Días intensos para el secretario general de la Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA), Héctor Laplace, quien tras festejar con 600 dirigentes de sus 19 seccionales el 60* aniversario del gremio puso proa hacia su encuentro con el Papa Francisco y la posterior cumbre de gremios industriales en Suiza.
Días intensos también para el gremialismo argentino, atenazado por la inflación que no para de crecer y en algunos sectores como la minería, con la preocupación lógica por el recorte de inversiones, que en mucho tiene que ver con el cuadro mundial, pero otro tanto respetable se debe a los desaciertos económicos del gobierno argentino.
Aunque pasó desapercibido entre los festejos y los chistes del cómico Cacho Garay, el discurso del líder gremial (ver audio completo en esta nota) no tuvo desperdicio. Primero, porque comenzó denostando a los “jóvenes brillantes” en obvia alusión a La Cámpora, después por el mea culpa que hizo de lo no actuado por la minería para llegar mejor a la sociedad y por último, por la defensa de la Ley de Inversiones Mineras a la que muchos peronistas evitan aludir por el solo pecado original de haber sido parida durante el menemismo.
La descalificación a los Jóvenes K y la reivindicación de la historia de lucha de los más destacados dirigentes de la historia de AOMA es sólo un reflejo de lo que muchos peronistas históricos hoy piensan, aunque no lo digan on the record: la historia del movimiento de Perón y Eva Perón no comenzó en 2013, aunque le reconozcan al kirchnerismo su capacidad de haber atraído a sectores juveniles a la militancia.
Un signo de ese estado de ánimo, fue el “aplausometro” del video obra de SMATA que contó en la cena show las vivencias políticas de un viejo obrero peronista. Cuando apareció Néstor hubo fuertes aplausos, cuando apareció Cristina fueron sensiblemente menos.
El viaje al Vaticano fue una experiencia imborrable para los 25 gremialistas encuadrados en la CGT oficialista. El anfitrión, un argentino que supo militar en el peronismo, les dio un mensaje: Unidad y cercanía con el pueblo. Lo primero es difícil de practicar, reconocen los hombres de los gremios porque las aguas en el último lustro se han dividido bastante, tras la defenestración de Hugo Moyano y otros hoy ex amigos del poder. La proximidad con el pueblo no es fácil en momentos de descomposición inocultable, cuya clara exhibición fue la epidemia de saqueos de esta semana.
En gremios profundamente federales como AOMA, hubo preocupación por la decena larga de muertos que se dieron en el Interior, y por eso explica que Buenos Aires y el GBA, al ver los desmanes sólo por TV terminaron llevando gente del peronismo al inoportuno festejo de ayer en la Plaza de Mayo.
El rol de los sindicatos forma parte de un entramado en el cual juegan sus representados y los millones de argentinos desproletarizados. Sindicatos medianos como el minero, con 32.000 afiliados en el padrón, saben de qué se trata cuando sus trabajadores en comunidades alejadas suelen ser una suerte de aristócratas del barrio.
Pero la gran obsesión y preocupación de los dirigentes sindicales en la Argentina, incluidos los de AOMA es la inflación. Tras los cambios en el gobierno y el gerenciamiento estrenado por Jorge Capitanich, se preparaba para un año de difíciles negociaciones en sus cuatro ramas de actividad y por empresas, pero el salariazo policial ha disparado una expectativa de salarios y de precios cuyo fin es impredecible. El año pasado, el gobierno aspiraba a una banda del 18/20 % pero AOMA fue de los primeros en traspasarla con acuerdos por encima del 25%. El 2014 emerge con una expectativa inflacionaria del orden del 30% más un estado debilitado para imponer barreras tope. Las mineras, metalíferas y no metalíferas están apretadas por precios bajos, presión impositiva y distorsión cambiaria, con lo que la negociación promete ser dura.
Por lo menos, a AOMA no le molestan ahora expresiones sindicales como la fallida OSMA, nacida en Veladero, y ahora desaparecida. Sólo quedan expresiones menores, como los Jerárquicos Mineros de Marcelo Mena, también de San Juan, apadrinados por la Secretaria de Minería de la Nación. Nada para preocuparse.
El secretario general de la AOMA, Hector Laplace reveló a la prensa especializada en Minería que el Papa Francisco le pidió gestos a los sindicalistas argentinos que lo visitaron a fines de noviembre gestos de unidad y una mayor cercanía con el pueblo
Laplace fue recibido el 26 de noviembre por el Papa Francisco en su residencia de Santa Marta, junto a una delegación de 25 representantes de la Confederación de Sindicatos Industriales De la República Argentina (CSIRA) y miembros de la Confederación General del Trabajo (CGT) que lidera el metalúrgico Antonio Caló (integrante de CSIRA).
En el encuentro del gremialismo argentino, el Papa, recibió diversos presentes. A Laplace le tocó entregarle rosario artesanal de rodocrosita, la exclusiva `Piedra Nacional que se extrae en Catamarca. Jorge Bergoglio retribuyó el regalo con una bendición para los trabajadores mineros argentinos. El líder de AOMA le entregó también un libro del Padre Andrés, de Olavarría, sobre sus vivencias en el Vaticano en 2013, donde presenció la unción de Jorge Bergoglio. Además de una nota enviada por una comunidad de pueblos originarios a Su Santidad.
“Le manifestamos a Francisco que asumíamos el compromiso del diálogo con relación a la actividad minera, en Argentina y en el mundo”, recogiendo la apelación papal a los ejecutivos de las grandes mineras globales de fines de septiembre.
“El mensaje que el Papa envió a través nuestro es el de la unidad de todos los argentinos. “e mostró con una preocupación muy particular hacia la juventud y los flagelos de la droga y de la violencia que suele soportar. A los sindicatos nos pidió puntualmente que tratemos de estar más cerca de la sociedad, que tratemos de arrimarnos más a nuestro pueblo. Nos pidió que hagamos capacitaciones, que tratemos de sacar a los chicos de la calle, que hagamos capacitaciones de inserción laboral, y que colaboremos para lo que tiene que ver con la educación, ya que hay sindicatos que están tratando de refaccionar escuelas en el Interior del país donde hay falencias”.
“Sobre el final del encuentro, el Sumo Pontífice bendijo un olivo que será traslado a Argentina en símbolo de paz, un mensaje que está llevando por el mundo. También bendijo la reunión de días después (5 y 6 de diciembre) del Comité Ejecutivo en Ginebra y se comprometió a enviar un olivo para la inauguración de una casa el 17 de diciembre en la Organización Internacional, en Ginebra”.
“La audiencia fue uno de esos momentos que marcan de por vida. Cómo organización sindical fue un orgullo enorme poder estar ante el jefe de la Iglesia Católica y obtener la bendición para los trabajadores mineros de Argentina”.
Laplace no eludió, en su diálogo con medios especializados en minería, su opinión sobre la visita filmada y difundida por Fernando “Pino Solanas”. “Fue un gesto de una enorme grosería, pretender utilizar la figura papal para subterfugios políticos. Desde luego que todos estamos a favor de la defensa del agua. Pero el ardid de la camiseta con el slogan “El agua vale más que el oro” habla por sí sólo de esta falta de escrúpulos de ciertos personajes", dijo el sindicalista..