El anticipo en exclusivo de ayer del diario El Comercial y Radio Uno sobre la ubicación de la planta procesadora de uranio Dioxitek que se radicará en Formosa, a 16 kilómetros de la ciudad Capital, fue confirmado ayer por el gobierno provincial mediante un comunicado de prensa que no atribuye la explicación a alguna área de gobierno, manteniendo en la duda quien es la persona encargada de llevar adelante el polémico proyecto.
Mediante el parte de prensa oficial, ningún funcionario de la provincia se hizo cargo públicamente sobre la llegada de la cuestionada planta de procesamiento de uranio Dioxitek, pero confirmaron que la planta se hará en Formosa aún cuando no tienen realizada la audiencia pública sobre el impacto ambiental del emprendimiento y aseguran de manera anónima que el emprendimiento es “seguro”.
Desde el gobierno expresaron públicamente que la idea “era presentarlo en sociedad en vísperas de la realización de la audiencia pública”, hecho que cambió al tomar estado público los datos técnicos que ayer expuso este medio y su par paraguayo ABC Color. Según el gobierno, “se consideró necesario adelantar menciones globales del emprendimiento ante la confusión que genera la desinformación derivada de copiosas referencias al tema con data absolutamente inexacta”.
“Generará empleo”
Con la noticia confirmada, el gobierno salió al ruedo y destacó los posibles beneficios de la concreción del proyecto. “Dioxitek demandará una significativa inversión, que generará más de un millar de puestos de trabajo, que es estratégico, el más moderno de Sudamérica y el único con sus características de la Argentina ya que solamente Brasil encara emprendimientos de este tipo”.
“Para la etapa de construcción se utilizarán 750 operarios, 400 como mano de obra directa y 350 indirecta y 200 para la etapa ya en operación en forma directa y 250 en forma indirecta, es decir 1.200 personas en total”, se hace referencia en el mencionado parte de prensa.
Sobre los preparativos de este proyecto, la información que dispone el gobierno local es que están en etapa de elaboración el máster del plan ambiental para ser presentado aquí para su consideración y posterior tratamiento en el marco de la audiencia pública de aprobación que exige la legislación vigente en la materia y el proyecto de ingeniería, casi terminado.
Se desprende de la situación que ya se está trabajando en la etapa final del proyecto de ingeniería y el máster del plan ambiental para presentar a las autoridades locales en el marco del interés de instalar una planta en Formosa cuyo funcionamiento formará parte del Polo Científico y Tecnológico.
El anticipo
Conjuntamente con la publicación ayer de El Comercial y Radio Uno sobre la confirmación del proyecto que estaba guardado bajo 7 llaves por el gobierno de Insfrán, uno de los medios más prestigiosos de Paraguay, ABC Color, precisó que “un informe oficial del Ministerio de Planificación Federal de Argentina a la Embajada de Paraguay en Buenos Aires, remitido a la Cancillería, asegura la ubicación de Dioxitek aunque el reporte argentino no precisa cuándo se iniciará la obra”.
El documento oficial del gobierno argentino que se publicó ayer especifica que “la Organización Internacional De Energía Atómica (OIEA) establece que los Estados Contratantes tendrán que consultar con los Estados Vecinos en el caso de una Instalación con Riesgo Nuclear y Alto Riesgo en Seguridad Radiológica como una Central Nuclear, un Reactor de Investigación o Plantas de Irradiación.
La Planta de Dioxitek S.A. a instalar en Formosa califica para la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) califica como una Instalación de Conversión de Uranio que involucra procesos que no reviste riesgo nuclear algunos. La actividad a desarrollar por la Planta Dioxitek S.A. en Formosa a 16 kilómetros de la Capital será propia de la Industria puramente Química”.
Según el escueto informe del Gobierno argentino hacia su par paraguayo, la planta “no producirá residuos líquidos ni gaseosos”. Sin embargo, técnicos consultados explicaron que Dioxitek es una planta de conversión química que procesa mineral de uranio y lo convierte en dióxido de uranio.
El mismo documento establece que la planta “se emplazará en un terreno de 1.000.000 de m2, con una parte cubierta de 17.000 m2, otra descubierta de 3.000 m2, quedando un espacio libre de 775.000 m2 y además de un espacio arbolado y parquizado de 110.000 m2.
“No hay nada que temer”
En su comunicado de prensa, el gobierno de Insfrán reveló que la Organización Internacional de Energía Atómica establece que los estados contratantes deben consultar con los estados vecinos en el caso de una instalación con riesgo nuclear y alto riesgo en seguridad radiológica, como una central nuclear, un reactor de investigación o plantas de irradiación.
De allí que insistiese que la planta de Dioxitek S.A a radicarse en Formosa califica como una instalación de conversión de uranio que involucra procesos que no revisten ningún riesgo nuclear.