La planta, que fue inaugurada con un acto oficial en julio del año pasado, se vio afectada por la inmovilidad del valor del producto y los aumentos en el precio de las materias primas, fijado en dólares. Sus dueños habrían decidido paralizar la actividad hasta que se revierta la situación.

General Pico (Agencia) - Apenas seis meses después de su inauguración y puesta en funcionamiento, la planta que produce biodiésel en esta ciudad, Pampa Bio S.A., habría determinado interrumpir su actividad en el día de ayer. La empresa se vio afectada por los precios de mercado. Los responsables del millonario emprendimiento no descartan iniciar la suspensión de personal en las próximas semanas.

La información fue revelada ayer por el portal Maracodigital, donde se señaló que hoy sería el último día de actividad plena en la planta radicada sobre la ruta provincial 102, en cercanías de la Aceitera. La situación del emprendimiento piquense sería similar al de otras plantas de biodiésel radicadas en distintos puntos del país.

Pampa Bio fue inaugurada a mediados de julio del año pasado, con la presencia del gobernador, funcionarios locales y una videoconferencia con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Al acto inaugural asistieron también militantes políticos de distintos puntos de la provincia, quienes en su mayoría protagonizaron una desprolija puja por ocupar los primeros planos de la televisación del evento.

Según la información publicada por el portal web local, la firma de Lartirigoyen se ve afectada por la inmovilidad del valor del biodiésel en el último año. La planta que procesa aceite crudo de soja para la fabricación de combustible debió afrontar en los últimos meses los incrementos del precio de la materia prima, fijado en dólares, mientras la producción que vende no registró aumentos.

La planta tenía almacenada materia prima para procesar hasta el día de hoy, mientras que sus dueños decidieron paralizar la actividad hasta que se revierta la situación. Los 30 operarios que allí se desempeñan ya habrían sido notificados de la situación, con la orden de continuar asistiendo a la planta para realizar tareas de mantenimiento, pero si no existen cambios en la comercialización de la producción, en un par de semanas la firma comenzaría a suspender personal.

Inversión

La planta, que tiene por objeto la “neutralización y transesterificación” de aceite de soja para producción de biodiésel, fue inaugurada el pasado 23 de julio de 2013. La inversión total, entre activos fijos, capital de trabajo y gastos de puesta en marcha, fue de alrededor de cien millones de pesos, de los cuales la Provincia aportó mediante un préstamo 26.500.000 pesos, contemplados en el Régimen de Promoción Industrial.

El emprendimiento se puso en marcha con la intención de producir 50.000 toneladas de biodiésel -producto principal- por año, que serían comercializadas en el mercado interno para que las empresas petroleras mezclen el biodiésel con combustible de origen fósil. También generaría cerca de 6.000 toneladas de glicerina bruta como subproducto.

Además de las 30 personas que trabajan a diario, la planta, a cargo de Ignacio Lartirigoyen, pretendía generar un movimiento de 3.600 camiones por año, más la mano de obra tercerizada para tareas mecánicas o eléctricas.