Tras un primer encuentro realizado ayer en San Juan entre el vicegobernador Sergio Uñac y el jefe máximo de Barrick Gold, John Thornton, en el Gobierno hay optimismo de poder extender el tiempo para mantener 5.000 puestos de trabajo que aún quedan en el proyecto binacional Pascua-Lama, luego que la minera suspendió su construcción por problemas financieros, y legales en Chile. ‘’Ellos tienen la predisposición, aunque están en un contexto internacional que no se puede obviar, pero apuestan a que ese proyecto sea uno de los mejores de la empresa’’, dijo ayer el vicegobernador Uñac. El optimismo preliminar del Gobierno es porque ayer los directivos vinieron con el plan de dejar sólo 500 puestos de trabajo y las autoridades locales le arrancaron el compromiso de mantener 5.000 trabajadores, mientras se buscan alternativas financieras para reflotar el proyecto minero. Hubo una fuerte presión del Gobierno sobre los dos proyectos -Lama y Veladero- de la que no trascendieron detalles. ‘’Fue una reunión dura y larga, pero el encuentro fue positivo’’, dijo luego Uñac quien agregó que la comitiva regresará el viernes próximo a la provincia. La propuesta del Gobierno es seguir trabajando durante todo el verano y hasta que las condiciones climáticas invernales lo permitan, para lo cual la empresa debería diagramar su esquema de trabajos mientras busca a la vez mejorar sus condiciones financieras en un contexto internacional desfavorable por la caída en los precios de los metales y el contexto nacional de desfasaje con el tipo de cambio.
Esa es la propuesta con la que Thornton regresó ayer a Toronto, pasadas las 15.39 partió en un avión privado desde el aeropuerto Domingo Faustino Sarmiento en Las Chacritas. ‘’El viernes volveremos a reunirnos a tratar de cerrar la propuesta de mantener los 5.000 puestos de trabajo, esta oferta la van a someter a consideración de los accionistas y mientras tanto aquí el Gobierno seguirá trabajando con Barrick Argentina en ir acomodando situaciones, mirando oportunidades y realidades’’, agregó Uñac. Según trascendió, el Gobierno nacional ha estado enterado minuto a minuto de las negociaciones que se realizaron ayer. En la reunión acompañaron a Uñac el ministro de Minería, Felipe Saavedra y los funcionarios Roberto Gattoni y Jorge Roca. Thornton fue acompañado por Guillermo Caló y Julio Claudeville.
En medio de una reunión cordial y con momentos ásperos, el gobierno y Barrick lograron al menos dilatar una decisión pesada: la empresa llegó con la intención de prescindir de unos 4.500 trabajadores en la mina Pascua-Lama a partir de diciembre, y se fue con la posibilidad de mantenerlos al menos hasta mayo-junio y a la espera de un nuevo cuadro económico que permita reflotar el proyecto.
Ese fue el resultado del encuentro de ayer a la mañana entre el vicegobernador Sergio Uñac y el CEO de Barrick, John Thornton, que se reproducirá dentro de una semana para ver si se concreta el acuerdo de retener a los 5.000 empleados, en lugar de los 500 que tiene previstos.
El asunto ahora es establecer qué trabajos pueden hacer, mientras el proyecto se encuentra temporalmente paralizado, según lo reportó Barrick el 1 de noviembre. Y con qué expectativas dilatar los tiempos en un emprendimiento jaqueado por los incidentes ambientales en Chile, sus propios problemas financieros y el tipo de cambio nacional.
El encuentro tuvo momentos de tensión, que fueron cuando no avanzaba el acuerdo sobre el personal a mantener arriba de la mina. Incluso, de acuerdo con fuentes oficiales y empresarias consultadas, entró en juego la mina de Veladero en medio de la negociación. Es decir, su continuidad atada a lo que ocurriera con Pascua-Lama.
La tensión sobre Veladero, un proyecto también operado por Barrick, fue decreciendo hasta que ambas partes encauzaron la negociación. Y el borrador al que arribaron consiste en mantener los 5.000 puestos de trabajo al menos hasta mayo, y abrir una espera hasta ese momento para decidir. En ese plazo puede ocurrir que el precio del oro cobre nuevamente valor, que se avance en las restricciones ambientales en Chile, o que continúe el goteo devaluatorio del peso frente al dólar: Y que, nuevamente, se torne viable el proyecto.
El problema es que la situación financiera de la empresa sigue siendo complicada, con bruscas movidas bursátiles que depositaron el precio de la acción en los 15 dólares. En ese contexto, resulta complicado –dicen en la empresa- mantener una dotación de 5.000 empleados.
Ahora deberán hacer cuentas y cálculos operativos para decidir en qué lugares podrían mantener a los 5.000 empleados de Lama aún sin obras de construcción. En el medio, Uñac viajará a Chile con el jefe de Gabinete Capitanich para avanzar en un acuerdo sobre los permisos ambientales, aunque en la empresa no tienen demasiadas expectativas en ese trámite porque su principal inconveniente es financiero.
El viernes que viene se volverán a reunir los mismos protagonistas de hoy: por el gobierno lo hará el vice Sergio Uñac y por la empresa la intención es que nuevamente lo haga su máxima autoridad mundial.