El presidente ruso cree que en Ucrania ha habido un golpe de Estado armado y que Yanukóvich es aún el presidente legítimo
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha comparecido ante la prensa y ha asegurado que "no queremos ir a la guerra con Ucrania". Putin considera además que el uso de la fuerza debe ser el último recurso. "No vamos a emplear la fuerza, pero tampoco es algo que descartamos", indicó para después detallar que una intervención estaría justificada en el caso de que la situación se desborde en las regiones del este de Ucrania, habitadas por rusohablantes, como ocurrió en Kiev.
En su comparecencia, el presidente consideró que la salida del presidente ucranio fruto de las revueltas populares fue "un golpe de Estado anticonstitucional". "El único presidente legítimo es Yanukóvich", dijo Putin, para después añadir, que de haberse quedado en Ucrania,Yanukóvich "habría muerto asesinado".
El presidente ruso aseguró que Rusia "no va a provocar movimientos separatistas" en Crimea y que no contempla la anexión de la república autónoma ucrania. Negó además que tropas rusas hubieran tomado el control de Crimea en los últimos días y aseguró que se trata sin embargo de tropas "locales de autodefensa". Agregó que de celebrarse elecciones en Ucrania en las actuales condiciones de "terror", Rusia no reconocería los resultados.
Putin ha ordenado retornar a sus cuarteles a las tropas que participaron en los ejercicios militares en el oeste de Rusia que comenzaron el pasado sábado, con un anuncio que podría interpretarse como un intento de bajar la atención en la crisis ucrania. El portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, ha declarado que el jefe del Estado impartió la orden después de recibir el parte del mando militar del término exitoso de las maniobras. El repliegue no afecta sin embargo a los uniformados rusos en la península de Crimea.
Mientras tanto, tres unidades de misiles antiaéreos de las Fuerzas Armadas de Ucrania se han puesto a las órdenes de Crimea, ha anunciado este martes un portavoz de las autoridades prorrusas de la región ucrania. "Más de 700 soldados y oficiales han declarado que están dispuestas a defender a la población de Crimea", ha dicho un portavoz del Gobierno de la república autónoma, del que Kiev no reconoce la legitimidad, a la agencia oficial rusa RIA-Nóvosti. El portavoz ha especificado que se trata de efectivos de los regimientos de misiles antiaéreos 50, 55 y 147, que se encuentran emplazados en las ciudades de Eupatoria, Feodosia y Fiolente, respectivamente.
El Gobierno de Kiev ha negado sin embargo que se estén produciendo deserciones en la república autónoma de Crimea y ha calificado de "provocaciones" las informaciones que en ese sentido difunden las autoridades prorrusas.
En ámbito financiero, a lo largo de la mañana del martes los mercados rusos han vuelto a estabilizarse tras las fuertes caídas del lunes, cuando la bolsa de Moscú se desplomó un 10,8%, lo que implicó perdidas por 60 billones de dólares (alrededor de 44 billones de euros) de capitales de las empresas rusas. El índice ruso ha vuelto a subir más de un 4% este martes.
La intervención militar del Kremlin en Crimea fue el origen del desplome tanto del selectivo como de los mercados de los bonos y del rublo (la moneda rusa). No obstante, las tropas de Moscú siguen en la península —cuya mayoría de la población es de etnia rusa— de la que tomaron el control después de que Putin recibiera el pasado sábado el apoyo por unanimidad del Senado para el uso del Ejército en la región. El presidente ruso había declarado este fin de semana que su país tiene derecho a invadir Ucrania para proteger a los ciudadanos y a los intereses rusos tras las manifestaciones populares que culminaron con el derrocamiento del presidente Víctor Yanukóvich el pasado mes de febrero.
Varios analistas subrayan los temores de Putin con respecto a los intentos de los nuevos líderes de Ucrania, una de las cunas de la civilización rusa, de aproximarse a la Unión Europea y alejarse de la influencia de Moscú.