A pesar de la producción excedente de energía eléctrica en el país que genera diez veces más de lo que consume, gracias a sus grandes hidroeléctricas como Itaipú y Yacyretá, sigue utilizando en un 46% la leña (biomasa) como fuente fundamental.

Esto conforme al resultado del Balance Energético Nacional en Energía Útil, realizado por Itaipú Binacional (PTI y UCI), en alianza con el Viceministerio de Minas y Energía, la Fundación Bariloche y la Universidad Nacional de Asunción.

En este sentido, el estudio revela que la energía eléctrica satisface solo el 29,4 % de las necesidades de Paraguay. En tanto, el 46% son cubiertas a partir de energía proveniente de la biomasa como fuente primaria (leña, aserrín, cáscara de coco y bagazo) y el 24 por ciento restante es aportado por los derivados del petróleo.

La encuesta abarcó los sectores residencial, agropecuario, comercial, industria y minería donde se pudo ver que la producción de la energía hidráulica es un 64%, mientras que el 36% es de biomasa. Es decir que se consume más la energía que menos se produce.

Por otro lado, los datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), menciona que el 50% del total de las viviendas utilizan leña o carbón vegetal para satisfacer sus necesidades básicas y cerca del 70% del consumo industrial utiliza la leña o los residuos vegetales.

Para tener una idea, en solo 10 años, una sola firma que es la industria actualmente parada Acepar, consumió un promedio de 8 mil hectáreas de bosques chaqueños, sin reforestarlos según los propios accionistas de la compañía.

Esta denuncia fue presentada el año pasado por la Cooperativa de Trabajadores de Acepar que tiene el 33% de las acciones, donde detallaron que en el lapso de los años 2000 y 2008, Acepar produjo 815.174 toneladas de arrabio. La acería consume por cada tonelada de arrabio 1,25 Tn. de carbón vegetal, lo que significó en este lapso un consumo 1.018.968 toneladas de carbón vegetal, con un promedio de consumo anual de 127.371 toneladas de carbón vegetal.

Asimismo, gran parte de la población de interior del país utiliza la biomasa incluso para la cocción de alimentos.