Comparado con 2011, el monto de fusiones y adquisiones es cuatro veces inferior. Cayeron 35% en 2013 y llegan a US$ 36.000 millones. El volumen de operaciones mundiales también se desplomó el año pasado, llegando a su menor nivel en prácticamente una década.
De US$ 56 mil millones a US$ 36 mil millones. Esa fue la caída que apuntaron los valores de las fusiones y adquisiciones en minería en el mundo durante 2013 respecto del año anterior, lo que equivale a una baja de un 35% según el último reporte de PwC.
El descenso no es aislado. La tendencia ya se venía mostrando los últimos años. Durante el peak de 2011, el monto alcanzó US$ 149 mil millones, cifra cuatro veces mayor a la de 2013.
No solo cayeron los valores. El volumen de acuerdos se redujo de 1.803 transacciones a 1.437. Desde 2005 que el escenario no era tan negativo para este tipo de tratos, cuando alcanzaron 1.201 operaciones. El informe revela que durante 2013 hubo un cambio geográfico en los compradores de la industria minera mundial. Mientras los países del Occidente fueron más activos en el número de acuerdos realizados, el valor de los tratos fue superior en el Oriente.
Países como Rusia, China y Kazajistán acumularon el 43% de los valores de las operaciones mineras en 2013, mientras que Estados Unidos, Canadá y Australia representaron un 34% del monto global.
Para este año, el escenario podría ser un poco más optimista en términos de fusiones y adquisiciones en el sector.
En PwC estiman que la actividad minera se podría elevar en los próximos meses gracias a que las economías desarrolladas están más estables.
Según el reporte, se prevé que durante 2014 muchas de las empresas medianas serán compradoras activas, mientras que las grandes seguirán vendiendo bienes. Para cumplir el objetivo, algunas de las compañías juniors tendrán que tomar la decisión de fusionarse con alguna gigante minera para seguir a flote.