La Municipalidad de Córdoba informó que se avanza en el traslado de la planta de elaboración de dióxido de uranio que Dioxitek posee en barrio Alta Córdoba, y que se está elaborando un plan de remediación para esos predios.
En el municipio esperan que para noviembre, cuando vence el plazo que se acordó para el traslado, el proyecto ya esté definido. Por ahora, todo parece indicar que la planta se radicará a 16 kilómetros de la ciudad de Formosa, en el noreste del país.
En noviembre de 2012, la Municipalidad firmó un convenio con la Comisión Nacional de Energía Atómica (Cnea) y Dioxitek por el que la planta de procesamiento de dióxido de uranio de Alta Córdoba debe trasladarse. El acuerdo también implica el saneamiento del predio en el que se encuentran enterradas 57.600 toneladas de colas de uranio.
Se acordó un plazo de 18 meses, prorrogable por seis meses más, para el cierre de la planta de Rodríguez Peña al 3200 de barrio Alta Córdoba. Allí se elabora dióxido de uranio, una materia prima que se utiliza para la elaboración del combustible de las centrales nucleares del país. También se elaboran fuentes selladas de cobalto 60, de diversos usos industriales y medicinales.
El subsecretario de Ambiente municipal, Sebastián Roca, informó que lo acordado en el plan está en marcha, y que incluye un trabajo para llevar a “condición cero” el predio y evitar el pasivo ambiental.
La directora de Impacto Ambiental, Alejandra Toya, detalló que se está trabajando junto a la Cnea en el marco del Pramu, Proyecto de Restitución Ambiental de la Minería del Uranio, financiado por el Banco Mundial.
Toya indicó que la Cnea está haciendo las propuestas pertinentes para remediar el sitio, “para hacer un cierre y dejarlo lo mejor posible”.
“Estamos en reuniones con ellos, desde que se firmó el convenio, para discutir cuáles serían los criterios que manejaríamos. Ellos ya han ido definiendo cuál es la propuesta, y van a empezar a hacer el impacto ambiental para ver si es factible”, agregó la funcionaria.
El plan implicaría la remoción de las 57.600 toneladas de colas de uranio.
Toya subrayó que “está todo en marcha”. Sobre el destino del predio, de unas ocho hectáreas, explicó que hasta que no esté finalizado el proyecto con el impacto ambiental aprobado, no se puede adelantar.
Roca y Toya coincidieron en que se espera llegar a noviembre con el plan de traslado, cierre y remediación acordado.
No obstante, para esa fecha sería necesaria una nueva prórroga ya que aún restan pasos administrativos para la radicación de la planta, y se desconoce el tiempo que demandará su construcción.
Formosa
El pasado 19 de marzo se presentó en Formosa el Polo Científico y Tecnológico y el proyecto para la Nueva Planta Procesadora de Uranio. El anuncio incluyó una promesa de inversión de 800 millones de pesos y cuenta con el absoluto respaldo del gobierno formoseño.
Ricardo Charaviglio, de Dioxitek, aclaró que no se trata de un traslado de la planta de Alta Córdoba, sino de nuevas instalaciones. “La planta cordobesa ha quedado tecnológicamente obsoleta”, se expuso, como también que lo que se pretende desarrollar en la provincia es la más avanzada tecnológicamente”, dijo a medios formoseños.
Por su parte, Norma Morandini, senadora nacional por Córdoba, presentó un pedido de informe para requerir detalles sobre ese plan.
Entre los puntos, Morandini pide que se informen los plazos y los requerimientos legales que debe cumplir la obra.
Nueva prórroga
Mayo de 2014. El plazo del acuerdo entre la Municipalidad y Dioxitek era por 18 meses, vence en mayo y se da por descontado que se otorgará la prórroga de seis meses que está prevista.
Noviembre de 2014. La Municipalidad aspira a que para noviembre ya esté listo el plan de remediación y definidos los plazos para cerrar la planta. Dioxitek se radicará en Formosa, donde cuenta con el total apoyo del Gobierno provincial. Pero aún no se sabe cuándo iniciarán los trabajos ni cuánto tiempo demandarán, por lo que sería necesaria una nueva prórroga en Córdoba.