WILFREDO HUANACHÍN OSORIO
whuanachin@diariogestion.com.pe

Se complica más. A inicios de esta semana se comunicó la paralización de la planta del circuito de zinc, y ahora el complejo metalúrgico de La Oroya corre el riesgo de sufrir un apagado total, ya que los inventarios de este metal (plomo) se estarían terminando entre finales de esta semana e inicios de la próxima.

Se supo que de los tres hornos correspondientes al circuito de plomo, solo estaría funcionando uno. Desde el 2009 a la fecha, el circuito de cobre es la línea metalúrgica que no viene funcionando en La Oroya, ya que debe cumplir con las normativas ambientales exigidas por el Gobierno. En el caso del circuito de zinc, en julio del 2012 se volvieron a prender las máquinas.

Sin embargo, los actuales proveedores dejaron de vender zinc a Doe Run Perú porque exigen la venta del mineral al contado.

Reestructuración
La reestructuración laboral en Doe Run Perú sigue una carrera contra el reloj que expira el próximo 26 de mayo.

Hasta esa fecha, se esperaría que la empresa obtenga la aceptación de unos 750 trabajadores que admitan su retiro de la compañía, a cambio de un incentivo mínimo de entre S/. 15,000 a S/. 20,000, así como la opción de adquirir una vivienda en La Oroya (zonas de Marcavalle o Buenos Aires) a manera de compensación por beneficios sociales, cuyo monto por trabajador asciende a S/. 50,000.

EN CORTO

Perspectiva. Un proceso de pase al retiro de unos 750 trabajadores buscaría optimizar las operaciones de la refinería y permitiría la adquisición de los activos de Doe Run Perú bajo un esquema de reestructuración. De llegar al objetivo, DRP tendría 2,200 trabajadores en su planilla.