La entidad pública elabora una cartografía geoquímica, tanto establecer líneas de base
ambiental del territorio, como para definir sectores de prospección minera, utilizando análisis de 59 elementos químicos en cuencas hidrográficas del país.
El Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), principal organismo de producción de conocimiento e información geológica del país, realiza al mediodía de este miércoles (22 de abril), en el Café Literario del Parque Balmaceda de la comuna de Providencia, una charla gratuita –la tercera de las 12 programadas para este año- que se enmarca en la implementación del Plan Nacional de Geología, mediante el cual el Estado ya está dotando al país de una cartografía básica sobre las concentraciones químicas en el territorio.
En esta ocasión, la charla gratuita versa sobre los resultados de los llamados análisis de sedimentos de drenaje; es decir, aquellos registros geoquímicos que caracterizan a los cursos de las quebradas, de los ríos y esteros en el Norte de Chile.
“La relevancia de esto es que las cartas geoquímicas permiten identificar concentraciones naturales y no naturales de 59 elementos químicos, incluyendo metales pesados, lo que resulta útil tanto para exploración minera como para la gestión ambiental del territorio, y la información hacia la ciudadanía”, comentó el jefe de la Unidad de Geoquímica del Sernageomin y doctor en Ciencias de la Universidad de Chile, Juan Pablo Lacassie.
La mencionada Unidad de Geoquímica pretende constituirse en un referente para fijar líneas de base ambiental en el país, mediante la elaboración -en una primera etapa- de 12 “cartas” que cubren el territorio nacional de la Cordillera de la Costa y Depresión Intermedia entre Arica y La Serena. Cada carta corresponde a un área rectangular de aproximadamente 130 kilómetros de largo por 100 kilómetros de ancho (unos 13.000 km²), en el Norte de Chile.
El Sernageomin elabora anualmente 2 hojas (escala 1:250.000). Es decir, se abarcan 25.000 km² por cada año. En 2012 se publicó la hoja de Iquique, mientras que las cartas Arica y Pisagua están en su última fase para publicación y las cartas de La Serena y Vallenar se encuentran en edición.
Cabe señalar que cada una de estas cartas demanda un promedio de 600 muestras geoquímicas, a un costo de unos 250 millones de pesos por cada carta.-