El funcionario expuso en la UBA sobre los objetivos en materia energética para los próximos años y remarcó que el proyecto político del kirchnerismo va más allá de las elecciones presidenciales de diciembre de 2015.
“Este proyecto nacional y popular no termina el 10 de diciembre de 2015. Va a continuar porque es una necesidad irrevocable del pueblo argentino”, aseguró ayer el ministro de Planificación, Julio De Vido, al disertar en una jornada organizada por el flamante Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo Humano (Oetec) en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA. “No hay un fin de ciclo en la Argentina. Lo que hay es una etapa de nuevos objetivos y una mayor profundización de la integración del territorio y de la inclusión social”, sostuvo el funcionario, quien detalló las prioridades del plan energético para el período 2014-2019.
De Vido expuso en el aula magna de la facultad ante un auditorio heterogéneo integrado por funcionarios de organismos públicos, intendentes del conurbano bonaerense, especialistas del sector y estudiantes de la casa. Lo acompañaron en el panel el presidente provisional del Senado, Gerardo Zamora; el diputado Dante González; el intendente de Berazategui, Patricio Mussi; el vicepresidente de Adimra, Juan Carlos Lascurain; y el director general de Oetec, Federico Bernal. Desde el comienzo de su intervención, el ministro de Planificación se mostró interesado en remarcar que el proyecto político que expresa el kirchnerismo va más allá de las elecciones presidenciales de diciembre de 2015. “No podemos ni debemos imaginar una Argentina donde Cristina Fernández de Kirchner no opine más sobre los temas centrales del país. La referencia política de nuestra Presidenta y de nuestro proyecto va a continuar”, aseguró.
En línea con el planteo de darle continuidad al proyecto, el funcionario detalló los proyectos energéticos que piensan iniciar o potenciar en el período 2014-2019, aunque el futuro de esos desarrollos dependerá del resultado electoral del año próximo. En el listado, De Vido incluyó las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, que ya fueron adjudicadas a un grupo encabezado por la firma china Gezhouba y para las que se continúa negociando el financiamiento; las once represas hidroeléctricas que fueron promocionadas en China, Rusia y Brasil durante un road show realizado en diciembre y entre las que sobresale Chihuido I; las centrales térmicas Vuelta de Obligado, Guillermo Brown y Belgrano II; el reactor Carem y la cuarta y quinta central nuclear; las hidroeléctricas binacionales Garabí y Panambí, el Plan de Transporte Federal II para el desarrollo de las redes intraprovinciales; el Gasoducto del Noreste, una serie de proyectos de desarrollo de energías renovables y la explotación de los recursos petroleros no convencionales.
De Vido también repasó las obras ya concretadas y que el Gobierno ha venido resaltando en los últimos días, a raíz de haberse cumplido una década desde que Néstor Kirchner lanzó el plan energético el 11 de mayo de 2004. Puso especial énfasis en el rol que cumplió la empresa estatal Enarsa, cuando YPF todavía era privada. Además, resaltó la expropiación de las acciones de Repsol en YPF, acción que justificó por la falta de inversiones de los españoles. Al mismo tiempo, elogió las obras que concretaron algunas empresas privadas luego de que se lanzó el plan Energía Plus de acuerdos entre las industrias y las generadoras.
El ministro volvió a cuestionar al grupo de los ocho ex secretarios de Energía que permanentemente critican la política energética oficial. “Lo que quieren ellos es aumentar las tarifas. Para eso algunos se presentaron como testigos en el Ciadi a favor de las empresas, para joder a los argentinos”, recordó. No obstante, aseguró que a esos sectores les será difícil dar marcha atrás con lo hecho en estos años. “Puede que nos reclamen muchísimas más cosas, y con razón, falta mucho por hacer, pero la gente no está dispuesta a ceder un ápice en los derechos que ha adquirido en materia social, energética y territorial”, concluyó.