La explotación de gas shale en México tardará más y alcanzará menos regiones: dice especialista.
La explotación del gas shale o de lutitas generó una revolución energética en Estados Unidos, pero México no debería esperar el mismo impacto, al menos de forma inmediata.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) autorizó un estudio sobre el desarrollo de ese tipo de práctica en México y las conclusiones ayudan a ponerle paños fríos al entusiasmo que genera en algunos sectores la reforma energética.
El efecto de la explotación tardaría varios años en caso de haber una reforma que abra el camino a las empresas privadas, dice Víctor Hugo Ventura, jefe de la Unidad de Energía y Recursos Naturales de las Naciones Unidas, en una entrevista con la revista Expansión realizada días antes de que se aprobara la reforma energética.
La iniciativa fue aprobada por el Congreso el 12 de diciembre de 2013. El presidente Enrique Peña Nieto promulgó la nueva ley el 20 del mismo mes y entró en vigor al día siguiente. La ley secundaria deberá fijarse dentro de los 120 días naturales siguientes a partir del 21 de diciembre.
Ventura advierte que el shale no se podrá obtener en todas las regiones mexicanas que hoy se mencionan como posibles escenarios de un boom.
Hoy se habla mucho más del gas shale y del impacto que tendría en México. ¿Estamos haciendo muchos castillos en el aire?
Depende de a qué se le llame hacer castillos en el aire. Yo creo que México podría llegar a ser un país que no necesite importar gas natural. Es algo muy viable, de eso no me queda duda. México está considerado como uno de los pocos países en el mundo que, a mediano plazo, podría tener suficiencia energética.
No sería de la noche a la mañana, pero pocas naciones pueden confiar en ese abastecimiento seguro y a muy buen precio. Sin embargo, que digan que México podría llegar a ser un gran exportador, eso sí es un castillo en el aire.
¿Es cierto que México podría tener la cuarta reserva mundial de gas shale?
Son evaluaciones preliminares. Todavía falta mucho que discutir sobre el tema del shale gas. Habría que revisar si lo que se dice sobre las posibilidades de México es una exageración, pero las reservas de gas natural podrían subir de 10 a 15 veces más.
Pero también hay que ver qué tanto gas es posible recuperar. Hasta ahora, lo más que se puede recuperar de esa reserva es entre 5 y 10%. Sin embargo, si uno le apuesta a la tecnología, se obtienen mejores rendimientos en cualquier actividad.
Por supuesto que hay gases de esquisto (lutitas) en México, porque es la misma formación geológica que tiene Estados Unidos. El punto es si las evaluaciones realizadas hasta el momento son muy optimistas y si los factores de recuperación son alcanzables.
¿Quién debe explotar el gas shale? ¿El Estado o las empresas privadas?
Es una de las grandes decisiones que tiene que tomar el país. Quizá (un modelo) mixto. Hay que ver al Estado y al mercado no como enemigos, sino como asociados. Podría coexistir una subdivisión de Pemex de gas shale, algo que estuviera plenamente desincorporado de la estatal para tener esa agilidad que requiere esta industria, con privados. Ello obligaría al operador estatal a mejorar su eficiencia.