Charles Plosser, presidente de la Reserva Federal de Philadelphia, advirtió que una economía fortalecida podría obligar al banco central de Estados Unidos a elevar las tasas de interés "más pronto que tarde" para anticiparse a la inflación.
En una postura de línea dura sobre política monetaria, Plosser dijo que la Fed corre el riesgo de quedar "detrás de la curva" en el control de la inflación si la política se mantiene en el actual nivel de flexibilidad, en momentos en que la economía crece y el mercado laboral sigue mejorando.
En un discurso en Washington, el funcionario estimó un crecimiento del 3 por ciento este año, a pesar de un opaco resultado en el primer trimestre que él y la mayoría de los miembros de la Fed han atribuido al clima frío que afectó a Estados Unidos en el invierno boreal.
En líneas generales, Plosser dijo que la economía "está en la posición más firme desde que comenzó la recuperación", según un texto preparado para una conferencia.
El funcionario desestimó la lectura del primer trimestre como una aberración y dijo que los "detalles subyacentes son (...) alentadores".
"A medida que nos acercamos a nuestra meta de inflación del 2 por ciento y el mercado laboral mejora, debemos prepararnos para ajustar la política adecuadamente", indicó Plosser, quien actualmente es uno de los miembros de bancos regionales que integra la principal comisión de política de la Fed.
"Eso exigiría que empecemos a elevar las tasas de interés más pronto que tarde", agregó.
Plosser ha mantenido una postura cercana a los más preocupados por el riesgo de que la inflación se desate como consecuencia del largo período de política monetaria flexible de la Fed.
Las tasas de interés se han mantenido en la práctica cerca de cero durante cinco años, y el banco central también llevó a cabo una serie de programas de estímulo mediante los cuales compró 1.4 billones de dólares en activos.
Wall Street ya espera a la Reserva Federal (Fed)... y no de la mejor forma posible. Este martes, los índices de la bolsa neoyorquina han sufrido una jornada de destacadas pérdidas lastrados por el sector de la distribucióny preocupados por los nuevos mensajes que han lanzado dos miembros del banco central estadounidense.
A la espera de que mañana se publiquen las actas de la reunión del mes pasado, los presidentes de la Fed en Filadelfia y en Nueva York han lanzado mensajes contradictorios que han confundido al mercado. Por un lado, el presidente de la Fed de Filadelfia, Charles Plosser, ha destacado que la expansión que la economía estadounidense está viviendo en esta primaverapodría suponer que el organismo tenga que elevar los tipos de interés "cuanto antes mejor que más tarde". De hecho, cree que la tasa de paro podría bajar del 6% a finales de año.
Por el contrario, el presidente del banco central en Nueva York, William Dudley, ha indicado que habrá un "tiempo considerable" entre el final del programa de compra de bonos (QE3) y la subida de los tipos, que se encuentran cercanos al 0% desde 2008. Todo esto un día antes de que se conozcan los detalles de la última reunión del banco central en la que se decidió recortar los estímulos en otros 10.000 millones de dólares.
De este modo, el Dow Jones ha sido el más perjudicado al bajar un 0,8%, hasta 16.374 puntos, mientras que el S&P 500 se ha dejado un 0,6%, hasta 1.872 enteros, y el Nasdaq ha caído un 0,8%, hasta 4.096 enteros.
Por su parte, el sector de la distribución ha sido el otro principal lastre del mercado después de una cascada de resultados y previsiones.. Staples, la compañía de venta de artículos de oficina, se ha derrumbado más de un 12%, hasta 11,7 dólares por título, después de que haber presentado unas previsión de ventas a la baja para el trimestre actual. Su principal competidora,Office Depot, también ha descendido posiciones arrastrada por los descensos del sector. Se ha dejado más de un 6%, hasta 4,9 dólares.
Urban Outfifters tambiéne ha pagado unos peores resultados en el mercado. La compañía ganó un 20% menos en el trimestre pasado, a pesar de que registró unas ventas récord. Las acciones han caído un 8,8%, hasta 32,9 dólares. El efecto contagio se ha extendido a otra marca, Dick's Sporting Goods, que se ha hundido más de un 17%, hasta 43,6 dólares.
Por el contrario, Home Depot ha cotizado en sentido contrario. La empresa minorista de venta de materiales de bricolaje ha avanzado un 1,9% después de haber ganado un 12,5% más en el primer trimestre de su ejercicio fiscal y haber mejorado sus previsiones para todo el ejercicio. Sus títulos suben a 77,9 dólares.
Era uno de los acontecimientos más esperados del día, pero el mercado lo ha dejado pasar de largo. Microsoft ha presentado hoy su nueva Surface 3, un acto que contaba con la expectación de los inversores. Sin embargo, las pocas novedades que ha incorporado la compañía han hecho que sus acciones bajen un escueto 0,1%, hasta 39,6 dólares.
En el mercado de deuda, el interés del bono estadounidense a diez años se ha bajado al 2,51%, mientras que el dólar gana posiciones al euro y lo deja en 1,370 unidades.
En las materias primas, el crudo Texas ha cerrado con un descenso del 0,16% , hasta 102,4 dólares el barril. El oro, por su parte, ha bajado un 0,7%, hasta 1.291 dólares la onza.