El precio de la onza de oro se aleja del soporte de mil 300 dólares, ayer ligó tres sesiones de pérdidas consecutivas después de que Rusia disminuyera las tensiones en Europa del este, dentro del contexto del conflicto con Ucrania.
Además, los comentarios de la presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, fueron negativos para la tendencia de corto plazo del metal dorado.
La Fed disipó cualquier duda de corto plazo respecto a la vigencia del tapering y la permanencia de tasas de interés cercanas a cero por ciento.
El oro subió en las últimas operaciones del jueves luego de caer más de 1% la sesión previa, a medida de que los inversionistas digerían los comentarios de la presidenta de la Reserva Federal sobre la falta de apuro por reducir el tamaño de su hoja de balance.
Los precios también se apoyaron en las tensiones geopolíticas. Separatistas prorrusos en el este de Ucrania ignoraron un llamado del presidente de Rusia, Vladimir Putin, para posponer un referendo autonómico, una medida que podría desencadenar una guerra.
El oro fue presionado por ventas técnicas y la fortaleza del dólar luego de que los comentarios del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi —respecto de que el banco podría actuar para contener la caída de la inflación en su reunión de junio— golpearan al euro.
La capacidad del metal de mantenerse por encima de su nivel de apoyo, en su promedio de 100 días cerca de 1,285 dólares la onza, desató compras, según analistas.
El oro al contado subió 0.1% en las últimas operaciones, a 1,290.11 dólares la onza.
El contrato a futuro del oro a junio en Estados Unidos cerró con una caída de 1.20 dólares, a 1,287,70 dólares.
Los inversionistas estarán muy atentos al comportamiento de los mercados.
