La aspiradora de Fábrega funciona también en sentido inverso. El BCRA emitió pesos para recomprar Lebac que le había colocado al Banco Nación. El objetivo es que esa entidad le preste a provincias para cubrir sus necesidades, algo que la autoridad monetaria no tiene permitido. La cifra emitida podría llegar hasta los $ 11.500 millones en sólo dos semanas
La aspiradora de pesos con la que el titular del Banco Central (BCRA), Juan Carlos Fábrega, retira dinero excedente del mercado con el objeto de controlar la inflación y domar al dólar empezó a trabajar en sentido inverso. En las dos primeras semanas de marzo la autoridad monetaria emitió entre $ 8.700 millones y $ 11.500 millones para recomprar Lebac que estaban en manos del Banco Nación (BNA) y así permitir que la entidad oficial asista a provincias golpeadas por los gastos.
En las primeras dos semanas de marzo, el BCRA tuvo que revertir parte de su política de esterilización de pesos para poder financiar al sector público.
Hasta febrero, la aspiradora había sacado del mercado más de $ 38.000 millones. Lo hizo a través de las licitaciones semanales de letras y notas con las que regula la masa monetaria, las Lebac y Nobac que entrega a los bancos a cambio de su liquidez excedente.
Para esterilizar esa cantidad de dinero tuvo que elevar los rendimientos de las Lebac 13 puntos porcentuales en el año hasta llevar a la más corta por encima del 28% anual, al costo de frenar el crédito y el nivel de actividad.
En marzo, el esfuerzo siguió. En las primeras dos semanas se esterilizaron $ 4.200 millones a través de las licitaciones semanales. En las dos siguientes sacó otros $ 4.000 millones, pero los números oficiales aún no están disponibles.
A pesar de la esterilización, en esas mismas dos semanas el efecto de los títulos del BCRA fue expansivo en $ 7.200 millones. Esto se dio porque, por fuera de las licitaciones, la entidad salió a recomprar parte de las Lebac que había colocado. Es decir, volvió a inyectar los mismos pesos que había aspirado.
Notamos una expansión que podría llegar a $ 12.000 millones que no se condice con el resultado de las licitaciones, comentó Francisco Gismondi, de la consultora Empiria. Es financiamiento público, no sabíamos que fuera a provincias, pero dada la magnitud de la cifra debe haber ido a algún distrito grande, dijo.
Según afirmaron fuentes de la autoridad monetaria, lo que hizo el BCRA fue comprar Lebac en manos del Banco Nación (BNA). El dinero que transfirió por esas compras será utilizado por el BNA para fondear a provincias, aunque no hay información oficial sobre el destino. El banco es agente financiero de Mendoza y Catamarca, y puede prestar al resto de los distritos como si fuese un privado. La Carta Orgánica le prohíbe al BCRA financiar en forma directa a las provincias.
La reversión ayudó a que la base monetaria creciera $ 12.500 millones en sólo dos semanas de marzo. Esa expansión en parte es resultado de las recompras, que implicaron una emisión de no menos de $ 8.751 millones y hasta $ 11.551 millones.
La imprecisión se da porque los datos del 12 de marzo del propio BCRA muestran una contracción monetaria de $ 2.000 millones resultado de una colocación de letras que, el día previo, había aspirado más del doble : $ 4.800 millones. Si la diferencia en las cifras se explica por estas recompras, el calculo correcto sería el de máxima.
El BNA puede fondear a las provincias mucho más barato que el 34% que están pagando cuando emiten dollar linked al mercado, analizó Nadín Argañaraz, del Instituto Argentino de Análisis Fiscal.
Si es para provincias es más preocupante que si es para el Tesoro, dijo Juan Manuel Pazos, economista del Estudio Broda. Porque suma más emisión que no estaba calculada y porque compromete al instrumento de regulación monetaria, las Lebac, que tan bien se estaba usando, agregó.