La petrolera canadiense Pacific Rubiales reportó ganancias para el cuarto trimestre del 2013, frente a las pérdidas en el mismo período del año anterior, por mayores ventas de crudo y gas, pero su utilidad en todo el año disminuyó ante un mayor pago de impuestos, informó el jueves la compañía.
Las acciones de la petrolera, que tiene sus principales operaciones en Colombia, subían un 7,74 por ciento a 17,54 dólares canadienses en la Bolsa de Toronto y un 7,58 por ciento a 32.340 pesos en Bogotá.
Pacific Rubiales reportó un beneficio neto de 143 millones de dólares entre octubre y diciembre pasado, que contrasta con una pérdida de 23,8 millones de dólares en los últimos tres meses de 2012.
Un aumento de las ventas de crudo y gas de un 14,9 por ciento a 1.202,6 millones de dólares apoyó el resultado trimestral.
El EBITDA (utilidad antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) subió un 52,5 por ciento a 655,3 millones de dólares, en comparación con el cuarto trimestre de 2012.
Pacific Rubiales es el mayor productor privado de crudo en Colombia y además opera en Brasil, Perú, Guatemala y Nueva Guinea.
Pese al buen desempeño del último trimestre, la ganancia neta de la compañía bajó un 18,4 por ciento a 430,4 millones de dólares en todo 2013, en comparación con el año previo.
Pacific atribuyó la disminución en la utilidad anual a un mayor gasto en impuesto sobre la renta, que alcanzó 504.976 millones de dólares, un 74,2 por ciento más que el generado en el 2012.
Las ventas de petróleo y gas para todo el 2013 subieron un 19,1 por ciento a 4.626,9 millones de dólares, al tiempo que el EBITDA repuntó un 27 por ciento a 2.567 millones de dólares.
En el 2013 Pacific Rubiales perforó 34 pozos exploratorios, que resultaron en 23 descubrimientos, alcanzando una tasa anual de éxito exploratorio del 68 por ciento.
La producción total de la empresa el año pasado se incrementó en un 26 por ciento a 311.177 barriles de petróleo equivalente por día (bped) en comparación con el 2012.
(Reporte de Nelson Bocanegra; Editado por Javier López de Lérida)