El gobierno continúa a toda marcha en la tramitación del proyecto de ley de reforma tributaria. Ayer el Ejecutivo ingresó una serie de indicaciones al texto legal que buscan acotar algunas atribuciones del Servicio de Impuestos Internos (SII), dando una señal de apertura al diálogo y buscando reducir potenciales focos de inconstitucionalidad.

En este contexto, la iniciativa pasó por la tarde su primera prueba de fuego en el Parlamento. Por 8 votos a favor y 5 en contra, la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados aprobó la idea de legislar el texto, con lo que a partir de hoy se iniciará la discusión en particular del articulado de la reforma.

Tanto oficialismo como oposición votaron alineados el proyecto. Los ocho sufragios favorables vinieron de los parlamentarios DC Pablo Lorenzini, José Miguel Ortiz y Matías Walker, los PS Manuel Monsalve y Marcelo Schilling, los PPD Pepe Auth y Enrique Jaramillo, y el IC Sergio Aguiló.

Tal como se anticipaba, se opusieron los diputados de la Alianza Ernesto Silva, Patricio Melero, Javier Macaya y Felipe de Mussy (todos UDI) y el RN Alejandro Santana.

La cita para discutir en particular el articulado comenzará hoy a las 15:00 y contará con la presencia del ministro de Hacienda, Alberto Arenas. El trabajo continuará mañana entre 9:00 y 10.30, también con la asistencia del jefe de las finanzas públicas.


Intenso debate parlamentario


Luego de recibir a los representantes gremiales de los fondos mutuos, de la industria automotriz, la metalúrgica y metalmecánica, y la Bolsa de Productos, los parlamentarios tuvieron un intenso debate, marcado por las diferencias entre oficialismo y oposición.

El diputado Auth fundamentó su voto en que la reforma sería “la simple expresión” del mandato popular para realizar “cambios importantes” en el sistema tributario chileno. Jaramillo, por su parte, señaló que Chile “puede y debe” subir su carga tributaria para que el crecimiento económico llegue a todos los chilenos, mientras que Walker advirtió que el proyecto debería estar aprobado en agosto para incorporar los mayores ingresos estructurales en el Presupuesto 2015. “Hoy el sistema tributario chileno discrimina entre rentas del capital y rentas del trabajo. Este proyecto busca eliminar eso”.

En la oposición, el más duro fue el diputado Melero. El también timonel de la UDI fue claro en advertir de los efectos que la reforma tendrá en el crecimiento, la inversión y el empleo.

“La Nueva Mayoría sigue creyendo que los mejores bienes y servicios los puede proveer el Estado y que los males los proveen las personas. Veo un poco de revanchismo y odiosidad contra los empresarios y emprendedores a los que las ha ido bien”, apuntó.

En tanto, De Mussy declaró “sentir pena” por la forma en que se estaba llevando la discusión en la comisión, indicando que terminó con sentimientos encontrados ya que a su juicio, la discusión en la comisión podría haber logrado avanzar mucho más. 

“Creo que no se ha logrado porque no ha existido la capacidad de escuchar, de entender los planteamientos y de buscar la mejor reforma tributaria para el país, así que, por lo mismo mi voto es en contra”, argumentó.

Macaya coincidió con dicho planteamiento e hizo hincapié en que hasta el momento de la votación no conocía el detalle de las indicaciones ingresadas por el Ejecutivo, mostrándose preocupado principalmente por las nuevas atribuciones del SII y porque aún no se tiene detalle de la reforma educacional a la cuál estarán destinados los fondos de la reforma, motivo por el cuál votó en contra de la reforma. 

En tanto, el parlamentario Santana recalcó que Renovación Nacional ha tenido la apertura suficiente para apoyar anteriores iniciativas tributarias, pero que en esta oportunidad se ha encontrado con un Gobierno de “oídos sordos”. 

“El gobierno nos obliga a tomar una posición de no ser cómplices de una reforma tributaria que va a afectar dramáticamente no a los más ricos, sino a la gente más modesta, a la clase media emergente, a la gente que tiene aspiraciones en la visa, que quiere salir adelante y confía en su gobierno”, expuso antes de decirle no al proyecto.