El inventario Randolph, el mapa más completo de los glaciares del mundo -liberado esta semana-, detectó 197.654 de ellos en el planeta. En total, cubren cerca de 727.000 km2.
La Patagonia fue uno de los lugares más complejos de analizar, pues por sus condiciones atmosféricas es difícil obtener imágenes satelitales en las que se vea la superficie de los glaciares, cuenta a La Tercera Graham Cogley, experto de la U. de Trent (Canadá) y uno de los autores del informe. “Aunque estamos satisfechos, aún hay mucho por mejorar. Sudamérica es uno de los lugares donde el trabajo es más desafiante”, indica.
Según el inventario, en los Andes del sur cubren 29.333 km2. El 80% de esa superficie está en Chile. De acuerdo a la Unidad de Glaciología de la Dirección General de Aguas (DGA), que realizó el catastro más completo en el país y cuyos resultados fueron adelantados esta semana, en el país hay 24.114, que cubren 23.641,6 km2 de territorio. El 88% en la zona austral, donde están los más extensos.
El elevado número, señalan en la DGA, se explica por la existencia de muchos glaciares pequeños, mientras que los de mayor tamaño, más de 500 km2, están en la zona de Campos de Hielo. “También hay una realidad zonal diferenciada: los glaciares de las zonas sur, centro y norte están más fragmentados, porque el retroceso es más acelerado por sus reducidas dimensiones, mientras que en la zona austral, la fragmentación en área es menor debido al significativo tamaño de los glaciares”, explican.
Según el estudio de sus variaciones (realizado en 2011 por el CECS para la DGA), que analizó 147 de ellos, el 98% está retrocediendo. Sólo tres presentaban avances.
Gino Casassa, glaciólogo de la consultora Geoestudios y la U. de Magallanes, explica que en todo el mundo están desapareciendo los más pequeños, “proceso que se inició desde que concluyó la pequeña edad del hielo, en la segunda mitad del siglo XIX”. Un caso extremo ocurrió en Bolivia, donde el glaciar Chacaltaya -la estación de esquí más alta del mundo (5.300 msnm)- desapareció en 2010. “En Chile no hay ningún caso reportado, lo que no significa que no haya ocurrido”, dice.
Hasta ahora, los mayores retrocesos en el país -también en Sudamérica- han ocurrido en los glaciares Jorge Montt y O’Higgins (en campo de hielo Patagónico Sur) y en el glaciar Marinelli (campo de hielo de la cordillera Darwin).
En la zona norte, el caso más significativo es el del volcán Sillajhuay, Región de Tarapacá, que perdió 77% de superficie en 2008. En la zona centro, el glaciar Juncal Sur -en el límite de las regiones de Valparaíso y Metropolitana- ha perdido más de 5 km2, y en la zona sur, los Nevados de Chillán pasaron de 16,02 km2, en 1975, a 2,73 km2, en 2011.
CALENTAMIENTO Y MINERIA
Casassa señala que hay procesos naturales que provocan el retroceso, pero el calentamiento global, si bien no es causa exclusiva, “sin duda es el gatillador inicial”.
El informe de la DGA señala que el volumen perdido en los campos de hielo patagónicos se ha duplicado en los últimos años, respecto de las pérdidas desde 1975. Cerca del 9% del aumento del nivel del mar aportado por los pequeños glaciares del mundo es explicado por estos glaciares, “lo que resulta desproporcionadamente alto en relación con la superficie que representan (sólo un 6% del total planetario)”, dice el reporte.
Desde 1979, Campo de Hielo Norte ha contribuido entre 2 km3 y 4 km3 de agua anual; Campo de Hielo Sur, entre 4 km3 a 10 km3 por año.
No sólo el clima contribuye al retroceso. Durante el seminario “Glaciares y desarrollo económico”, organizado por el instituto Libertad, el experto Alexander Brenning, de la U. de Waterloo (Canadá), señaló que existen 25 zonas en Chile, Argentina y Perú donde faenas mineras intervendrán glaciares rocosos.
Un equipo internacional de científicos ha completado el primer inventario mundial de glaciares, que ha censado la superficie y volumen de casi 200.000, en un esfuerzo sin precedentes para estudiar mejor el cambio climático mediante la comparación en el futuro de su estado.
En general, los glaciares cubren un área de aproximadamente 730.000 km2 y tiene un volumen de unos 170.000 km3. Los científicos encontraron casi 200.000, pero dicen que este es el resultado menos importante del trabajo, ya que el número cambia constantemente debido a la desaparición de glaciares pequeños y la fragmentación de los glaciares más grandes. Destacan más que cada glaciar en el nuevo inventario está representado por un esquema legible por ordenador , lo que facilita el modelado preciso de las interacciones glaciar-clima.
El estímulo principal para completar el inventario fue la Quinta Evaluación recientemente publicada del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC). Varios estudios que se basaban en las versiones anteriores del Inventario Glaciar Randolph (RGI) fueron fuentes esenciales para esa evaluación. El estudio publicado ahora presenta el nuevo RGI con el primer análisis estadístico de la distribución mundial de los glaciares.
"No creo que nadie pudiera haber hecho un progreso significativo en la proyección de los cambios glaciares si el inventario Randolph no hubiera estado disponible", dijo Tad Pfeffer, de la Universidad de Colorado, autor principal del estudio que acaba de publicarse en el Journal of Glaciology . Al igual que varios de sus coautores, Pfeffer también participó en la evaluación del IPCC.
COMO ALEMANIA, SUIZA Y POLONIA
La extensión total de los glaciares en la RGI es aproximadamente del tamaño de Alemania , Suiza y Polonia. Según varios estudios , el volumen total correspondiente es de entre 35 y 47 centímetros de equivalente en el nivel del mar, es decir, el nivel del mar se elevaría en esta altura cuando todos los glaciares se derritiesen por completo.
Esto es menos de la mayoría de las estimaciones anteriores , y menos del 1 % de la cantidad almacenada en Groenlandia y la Antártida. Sin embargo, salvo un catastrófico colapso del manto de hielo poco probable, los glaciares más pequeños son considerados en riesgo mucho más inmediato bajo la presión del cambio climático ya que su hielo está, en general, ya en el punto de fusión , mientras que el hielo de los casquetes polares tiene que ser calentado hasta cero grados primero. Los glaciares contribuyen actualmente cerca de un tercio a la elevación del nivel del mar observado, casi lo mismo que las dos casquetes polares juntos, el tercio restante es resultante de la expansión térmica del agua de los océanos.
"La rápida reducción de los glaciares en los últimos 20 años, es bien reconocible en los Alpes y en otras partes del mundo ", dice Frank Paul de la Universidad de Zurich, co-autor del estudio y también autor de la primera parte del informe del IPCC que se publicó en septiembre del año pasado.