A pesar de la paz cambiaria, entre el 60% y 70% de los argentinos tiene el deseo latente de comprar billetes porque le brindan seguridad, según la consultora DAlessio Irol. En una población poco sofisticada para invertir, la mitad de los consultados sigue la cotización del dólar. Pero la inflación le comió los excedentes para comprarlos
A pesar de la reducción de la brecha cambiaria y la suba de la tasa de interés, el deseo latente de los argentinos por el dólar se mantiene en niveles altos, entre el 60% y 70%. El gobierno abrió parcialmente la posibilidad de comprar dólares para atesoramiento, pero la inflación reduce la capacidad de ahorro y sólo la mitad de las personas puede acceder a ellos, según un monitoreo que realiza la consultora DAlessio Irol.
Justamente el viernes, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, relacionó la baja en el impuesto a las Ganancias con la compra de billetes, al relativizar el impacto real que podría tener al mencionar la cantidad de operaciones de compra de dólares que realizan los asalariados.
La mayoría de los compradores de billetes son empleados en relación de dependencia (89,9% de las efectivizadas), y para los alcanzados, el impuesto a las Ganancias reduce también la capacidad de ahorro, que podría derivar en mayores compras de divisas.
Según datos que difunde la AFIP, entre el 27 de enero y el viernes pasado 991.153 personas validaron operaciones para comprar u$s 558,3 millones y 770.838 las efectivizaron operaciones por u$s 448,2 millones.
En promedio, las personas han comprado u$s 581,44 (a $ 7,97 promedio), por debajo de los u$s 2.000 permitidos, lo que indica que son los sectores medios los que buscan el atesoramiento. Hoy se puede comprar hasta el 20% de los ingresos de hasta $ 7.200 mensuales.
El impuesto a las Ganancias puede reducir el ahorro de los segmentos más altos de la escala social, pero para los más bajos, es la inflación la que no les permite comprar dólares.
En una población que no tiene sofisticación en cuanto a su conducta financiera, la mitad de los consultados (51%) sigue la cotización del dólar, tanto del oficial como del paralelo. Pero la inflación le comió los excedentes para comprarlo, explicó Nora DAlessio, vicepresidente de la consultora.
Es el comportamiento que se desprende del monitor de humor social y consumo que realiza DAlessio Irol cuatro veces por año entre mil individuos a nivel nacional, el cual también indica que el interés para comprar cuando tenga la ocasión se mantiene en un 14%.
Las medidas que tomó el Banco Central en lo que va del año y la flexiblización del cepo generaron una paz cambiaria, pero según las mediciones de la consultora la gente mantiene el deseo de compra.
Si pudiera, entre el 60% y 70% de los consultados compraría dólares. La gente sigue la fluctuación del blue, del oficial y la brecha cambiaria. El paralelo le da inseguridad, y sube la apetencia al 70%. Ahora la gente está más tranquila, y el guarismo está más cerca del 60%, dijo DAlessio.
Entre las razones, un 29% dijo que no hay una mejor opción para ahorrar y un 36% lo haría por costumbre.
La gente se siente segura si tiene ladrillos y dólares, agregó la socióloga encargada de las investigaciones de mercado. Es inherente a los argentinos que, cuando pueden, tratan de comprar dólares. Es la moneda de referencia y que da tranquilidad. El deseo siempre está. Pero la capacidad es menor.
Según explicaron en dos bancos, hoy la venta de dólares se da en un clima tranquilo. Las operaciones crecen tras cobrar el sueldo. Pero también observan menor capacidad de ahorro, lo que deriva en posteriores ventas al blue, a fin de mes.
En tanto, los inversores más sofisticados -una porción mínima del segmento de altos ingresos, según DAlessio Irol- sustituye el dólar por el plazo fijo desde que las tasas de interés subieron hasta el 25-26%.
El viernes el dólar ahorro cotizaba $ 9,612 y los bancos le cargan hasta 8 centavos. Según AFIP, más del 90% de las personas elige llevarse los billetes en vez de dejarlos depositados un año y ahorrarse el 20%.