A casi 30 días del comienzo de la ola histórica de calor y los cortes de luz que la acompañaron –y la sobrevivieron–, ayer empezaron los reclamos judiciales contra las empresas y el Gobierno. La Defensora del Pueblo de la Ciudad, Alicia Pierini, presentó una demanda por daños contra Edenor y Edesur, con el objetivo de “lograr la reparación económica justa y equitativa para los damnificados porteños por el corte de suministro eléctrico”. La demanda incluye una larga lista de personas que se presentaron en la Defensoría a plantear su queja.

Cuando termine la feria judicial, en febrero, las asociaciones de consumidores se sumarán a esta movida: son varias las que planean iniciar acciones colectivas contra Edenor, Edesur y el Gobierno por los cortes de luz, que continuaban ayer en algunos barrios porteños pese al éxodo turístico y el descenso de la temperatura. Además, el diputado socialista Héctor Polino, de la organización Consumidores Libres, presentó una nota de reclamo ante el ENRE (Ente Nacional Regulador de la Electricidad) para exigir cambios en las indemnizaciones ofrecidas por el Gobierno Nacional.

Desde Consumidores Libres también anunciaron que irán a la Justicia en febrero para demandar a las empresas de electricidad y a los funcionarios públicos –concretamente, al ministro de Planificación Julio de Vido, al secretario de Energía Daniel Cameron y al ENRE– por haber ocasionado “gravísimos daños humanos, materiales y económicos a los usuarios, en una suerte de abandono de persona”. Polino, representante legal de la asociación, informó que ya reunieron varios casos y planean sumar a otras organizaciones, como la ONG La Alameda.

En los barrios de Villa Luro y Versalles, los vecinos reclaman por duplicado. Es que una parte pide por el regreso de la luz, que desde hace 10 días es esquiva, y otra reclama porque desde el martes la energía eléctrica les vuelve, pero con una intensidad que hace que revienten y exploten todos los artefactos de las casas.

“Desde el 31 de diciembre que estamos sin luz y ayer por la noche, luego de que algunos cortaran las vías del tren Sarmiento, Edesur devolvió la energía, pero con una intensidad extrema. Yo mismo comprobé con un tester que habían venido 345 megawatts de potencia. Parecía Navidad, iban explotando todas las lamparitas”, contó Carlos. A sus vecinos les pasó algo similar, pero con pérdidas peores: heladeras, televisores, aires acondicionados y todo tipo de electrodomésticos.

Aunque sin dudas la tragedia mayor la vivió la familia que vive sobre la calle colectora General Paz 9.960. Allí la alta tensión provocó el incendio total de la propiedad: Por suerte en la casa no había nadie y Marcelo Maddalena, uno de los hijos de la pareja que vive allí, le contó a Clarín lo que vivieron en el momento de enterarse de la noticia: “Un vecino lo llamó a mi papá y le dijo que la casa tenía un problema, cuando llegaron estaban los bomberos terminando de apagar el fuego.

Mi mamá se desmayó y a mi papá le agarró un ataque de presión. No es para menos: perdieron todo ”.

Además, el hombre –impresionado y desolado por lo que pasó– contó que su padre toma medicamentos oncológicos y que por los problemas con las importaciones ahora no puede comprar más: “Están viviendo en un hotel, sin sus remedios, sufriendo mucho”.

El vecino que alertó a los padres de Maddalena sobre el incendio, contó a Clarín: “A mí primero se me derritió literalmente el televisor y entonces fui corriendo y desenchufé todos los aparatos electrónicos, pero cuando salí a la calle empecé a ver humo y fuego de la casa de al lado, entonces llamé a los bomberos, pero el incendio crecía y al final terminó devorándose todo”, relató Daniel.

Son manzanas enteras las que sufren la falta de energía y los vecinos dicen que por la noche el miedo a los robos se multiplica: “Es una zona de casas bajas y muchos árboles, y me enteré de varios casos de gente que vuelve de trabajar tarde y es atacada por ladrones que les roban el celular y la billetera. Exigimos que nos devuelvan la luz”, pidió Adriana González que vive sobre la calle Frigueiro.