A Miguel Galuccio, el CEO de YPF, se le notan estos meses que lleva al frente de YPF desde que Cristina lo eligió en abril de 2012. Ayer al comenzar su exposición en la Conferencia de la UIA en Cardales se lo notaba cansado. Aunque a poco de poner en marcha una presentación con imágenes de alto impacto sobre la encrucijada de Argentina, si seguir siendo un país dependiente de la importación de petróleo o uno independiente se reanimó. De 45 años y como se autodefinió con muchos kilómetros encima, hizo un diagnóstico crudo. Dijo que “Argentina es dependiente del precio internacional de los combustibles” al reconocer que el valor del gas saltó en los últimos años de los US$ 9 por millón de BTU a los US$ 15 actuales. Galuccio también reconoció que faltan “cinco años para lograr el autoabastecimiento”. Y anticipo que tienen entre manos buscar petróleo en el mar en un país con 2,7 millones de kilómetros para el “off Shore”.

El titular de YPF, Miguel Galuccio, reconoció que Argentina "está obligada a importar energía" para satisfacer la demanda interna, por lo que "necesita inversiones y facilitar esas inversiones" para lograr la "verdadera soberanía energética".

"Argentina se encuentra en una situación muy similar a la de Estados Unidos hace diez años, cuando se veía obligado a importar energía porque su propia producción no alcanzaba para satisfacer su demanda interna", comparó, durante la 19° Conferencia Industrial Argentina.

Galuccio resaltó que el desarrollo de la explotación no convencional de los recursos energéticos "permitirá en un plazo de 5 a 10 años recuperar parte de nuestra independencia energética", aunque advirtió que para avanzar en esa tarea se requiere ayuda de "la industria local y también de las compañías internacionales".

"La matriz energética depende en un 81% de los hidrocarburos, la otra pequeña porción se reparte en energías alternativas, un 1%, e hidráulica y nuclear, un 14% aproximadamente", detalló al inicio de su exposición.

En ese sentido, indicó que Argentina "se ve obligada a importar energía, principalmente gas de Bolivia y GNL (Gas Natural Licuado) de barcos metaneros que vienen desde distintos lugares del mundo", y agregó que esa situación generó que el país sea "dependiente del precio internacional del GNL".

"Las variables internacionales de precios de este producto afectan claramente la balanza comercial, ya que desde que la Argentina inició la importación de GNL, ha tenido una fluctuación de precios que va aproximadamente de los 9, 10 dólares por millón de BTU a 15 o 17 dólares en los últimos cinco años", rememoró. 

Luego, el titular de YPF detalló que el objetivo inmediato de YPF es "reducir la declinación natural de los campos maduros" de recursos. "Esto requiere de mucha inversión en proyectos de recuperación secundaria, terciaria, recuperación de pozos sin fin, para optimizar la producción base o actual que tiene Argentina", aclaró. 

Al respecto, Galuccio subrayó que la producción de YPF subió "por tres trimestres consecutivos" y alcanzó "niveles récord" en Santa Cruz y en Chubut. "Pero con esto sólo no alcanza para lograr el autoabastecimiento, hay que evaluar el potencial exploratorio remanente de nuestro país, sabemos que existe todavía un potencial en las cuentas que llamamos 'no productivas' y por eso hemos lanzado el plan de exploración denominado 'plan Argentina'". 

El presidente de YPF afirmó que el camino para lograr el autoabastecimiento energético tiene que centrarse en el desarrollo de los combustibles no convencionales que, destacó, tienen "plazos menores" y "cifras alentadoras" en comparación con la producción off shore. "Agrega a nuestra estantería de recursos un potencial impresionante que nos permitirá en un plazo de cinco a diez años recuperar parte de nuestra independencia energética. Tenemos ventajas comparativas que nos permiten poner en perspectiva y dimensionar la oportunidad a las que nos enfrentamos. Los recursos no convencionales representan 30 veces nuestras reservas de gas y 9 veces nuestras reservas de petróleo", amplió. 

Galuccio explicó que "el mundo hoy mira a la Argentina expectante de lo que puede pasar con Vaca Muerta" y señaló que "estamos en la lista de los 10 países con posibles desarrollos concretos del no convencional". "Argentina será un país si logra desarrollar el no convencional y otro si no lo hace, el camino de la dependencia energética o la independencia", planteó.

El CEO de YPF, Miguel Galuccio, dijo que "la Argentina será un país si logra desarrollar los recursos no convencionales, y otro si no lo hace". Afirmó que hay dos opciones "la dependencia o la independencia energética", y que se debe "buscar la forma de que el desarrollo de esos recursos se haga de forma acelerada". Así llamó a una amplia participación empresarial al hablar en la 19^a Conferencia que organizó la Unión Industrial Argentina (UIA) en Cardales. "El no convencional agrega un potencial impresionante que nos permitirá, con un plan de cinco a diez años, recuperar la independencia energética", dijo Galuccio abriendo la expectativa de un plazo más extenso al inicialmente previsto para desarrollar la formación geológica Vaca Muerta. 

Por otra parte, volvió a insistir con el concepto de que sólo con YPF no alcanza. Afirmó: "Tenemos una herramienta que es YPF, que hoy lidera el cambio de paradigma, pero a su vez necesitamos a la industria local y también a las compañías internacionales". Estimó que los recursos no tradicionales "representan 30 veces nuestras reservas de gas convencional y 9 veces las de petróleo". También reseñó que "YPF se lanzó a desarrollar el no convencional perforando más de 100 pozos tanto para testear la talla como la productividad" y aseguró que esa cifra representa casi el triple de lo que hicieron en conjunto el resto de las compañías que hoy operan en el país. 

Dirigiéndose a los empresarios, afirmó que "Vaca Muerta ofrecerá un espacio grande de oportunidades para el desarrollo local de proveedores y empresas vinculadas a la cadena de valor". Añadió que "hay lugar para empresas nacionales e internacionales, grandes, pequeñas y medianas", y concluyó: "El que se anime a apostar tendrá su lugar y no sólo hablo del negocio petrolero puro, sino también de toda su ingeniería".

En el encuentro organizado por la Unión Industrial Argentina (UIA), Galuccio afirmó que "se trata de lograr la dependencia o la independencia energética, y hay que buscar la forma de que ese desarrollo de esos recursos se haga de forma acelerada".

"Tenemos la herramienta que es YPF, pero necesitamos el apoyo y la compañía local e internacional, porque sólo así la energía podrá ser una palanca de la industria", definió el titular de la petrolera estatal en el marco de la 19na. Conferencia Industrial que se desarrolla desde ayer en el Sofitel de Cardales y será clausurada hoy por el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.

En ese sentido, Galuccio añadió que "los argentinos tenemos que tomar una decisión muy importante que repercutirá en las próximas décadas y no involucra sólo a YPF: queremos ser o no dependientes energéticamente".

Indicó que "esto implica muchísimas cosas, que aceptamos que la estimulación hidráulica es fundamental para desarrollar estos recursos, que entendemos que no lo podemos hacer solos y cuando viene una compañía como Chevron, y se sienta en el asiento de acompañante, aceptamos que eso es necesario".

"Esta no es una causa de YPF, es una causa del gobierno nacional, de gobiernos provinciales, de las empresas, del ciudadano común; estamos ante una oportunidad tan grande que habrá lugar para empresas internacionales, nacionales, grandes y chicas", dijo Galuccio.

En ese marco, el titular de YPF enfatizó: "El que se anime a apostar tendrá su lugar y no sólo hablo del negocio petrolero puro, sino también de toda su ingeniería".

"El no convencional permitirá también convertirnos en líderes tecnológicos dentro y fuera del país. La independencia pasa porque los argentinos seamos capaces de desarrollar nuestros propios recursos, el desafío está lanzado y necesitamos que las empresas nos acompañen en esta causa de todos", puntualizó.

En el panel titulado `Energía como núcleo y motor del desarrollo productivo`, del que participó también Gerardo Ventuolo, presidente de ADIMRA, Galuccio manifestó que "en la actualidad, nuestro país se ve obligado a importar energía", con lo cual "se ha vuelto dependiente del precio internacional y afecta la balanza comercial".

En el mismo sentido, afirmó que "necesitamos competitividad, y necesitamos lograrla en gran escala; necesitamos tecnología, inversión, y todo esto es posible".

"Estamos frente a un recurso con un costo de producción mayor a los yacimientos que explotábamos décadas atrás, pero es mejor opción que importar. La industria depende de la energía en mayor o menor medida y me imagino que los costos dentro de sus balances deben ser entre el 10 o 30 por ciento de los costos totales", indicó.

Galuccio remarcó que el objetivo debe ser "que la energía esté disponible a precios razonables, con abastecimiento previsible, porque sólo así será una palanca de la productividad y la eficiencia industrial".

"De lo contrario, deberíamos asumir ser un país energéticamente  dependiente, y si así fuera, esta presentación debería terminar aquí. Si por el contrario pensamos que hay que lograr el autoabastecimiento, aprovecharemos esta oportunidad histórica", finalizó el CEO de YPF.

El presidente de YPF, Miguel Galuccio, expuso ayer ante el pleno de los industriales de la UIA con un discurso diferente de los que venía dando, en el que abordó las posibilidades de crecimiento de la compañía pero enmarcado en el contexto internacional. En el medio, adelantó que la firma buscará hidrocarburos en el mar, en la Cuenca Austral, como parte de un plan de apuntalamiento de la producción que incluye explotación de yacimientos maduros y de áreas no convencionales. "Hemos aumentado la producción tres meses consecutivos, con récord en Santa Cruz y Chubut, pero con esto sólo no alcanza para el autoabastecimiento", dijo y se centró en los objetivos.

"Existe un potencial remanente en las cuencas no productivas, pero por el tamaño de los posibles descubrimientos tampoco alcanzará", por esta razón habló del futuro de los yacimientos marítimos: "El off shore posee 2,7 millones de kilómetros cuadrados y estudios preliminares dicen que podríamos tener un play concept similar al de África del Oeste o Brasil. Pero a diferencia del shale, en el off shore tenemos muy poco conocimiento. Estamos comenzando los estudios hoy, puede haber resultados en diez años vista", afirmó el entrerriano. Y agregó que "en el caso del shale (Vaca Muerta), los plazos son menores y las cifras alentadoras. El no convencional agrega un potencial impresionante, en un plazo de cinco a diez años para recuperar nuestra independencia energética".

En este contexto, fue categórico al decir que "Argentina será un país si logra el shale y otro si no lo hace. Tenemos que buscar que ese desarrollo se produzca de una manera acelerada."

En otra parte de su discurso –que presenció su hermano Carlos, titular de la UIA de Entre Ríos– el CEO de YPF hizo un llamado a la industria local en materia de fabricación de partes para los trabajos en yacimientos. "Necesitamos de la industria local y de las compañías internacionales. Necesitamos competitividad, tecnología, inversión, facilitarlas, y todo esto es posible" y reconoció el "costo caro de la inversión, pero que es mejor que importar".

Minutos antes, Gerardo Venutolo, titular de ADIMRA, había resaltado que "la soberanía energética consolida el proceso industrial de un país" y habló de la "cadena de proveedores especializados en petróleo y gas". Luego, en diálogo con Tiempo Argentino, Juan Carlos Lascurain, vice de los metalúrgicos y la UIA, adelantó que "se ha intensificado el trabajo de producción de piezas para YPF, y ya hay sectores muy avanzados, como las válvulas".

España quiere el acuerdo

El secretario de Estado de Comercio de España, Jaime García-Legaz opinó ayer que la negociación entre Repsol y la Argentina es algo positivo, ya que "siempre es mejor un acuerdo, sea bueno, malo o regular que un pleito".

El funcionario consideró en un reportaje que publicó el diario especializado en economía y finanzas Expansión en el día de ayer, que se trata de "una buena noticia" que "permitirá despejar la relación entre ambos países".

Por su parte, el presidente de Repsol, Antonio Brufau señaló que no resigna su pretensión de percibir por las acciones de Repsol en YPF un valor "superior", aunque solicitó que "lo que cobremos debe ser una cifra cierta".

"Lo de los cinco mil millones de dólares no salió de nosotros", exclamó el empresario para expresar una posición que pretende una cifra superior por la parte de Repsol en YPF que fuera expropiada por el gobierno argentino en abril del año pasado.