El metal rojo para entrega a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres retrocedió un 0.18%, a US$ 7,064.50 la tonelada, que se suma a la caída del 1.1% en la jornada anterior.
El cobre cayó el martes por segundo día consecutivo por preocupaciones sobre el impacto de una desaceleración del crecimiento en China y de su volátil sector inmobiliario sobre los inventarios del metal.
El cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME, por sus siglas en inglés) bajó un 0.18%, a US$ 7,064.50 la tonelada, que se suma al retroceso del 1.1% en la jornada anterior.
El cobre ha sufrido un golpe más fuerte que otros metales industriales recientemente debido a preocupaciones sobre los inventarios en China ligados a negocios financieros, dijo Stephen Briggs, estratega en metales de BNP Paribas.
El cobre bajó el lunes después de que reportes en medios chinos desencadenaron temores a que los bancos hubieran dejado de prestar dinero a compañías ligadas al sector inmobiliario, empeorando un nivel de confianza ya debilitada por la vasta disponibilidad de suministro y un reinicio lento después del período de fiestas del Año Nuevo chino.
Los inventarios de cobre ligados a la LME bajaron en 3,325 toneladas el martes y acumulan un declive de cerca de un 60% desde junio del año pasado, mientras que las existencias en China se han incrementado este año.
El cobre cayó el lunes a su nivel más bajo desde el 6 de febrero al cotizar en US$ 7,033 la tonelada, y acumula una caída de un 4% en lo que va del año.
Entre los metales básicos, el estaño fue el que registró el mejor desempeño el martes en la LME y cerró con un alza del 1.41%, a US$ 23,300 la tonelada. El aluminio subió un 0.51%, a US$ 1,771 la tonelada, mientras que el zinc avanzó un 0.20%, a US4 2,045 la tonelada.
El plomo, en tanto, cayó un 0.56%, a US4 2,120 la tonelada, y el níquel culminó con un retroceso del 0.21%, a 14.300 dólares la tonelada.