Poliducto de líquidos podrá ser incluido en el proyecto, pero su financiamiento y riesgo correrá a cargo del productor privado. Se fijará una fecha límite para ejercer la opción de construir dicho tubo para líquidos.
ENTREVISTA
Eleodoro Mayorga Alba, ministro de Energía y Minas.
LUIS HIDALGO SUÁREZ
lhidalgos@diariogestion.com.pe
Como nuevo ministro de Energía y Minas, ¿qué objetivos persigue?
El sector es clave para los resultados económicos del país. Por ello, nuestro propósito es asegurar que los proyectos mineros se ejecuten y sigan adelante. Y eso es lo que se está haciendo, tenemos proyectos ejecutándose y vamos a crecer en los productos mineros, en cobre, en particular. La energía también es esencial, tenemos que seguir asegurando nuestro abastecimiento energético que soporte el crecimiento económico.
¿Y qué proyectos impulsarán?
En general todos. Al llegar encontramos proyectos importantes que se han venido trabajando y que se necesitan con urgencia. Y el primer esfuerzo que estamos haciendo aquí es enfocarnos en concluir el gasoducto sur peruano (GSP), hacer todo el esfuerzo para darle la buena pro a una empresa calificada que se encargue de su construcción.
Está también la modernización de la refinería de Talara (MRF), y el esfuerzo por relanzar las inversiones porque hay un retraso importante en las de exploración y producción de petróleo y gas. Otro objetivo es redoblar los esfuerzos para la inclusión social (llevar energía a los más pobres).
Y existe la decisión política para ello…
Acá no hay un cambio de política, estamos trabajando bajo los mismos principios. Diría que este es un sector en el cual la política tiene poco que hacer, que necesita entregar sus productos sea cual sea la bandera política.
Por eso, algo que queremos, por lo menos iniciar, es un sistema de planeamiento energético. Necesitamos tener, en consenso con los sectores importantes y diferentes grupos sociales y con las regiones, un plan que sirva de guía hacia dónde queremos caminar. Vamos a hacer esto en los siguientes meses.
En el tema del gasoducto sur (GSP), usted ha aceptado que puede haber un cambio en el diseño e incluirse un poliducto desde Anta hasta la costa sur (Ilo). ¿Es cierto que algunos concesionarios que se están formando quieren que se aplique la red de garantía principal a este poliducto?
No. El gas nos interesa como país para generar electricidad y, en consecuencia, el proyecto incorpora, como uno de sus atractivos, que el Estado va a hacer un esfuerzo para ayudar a que se construya una línea (gasoducto) de gas.
Obviamente, los productores están interesados en contar con una línea (poliducto) de líquidos. Y entre los privados estáCNPC (China National Petroleum Company), que compró el lote 58, y la participación de Petrobras en el lote 57. Ellos, como todo productor, quieren que esos campos produzcan al máximo, y van a generar volúmenes de líquidos (de gas). El problema hoy es que no tenemos una definición exacta de este volumen y no podemos retrasar el GSP. Por ello, estamos dejando una opción para que, en el momento en el que el productor esté dispuesto a comprometerse a construir esta línea de líquidos, aquel que ha ganado la concesión (delGSP) lo haga al mismo tiempo que la construcción de la línea de gas.
¿Pero (ese poliducto) gozará de garantía de red principal?
No, no. El productor tendrá que financiar a su costo y riesgo esta línea de líquidos.
Por lo que nos dice, entonces no se prevé un nuevo retraso en el proceso de licitación del GSP…
No. Se tiene que fijar en las bases de la licitación (del GSP) hasta cuando los productores pueden ejercer esa opción.
Ese límite se fijará entonces desde el inicio.
En (el proceso de licitación del GSP), en el momento en el que concluya el proceso de preguntas y antes de que se presenten las ofertas, se va a tener que precisar hasta cuándo los productores pueden ejercer esta opción, lo cual estará establecido en el contrato.
Otro tema que levantó polémica fue el costo del GSP. Al inicio se hablaba de unos US$ 2,400 millones, y ahora se dice que la inversión superará los US$ 4,000 millones. ¿Por qué?
En el proyecto se han ido adicionando cosas. Por otro lado, los dos ductos (gasoducto y poliducto) del proyecto de Camisea costaron US$ 1,500 millones en dólares de hace 10 a 12 años; la distancia del GSP en la sierra es mayor y, por lo tanto, los costos son mayores, han ido subiendo.
Además, se trata de una estimación, la cifra (definitiva) la vamos a tener cuando abramos los sobres. Lo que esperamos es que sea de ese orden, de US$ 4,000 millones, pero serán los propios constructores quienes pongan la ruta definitiva, los materiales, las compras, etc., por lo que cifra final se sabrá al momento de la oferta del postor.
¿Cuántos consorcios ya se han conformado para participar en la licitación del GSP? Se supo que uno sería entre CNPC y Odebrecht.
CNPC tiene otra empresa que construye ductos y es esta la que aparentemente se estaría consorciando con Odebrecht. Hubo 13 empresas que compraron las bases del concurso y se espera que al menos haya dos o tres consorcios.
Entonces, esperan un éxito en la licitación del GSP…
Por lo menos mantenemos contacto con estas empresas y cotidianamente buscamos atender sus preocupaciones y que, sobre todo, se mantenga un tratamiento igual para todos. Nos interesa que el proceso sea lo más competitivo posible, que las empresas apuesten en igualdad de condiciones.
Medio ambiente
Uno de los obstáculos para impulsar las inversiones en su sector son los temas ambientales. Usted anunció la posibilidad de eliminar los EIA para la sísmica en los procesos de exploración, lo cual no fue bien recibido por todos. ¿Qué opinión tiene?
Creo que se ha hecho una mala interpretación en el sentido de que la operación de la industria en cada una de sus fases está normada (no se puede entrar a ciertas áreas, o hacerlo con precaución, etc.), las cuales de todas maneras se aplican con o sin estudio de impacto ambiental (EIA).
El EIA merece ser hecho si se está ingresando (a explorar) a una zona que no se conoce o en una que es particularmente frágil, pero hacer EIA en la zona de Talara para hacer sísmica no, y es allí donde ha surgido la controversia.
Si le entiendo, hay casos en los que amerita el EIA pero hay otros en los que no…
Así es. Le pongo el caso de la Agencia Nacional de Hidrocarburos de Colombia, la cual afirma (en una publicidad) que la exploración sísmica es una actividad de poco impacto al medio ambiente, es decir, que no causa un deterioro grave a los recursos naturales y al ambiente y, que, por lo tanto, no requiere licencia ambiental.
¿Acepta que hubo cierto apresuramiento en anunciar la posibilidad de eliminar esos EIA en los casos de sísmica en exploración petrolera; que no hubo coordinación (el ministro del Ambiente salió un poco a desmentir el anuncio)?
Entiendo que el ministro del Ambiente sea celoso de mantener la autoridad ambiental, sus responsabilidades al respecto, pero hemos venido trabajando juntos en los grupos que lo han hecho después de mucho tiempo, en los cuales se ha hecho este tipo de análisis comparados. Lo que tenemos hoy como normatividad válida es que toda actividad petrolera tiene que tener un EIA. La experiencia enseña que hacer EIA simplemente retrasa, y eso es lo que estamos sufriendo nosotros hoy.
Claro, y cuando el objetivo es acelerar la inversiones retrasadas es lógico que se mire el tema de los EIA…
Ya estábamos convencidos hace tiempo que esa reglamentación existente había que cambiarla.
¿Usted considera que finalmente se pondrá de acuerdo con el ministro del Ambiente y seguirá adelante esta propuesta (de eliminar los EIA para sísmica en exploración petrolera)?
Yo creo que sí.
Usted dijo que habían conversado…
Para yo salir a anunciar obviamente que habíamos conversado en las reuniones de trabajo. Ahora, que debía anunciarse todo junto como un paquete, estoy de acuerdo; que deberíamos haber llegado a la presentación del Libro Blanco (de la Sociedad Nacional de Hidrocarburos) con un reglamento perfectamente evaluado y concordado; hubiera sido ideal decirle a industria que esto venía, que estaba en trabajo.
Reconozco todo eso, pero lo que es de fondo es si vale la pena mantener el reglamento tal cual cuando en países con los que competimos por las inversiones, como Colombia, ya han superado esa etapa.
También se dice que no era el mejor momento para anunciar porque justo este año el Perú será sede de la conferencia mundial del cambio climático…
Son dos cosas completamente distintas, querer poner el tema de la exploración sísmica al nivel de discusión de problemas de cambio climático a nivel del planeta (no es dable). Los que leen este tipo de cosas (comparaciones) quizá pueden pensar que hay oposición malintencionada.
HOJA DE VIDA
Profesión: Ingeniero con especialidad en Petróleo (por la U. Nacional de Ingeniería).
Post Grado: Maestría en petroquímica (U. Católica Lovaina, Bélgica); doctorado en Matemáticas Aplicadas a la Economía en la Universidad de París X.
Cargos: Director del proyecto del gas de Camisea en sus primeros años; entre 1991 y 2009 ocupo diversos cargos en el Banco Mundial en el área de energía.
Desde el 2011, es socio de la firma Laub & Quijandría Consultores y Abogados.
“La mayoría de tareas ambientales del MEM ya pasó a Ambiente”
La mayoría de tareas en el campo ambiental que se encontraban en el sector Energía y Minas (MEM) ya pasó al ministerio del Ambiente. “Creo que la mayoría de aspectos, que deben hacerse a nivel nacional y en lo que corresponde a la coordinación, ya ha pasado”, precisó el ministro Mayorga.
Sostuvo estar completamente de acuerdo en los temas ambientales complejos, en los cuales no solo se trata de hacer un pozo sino que incluyen varias actividades económicas, el desarrollo de infraestructuras permanentes, tiene que ser coordinado por una sola entidad. “Es obvio que eso se tiene que manejar desde el ministerio del Ambiente, pero aquellas operaciones como sísmica (de exploración petrolera) no creo que tengamos que pedir licencia”, precisó.
Destacó que en los últimos dos años en el Perú se han creado instituciones ambientales. También se ha abierto el tema de la licencia social a través de la Consulta Previa, la participación ciudadana.
Por otro lado, con la descentralización, los gobiernos regionales y locales tienen funciones ambientales y son celosos en dar sus
autorizaciones. “Para un inversionista que llega y tiene que caminar toda esto, encuentra que hay una pérdida grande tiempo. Lo que tenemos que hacer es hacer que estas instancias coordinen y hagan su trabajo mejor. Esto va a tomar su tiempo”, dijo al tiempo de manifestar su confianza en que se agilizarán los trámites ambientales y la inversión fluirá. Impulsar las inversiones en el sector es uno de los objetivos principales.