobierno nacional en su defensa de las refinerías locales, al avisar que si bien el sindicato acató la conciliación obligatoria dispuesta por Trabajo frente al paro decretado para el lunes, el tema “no está resuelto, y en 15 días que puede durar la conciliación, hay refinerías que pueden cerrar”.
“En las actuales condiciones que impone el gobierno (nacional), las refinerías chicas asentadas en Neuquén son inviables. Esta conciliación dilata la agonía, porque incluso durante los 15 días que dura, algunas refinerías pueden cerrar”, dijo Pereyra.
Desde el sindicato petrolero se hizo notar que la conciliación obligatoria dictada por el ministerio de Trabajo es “curiosa”, porque el hecho es que “no hay conflicto entre el gremio y las refinerías”, sino que la protesta estaba encarada directamente contra una medida del gobierno de Cristina Fernández.
En ese contexto, se explicó que la conciliación se acata por el gremio por una cuestión legal, pero que se interpreta que no soluciona nada de la cuestión de fondo, y por ende “sigue en peligro la fuente de trabajo de unos 500 compañeros”.
El Sindicato de Petroleros Privados de Neuquén, Río Negro y La Pampa, que comanda el senador nacional Guillermo Pereyra, acató la conciliación obligatoria y no concretará el paro convocado para hoy, por 24 horas, en los yacimientos -entre ellos, el de Vaca Muerta- ante la falta de respuestas por la situación de las refinerías chicas como las de Cutral Co, Plaza Huincul y Senillosa.
El reclamo que realiza el legislador del Movimiento Popular Neuquino -e integrante de la mesa chica de la CGT-Azopardo, que comanda el líder de los Camioneros, Hugo Moyano- es en pos de la aplicación de un régimen impositivo que iguale a las refinerías locales con la situación de las extranjeras.
Desde el sindicato consideran que las firmas locales se encuentran en desventaja al tener que pagar el Impuesto a la Transferencia de Combustibles, lo que llevaría a poner en riesgo decenas de fuentes de trabajo.
"Es una barbaridad que lo que se produce acá tenga que pagar ese impuesto, generando mayores ganancias para los extranjeros", destacó Pereyra el viernes pasado. Según el senador nacional, "con la eximición de la que gozan las empresas grandes debería bajar un 40% el combustible pero, por el contrario, se ampliaron sus márgenes de ganancia".
El gremialista dejó en claro que en caso de no obtener una respuesta concreta que solucione la situación de crisis, "se profundizará la medida de fuerza el 2 de junio, pero por 48 horas, y con afectación de la producción".