El Consejo de Administración de Repsol aprobó, a propuesta de su Presidente y con el informe favorable de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones, una importante remodelación de la estructura de su equipo directivo encaminada a liderar los nuevos retos y oportunidades de la compañía, y en la que destaca el nombramiento como Consejero Delegado del Grupo de Josu Jon Imaz San Miguel, hasta la fecha Director General del Área Industrial.
Con la nueva organización, el grupo Repsol refuerza la gestión de todos sus negocios y áreas corporativas, de manera que, tras el acuerdo de compensación económica alcanzado con Argentina, contará con la mejor organización para generar nuevas oportunidades de crecimiento –tanto orgánico como inorgánico- de acuerdo con sus principios de rentabilidad, responsabilidad, sostenibilidad y futuro.
La nueva estructura organizativa responde a las señas de identidad de la cultura Repsol, al apoyarse en profesionales de la empresa, con amplia formación externa e interna, altamente cualificados, con gran conocimiento del sector energético y su entorno, y una visión compartida sobre los retos futuros de la empresa.
El Presidente de Repsol considera de gran relevancia el nuevo modelo organizativo “por tener lugar en el momento oportuno, una vez conseguida una compensación adecuada por la expropiación de YPF y en el que Repsol se encuentra en una posición óptima para encaminar una nueva etapa de expansión”. En este sentido, Antonio Brufau destaca que “hoy iniciamos una nueva etapa con un nueva estructura directiva en la que la aportación conjunta del Presidente y del nuevo Consejero Delegado enriquecerá la compañía e impulsará nuestro futuro”.
Para Antonio Brufau “Josu Jon Imaz es un profesional con un brillante desempeño en Repsol, y por sus capacidades técnicas y humanas, juventud e identificación con la compañía, resulta el Consejero Delegado más adecuado para impulsar su futuro”.
Respecto al conjunto de la nueva estructura directiva de Repsol, el Consejo de Administración de la Compañía estima que “aúna la solidez que aportan Directores Generales con reconocida experiencia y valía profesional, con el impulso de las nuevas incorporaciones”, “el conjunto conforma un equipo profesional de primer nivel muy potente y completo, que garantiza el éxito de los proyectos de Repsol”.
El Consejo de Administración aprobó la propuesta de Antonio Brufau, después de que el pasado 28 de Marzo la Junta General de Accionistas respaldase, con un 99,8 por ciento de los votos, la gestión de la compañía. Asimismo, el Consejo aceptó la renuncia como Consejera Independiente de Paulina Beato Blanco a quien se le agradeció vivamente los servicios prestados. Dicha vacante será ocupada por el nuevo Consejero Delegado, quien también ha sido designado vocal de la Comisión Delegada.
El consejo de administración de Repsol nombró a un consejero delegado que asumirá las máximas funciones ejecutivas de la petrolera española, atendiendo a pedidos de accionistas como la mexicana Pemex para separar el cargo de la presidencia del directorio, que seguirá ocupando Antonio Brufau.
El nuevo máximo ejecutivo es Josu Jon Imaz, un químico de 50 años que fue presidente de Petronor y del Partido Nacionalista Vasco, y que hasta ahora dirigía las áreas industrial y de nuevas energías de Repsol, informó el miércoles la petrolera en un comunicado.
El presidente del grupo, Brufau, de 66 años, había resistido a varios ataques contra su gestión, particularmente de dos de sus mayores accionistas, la constructora española Sacyr y Pemex.
La petrolera mexicana, que mantiene tensas relaciones con Brufau, había pedido en varias ocasiones el nombramiento de un consejero delegado.
En febrero, al mando de Brufau, Repsol cerró un acuerdo de compensación valorado en unos 5.000 millones de dólares por la expropiación del 51 por ciento de la petrolera argentina YPF .
Brufau destacó en una nota tras el consejo que el nombramiento del consejero delegado ocurre "en el momento oportuno, una vez conseguida una compensación adecuada por la expropiación de YPF y en el que Repsol se encuentra en una posición óptima para encaminar una nueva etapa de expansión".
Repsol también quiso enfatizar que la gestión de Brufau fue ampliamente refrendada en la última junta de accionistas.
La expropiación de YPF por parte del Gobierno argentino en el 2012 generó tensiones entre los accionistas relevantes y derivó también en movimientos políticos entre España y Argentina.
En el acuerdo de compensación alcanzado dos años después intervinieron los gobiernos argentino y español, pero también el mexicano a través de Pemex, que controla un 10 por ciento de la española y que ha pedido la marcha de Brufau desde hace meses.