Gerente general de las concesionarias, Alfonso Toro, explicó que el plan estará enfocado en la Región de Antofagasta, donde se concentra el crecimiento del consumo eléctrico.
Un plan de inversiones por US$ 38 millones ($21.200 millones) tienen previsto ejecutar las filiales de distribución eléctrica del grupo CGE que atienden en el norte.
Este desembolso representa un alza de 18% respecto de los montos ejecutados en 2013 por estas firmas ligadas al holding controlado por las familias Marín, Pérez-Cruz y Hornahuer.
El grupo EMEL, a través de Emelari, Eliqsa y Elecda, abastece a clientes regulados de las regiones de Arica-Parinacota, Iquique y Antofagasta, respectivamente, mientras que Conafe -también a su cargo- atiende a las regiones de Coquimbo y parte de la de Valparaíso. A su vez, tiene como subsiaria a Emelat, que abastece a la Región de Atacama.
Alfonso Toro, gerente general de estas compañías, explica que este plan de inversión estará enfocado en responder al crecimiento natural que experimentan estas zonas de concesión, aunque casi la mitad del monto total será destinado a su operación en la Región de Antofagasta, donde están prontos a poner en operación una nueva infraestructura que les permitirá absorber el importante aumento en la demanda eléctrica que está experimentando especialmente la ciudad de Calama, movida por el dinamismo de la actividad minera.
“El crecimiento del consumo en general ha sido bastante sólido prácticamente en todas las zonas que atendemos, aunque más hacia el norte se ha notado más, especialmente en las ciudades de la II Región y Atacama, que tuvo un crecimiento muy importante, principalmente en el área inmobialiaria, ahora volvió a un ritmo normal luego que los últimos proyectos residenciales comenzaron a detenerse”, dice Toro y agrega que “tenemos dos tipos de inversiones, la de distribución no está compuesta por grandes obras indidivuales, pero sí por muchos proyectos de menor envergadura para extender o reforzar las redes a medida que las ciudades van creciendo. Esto hace que el flujo de inversión sea constante y dependa de la tasa de crecimiento de estas ciudades. En transmisión, las inversiones son importantes y más puntuales”.
Servicios a la minería
Toro comenta que otra área en la que buscan seguir creciendo son los servicios a la minería, segmento de negocios en el cual están presentes hace varios años, tanto a través de las filiales de Grupo Emel como de las operaciones de Conafe, y que mediante un proceso de consolidación que ejecutaron en 2013 representaron aproximadamente el 20% de la utilidad final consolidada.
Esta actividad incluye la venta de prestaciones de mantenimiento y la construcción de líneas eléctricas. En este punto, comenta el ejecutivo, fue especialmente importante la instalación por parte de Emelat de tendidos para el proyecto Caserones:
“En este momento tenemos contratos de mantenimiento con las principales mineras del país, como las divisiones RT y Gaby de Codelco, así como con Escondida, Los Pelambres y Collahuasi, que fue nuestro primer contrato en esta área”, dice.
Respuesta al terremoto
Emelari y Eliqsa perdieron el 100% de su abastecimiento a causa del terremoto y la fuerte réplica que al día siguiente afectó al norte del país.
Toro hace un favorable balance de la respuesta de la compañía frente a esta contingencia, ya que la reposición total del servicio se logró en un plazo menor a lo que sucedió en eventos similares en otros puntos del país.
Los ayudó, dice, el hecho de que sus instalaciones no sufrieron grandes daños y a que contaban con protocolos de respuesta y comunicación que funcionaron adecuadamente y sin interrupción.