“No hubo vencedores ni vencidos”. Con esa frase que entre otras reminiscencias tiene las rockeras de Los redonditos de Ricota, el ministro de Economía, Axel Kicillof, buscó dejarles en claro a los senadores que en el acuerdo para indemnizar a Repsol por la expropiación del 51% de las acciones de YPF no hubo concesiones.

Además Kicillof aseguró que si bien el acuerdo con Repsol significó un costo de 5.000 millones de dólares, por tener ahora el control de YPF el Estado argentino "ya se ahorró 1.200 millones de dólares por la importación de gas, que ahora produce YPF".

En cuanto a la estructura financiera del acuerdo, dijo que “(a YPF) la estamos pagando en cuotas. Y no en 6 ni 12, sino hasta el año 2033”, apuntando así a las críticas que recibió el acuerdo por parte de la oposición por el hecho de que los entre u$s 5.000 millones y u$s 6.000 millones que la Argentina le dará a Repsol en títulos públicos implicarán pagos por más de u$s 10.000 millones a lo largo del tiempo (sumando capital de deuda más intereses). “A los que vienen les van a quedar cuotas, intereses y amortizaciones a pagar. Pero también una empresa que es fehacientemente del Estado”, agregó.

Kicillof expuso ante un plenario de comisiones de la Cámara alta antes de que el kirchnerismo le dé dictamen al acuerdo con Repsol para que el mismo reciba la media sanción del Senado. Así como la expropiación del 51% de las acciones que tenía Repsol fue aprobada por ley, el arreglo por el pago a la española también necesita el visto bueno del Congreso. Al menos en principio, el kirchnerismo no corre ningún riesgo de un revés legislativo.

Antes que el ministro expuso el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, cuya exposición fue dominada por las lágrimas que derramó al contar la historia de un trabajador de YPF. A diferencia de lo que luego expondría Kicillof, para Zannini fue Repsol la que cedió al aceptar la oferta del Gobierno argentino.

Entre otras cosas, el secretario de Legal y Técnica reconoció que las negociaciones comenzaron a fines de 2012 en forma confidencial, que la Argentina le ofreció a Repsol la exploración conjunta en Vaca Muerta pero los españoles "bombardearon" esa posibilidad y que, en esos diálogos, los españoles “nunca” creyeron en la posibilidad de un pago en efectivo.

Zannini también se defendió de la acusación de haber negociado el acuerdo con Repsol sin que se hiciera pública la valuación de YPF por parte del Tribunal de Tasaciones. Según sostuvo, el Gobierno no quería atarse a dejar depositado ese dinero (algo a lo que habría estado obligado por la expropiación) mientras negociaba con Repsol.

El secretario de Legal y Técnica de Presidencia, Carlos Zannini , defendió hoy el acuerdo con la petrolera española Repsol por la expropiación de las acciones de YPF y se puso a llorar en el Senado. "Es un acuerdo equilibrado que habrá que cumplir. Hemos pagado un precio justo", dijo.

Zannini expuso en un plenario de las comisiones de Minería, Energía y Combustibles y de Presupuesto y Hacienda de la Cámara alta , junto al ministro de Economía, Axel Kicillof , y al presidente del directorio de YPF, Miguel Galuccio .

Los tres funcionarios se presentan en el Senado para defender el pago de US$ 5000 millones en bonos a Repsol. Con ellos está el presidente del Tribunal de Tasación, Galdino Cattáneo.

Zannini fue el primero en hablar. Aseguró que el precio acordado "está muy por debajo" de las "pretenciones iniciales" de Repsol. "Desde el comienzo supimos que teníamos que pagar", deslizó.

También habló de la forma de pago. "Creo que llevó más tiempo discutir sobre los medios de pago que sobre el precio", sostuvo.

"Es un acuerdo equilibrado que habrá que cumplir", dijo. Poco después, recordó a Néstor Kirchner, al delegado petrolero Jorge Solohaga y a trabajadores santacruceños que defendieron a YPF. "Es un acto de justicia para todos los que sufrieron en carne propia lo que es desnacionalizar el petróleo en la Argentina", afirmó, entre lágrimas.

INVITADOS

Para que no quedaran dudas del interés que tiene el Poder Ejecutivo de evitar contratiempos en el debate, tratamiento y aprobación, a la reunión de hoy fueron invitados dos senadores del Movimiento Popular Neuquino, Guillermo Pereyra y Lucila Crexel.

La presencia de Pereyra es fundamental para el oficialismo: el neuquino es el secretario general del gremio de los petroleros privados, tiene una excelente relación con Galuccio y es el presidente de la comisión de Minería, Energía y Combustible.

Anteayer, con la intención de no dejar ningún cabo suelto ante la necesidad de alcanzar la ratificación parlamentaria del acuerdo económico con Repsol antes del 1° de mayo, el Poder Ejecutivo bajó toda su artillería al bloque oficialista .

Kicillof, Zannini y Galuccio visitaron el martes el bloque kirchnerista y brindaron un pormenorizado detalle sobre el acuerdo con la petrolera española.

El ministro de Economía, Axel Kicillof, informó hoy que desde la expropiación de YPF "el Estado se ahorró 1200 millones de dólares en importación de combustible" debido al alza de producción de la empresa. Así lo informó durante el informe al Senado de la Nación sobre el acuerdo de pago de Repsol por la expropiación de sus acciones.

Kicillof también dijo que también "ya nos ahorramos 2000 millones en dividendos no distribuídos, como lo hubiera hecho la gestión anterior" y "la valorización del capital de la empresa creció en 1691 millones de dólares" desde el momento de la expropiación.

"Repsol desistió de 31 acciones. Terminamos esta operación con un moño y un final feliz", concluyó el funcionario durante su exposición ante los senadores.

El ministro también resaltó que "ambas partes se pusieron de acuerdo" y que "el precio que se pagó estaba de acuerdo con lo que ofrecía el Ejecutivo y también fue aceptado por quien fue víctima de la expropiación".

"La empresa reclamaba en el CIADI 10.500 millones de dólares", dijo Kicillof, que remarcó que Argentina pagó sólo 5 mil millones.

"YPF es la empresa más grande del país, según su facturación. Raro sería que el 51% la empresa más grande del país no saliera 5000 millones", señaló

Ante un plenario de comisiones del Senado, Zannini recalcó que el entendimiento no implica "tener ningún exitismo ni nada que pueda agredir a la contraparte" y afirmó que la contraparte "lo aprobará el 28 de marzo del corriente año si están de acuerdo los accionistas".

"Este acuerdo satisface a ambas partes", afirmó el funcionario al exponer este mediodía ante los senadores que se reunieron en el salón Azul de la Cámara alta, donde también se prevén las palabras del ministro de Economía, Axel Kicillof.

Zannini destacó que el Gobierno ha "tenido éxito en lograr que el expropiado, en un proceso conciliatorio, se avino a convalidar no sólo el precio de la expropiación sino también los medios de pago a utilizar" y consideró que "esto no es una cuestión menor".

"Este acuerdo sigue respetando aquel alto estándar impuesto por el Congreso a iniciativa de la Presidenta de la Nación, es equilibrado y hemos llegado a un punto que se cumple con los estándares y crea oportunidades para la Argentina", precisó.

Zannini expresó que este proceso "no es sólo una expropiación sino una culminación de un proceso de conversaciones amistosas" aunque admitió que fue "un camino difícil".

El funcionario admitió que "no es fácil" el proceso de expropiación de acciones y reconoció que "esto hace surgir una serie de dudas respecto de cuáles son los procedimientos".

Sin embargo, insistió con que "al fijar ese estándar alto de expropiar acciones y no el total de la compañía" se demostraba que el Gobierno se proponía "sostener la actividad de esta empresa en el marco privado para que continúe siendo una sociedad anónima con cotización en bolsa, además de estar conducida por manos argentinas".

Para el secretario, con este entendimineto "Repsol cede" y el Poder Ejecutivo "paga un precio" y consideró que esto no significa el "cierre de la cuestión YPF" sino el comienzo de "una nueva historia de la compañía".

Precisó que el medio de pago de bonos que va a emitir el Poder Ejecutivo "tiene varias dificultades emergentes" ya que "una parte está compuesta por un bono que no tiene circulación, que hay que crear, y otra parte en bonos que sí existen".

Especificó que "el monto a pagar será de 5.000 millones de dólares pagaderos en bonos de la República y señaló que Repsol se vio obligado a aceptarlos".

Aclaró que "como no son 5000 millones en efectivo hubo que establecer un valor mínimo de mercado, cifra que está fijada en 4.670 millones de dólares".

"Eso obligó -acotó- a que la suma nominal emitida en bonos tenga que crecer ya que nuestros bonos emitidos no podrán superar en su cara los 6.000 millones de dólares".

"Como esto es superior a lo que hemos fijado como precio hemos puesto en el convenio un límite para Repsol: van a cobrar de esos bonos hasta que lleguen a la suma de 5.000 millones de dólares", remarcó.

Agradeció la predisposición de accionistas y de los gobiernos de España y México sin los cuales -dijo- "no podríamos haber llegado a este convenio".

En el final de su exposición, Zannini se emocionó al recordar lo que representa YPF para su provincia, Santa Cruz, y al mencionar a un sindicalista de YPF, Jorge Soloaga, que pugnó a lo largo de toda su trayectoria por mejorar la actividad de la compañía y llegó en 2013 al directorio de la firma como representante del sector gremial.

El secretario de Legal y Técnica de la Presidencia de la Nación, Carlos Zannini, se emocionó hoy al defender el acuerdo de YPF con Repsol.

El funcionario sostuvo hoy que el acuerdo por la expropiación de su mayoría accionaria en YPF es "equilibrado" y respeta "el alto estándar" marcado por la ley que aprobó el Congreso.

Al exponer en la Cámara alta, Zannini dijo que "las dificultades del acuerdo" no estaban sólo en el alto estándar que el Congreso había puesto", sino en cumplir con la ley de expropiaciones argentina, que indica que deben pagarse en efecto, tras lo cual remarcó que se hizo con "éxito".

El funcionario destacó que para llegar a un consenso se debe conseguir "que satisfaga a ambas partes y creo que se ha logrado" hacerlo, a la vez que indicó que el precio acordado de parte de Repsol "está muy por debajo de sus expectativas iniciales".

Lágrimas. Zannini habló de la indemnización que le corresponde a los ex obreros por la propiedad participada y recordó una anécdota de uno de ellos.

"De ese conjunto de trabajadores quiero rescatar a uno, uno que tenía responsabilidades sindicales en su momento, era alguien del SUPE en Santa Cruz y que hoy tiene dos cargos importantes en la Argentina.

"(Jorge) "El negro" Soloaga se quedó con las acciones, las mantuvo, iba a las asambleas, hacía oír su voz...; fue a la asamblea que se hizo después de la expropiación y habló. En su momento, con sus ahorros, compró acciones y el sindicato lo designó ahora para representar a los trabajadores en el directorio de YPF", recordó muy emocionado.

Luego de interrumpir en dos oportunidades su discurso para tomar agua, aseguró que la ley de expropiación de la petrolera "es un acto de justicia para todos aquellos que sufrieron en carne propia lo que es desnacionalizar el petróleo; Argentina debe continuar ejerciendo su derecho en un bien como es su reserva de hidrocarburos".

El ministro de Economía, Axel Kicillof, ha asegurado este jueves que desde la expropiación de YPF "el Estado se ha ahorrado 1.200 millones de dólares (unos 866 millones de euros) en importación de combustible" debido al alza de producción de la empresa, y ha insistido en que en la negociación con Repsol "no hubo vencedores ni vencidos". YPF dice que el acuerdo con Repsol es "muy positivo".

Durante el informe al Senado sobre el acuerdo de pago de Repsol por la expropiación de sus acciones, el ministro ha añadido que "la valorización del capital de la empresa creció en 1691 millones de dólares" en este último periodo y, por lo tanto, ha afirmado que la operación con Repsol "terminó con un moño y un final feliz".

El funcionario ha insistido en que ambas partes se pusieron de acuerdo y que el precio que se pagó "estaba de acuerdo con lo que ofrecía el Ejecutivo y también fue aceptado por quien fue víctima de la expropiación", tal y como ha informado el diario argentino La Nación.

"La empresa reclamaba 10.500 millones de dólares", ha señalado Kicillof, antes de recordar que Argentina pagó "sólo 5.000 millones", una cantidad que, según ha añadido, será fácil de recuperar. "YPF es la empresa más grande del país, según su facturación. Raro sería que del 51 por ciento de la empresa más grande del país no salieran 5.000 millones", ha sentenciado.

En este sentido, ha insistido en que fue un trato "amigable y amistoso" y ha explicado que se pagará "en cuotas". "Creo que hemos llegado a un escenario tremendamente más favorable, tremendamente más beneficioso por donde se lo mire", ha concluido.

Acuerdo con Repsol

El consejo de administración de Repsol aprobó por unanimidad un acuerdo con el Gobierno argentino sobre la compensación por la expropiación hace dos años de un 51 por ciento de YPF, en el que se le indemniza con 5.000 millones de dólares en bonos del Estado austral y en el que se incluyen varias garantías para su cobro.

El acuerdo incluye el desistimiento recíproco de las acciones judiciales y arbitrales interpuestas, así como la renuncia a nuevas reclamaciones. El desistimiento se materializará en la firma de otro acuerdo entre Repsol, por un lado, e YPF e YPF Gas, por otro.

La principal garantía consiste en el reconocimiento por parte de Argentina de una deuda pública por valor de 5.000 millones de dólares que no quedará extinguida hasta que Repsol haya recibido enteramente la compensación.

Los títulos de deuda pública que se entregarán a Repsol estarán articulados en torno a dos paquetes, uno fijo, con un valor nominal de 5.000 millones de dólares, y otro complementario, por importe máximo de 1.000 millones de dólares.

La entrega del paquete complementario se realizará en caso de que el valor de mercado de los bonos entregados a Repsol se sitúe por debajo de 4.670 millones de dólares. Su entrega se producirá en la cantidad suficiente para alcanzar este suelo mínimo.

Este valor de mercado se calculará tomando como referencia las cotizaciones recibidas de distintas entidades financieras internacionales, explica Repsol en una nota remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).