La creciente amenaza de guerra entre Ucrania y Rusia asustaba a los mercados y llevaba a los inversores a buscar seguridad el lunes, derrumbando a las bolsas e impulsando al oro a máximos de cuatro meses. El oro sube 1,9% a u$s 1.346.
Con las tropas rusas ya en suelo ucraniano tras una incursión en Crimea, las declaraciones del fin de semana del presidente ruso Vladimir Putin, sobre que él tendría derecho a invadir el resto del país, fueron consideradas como una declaración de guerra por parte de Kiev.
La turbulencia geopolítica golpeó principalmente a los activos rusos y llevó al banco central del país a subir agresivamente las tasas de interés.
Los principales beneficiarios de la aversión al riesgo eran el oro, la deuda pública de Alemania, el yen japonés y otras monedas consideradas como seguras, mientras que el petróleo era impulsado por el panorama de su demanda.
El temor acerca de la economía de China también influenciaba a los mercados luego de que un índice de gerentes de compra mostró una nueva contracción para el sector fabril de China en febrero.