La empresa alemana Wintershall comenzará a perforar en agosto en Vaca Muerta en el área Aguada Federal, donde se asoció con la provincial Gas y Petróleo del Neuquén (GyP).

Según informaron desde la compañía neuquina a este diario, Wintershall, que opera el bloque desde enero, iniciará en la segunda mitad del año dos pozos exploratorios en los que pondrá a prueba su tecnología para evaluar el potencial de Vaca Muerta. Según el convenio firmado entre ambas petroleras, la etapa de exploración contempla seis perforaciones –dos verticales y cuatro horizontales– que demandarán una inversión de unos 110 millones de dólares.

A su vez, para junio de 2015 está previsto que comience la etapa del programa piloto que tendrá 20 perforaciones horizontales y llevará unos cuatro años.

En Aguada Federal hay un pozo que llegó al shale de Vaca Muerta y que fue realizado por GyP. Desde la empresa informaron que “se encuentra en etapa de ensayo extendido ininterrumpido desde el momento de su fractura, con resultados óptimos”.
Wintershall ya pagó a la empresa neuquina los 30 millones de dólares comprometidos en concepto de ingreso al área.
 
Otros planes

Este será un año intenso para la empresa provincial. En los próximos meses espera completar el Gasoducto Aguada del Chañar-Loma la Lata, que permitirá la puesta en producción de los pozos de gas. En una primera etapa, la UTE entre GyP y Enarsa podrá despachar alrededor de un millón de metros cúbicos diarios.

Además, el plan de desarrollo del lote para este año prevé la perforación de 3 pozos de avanzada, los cuales supeditarán la perforación de los siguientes 3 pozos de desarrollo en el yacimiento Loma Colorada, cuyo objetivo primario será producir y delimitar los reservorios gasíferos de la Formación Lotena.

Esos trabajos demandarán inversiones por 80 millones de dólares, las cuales serán financiadas por Enarsa hasta el momento de inyección de gas, y por el propio flujo de fondos del proyecto a partir de ese momento.

Por otro lado, en el bloque Aguada Cánepa este año se estudiará la factibilidad de realizar un primer pozo para explorar las formaciones Sierras Blancas y Lotena, las cuales resultaron productivas de petróleo y gas en el área vecina Aguada del Chañar.