El Gobierno elevará hasta el 10% la obligación del uso de biocombustibles en la mezcla con el gasoil tanto en el consumo de vehículos como en el de las centrales termoeléctricas. La utilización de biocombustibles en el gasoil aumentará del actual ocho por ciento obligatorio al nueve por ciento en enero y al 10 por ciento en febrero próximo.

La medida fue anunciada ayer por los por los ministros de Planificación, Julio de Vido, y de Economía, Axel Kicillof y se adoptó para paliar las restricciones aplicadas por la Unión Europea a las importaciones de biocombustibles argentino. De acuerdo con el nuevo titular del Palacio de Hacienda, reportará “unos 50 millones de dólares de ahorro de divisas en 2014”.

Según indicaron los funcionarios los anuncios significarían “la colocación de unas 450 mil toneladas de biodiesel anuales adicionales en el mercado local de combustibles, 210 mil en el gasoil automotor y 240 mil en las usinas térmicas”.

Según afirmó a DyN el presidente de FIAT Auto, Cristiano Rattazzi, “los motores tanto diesel como nafteros admiten hasta un 10 por ciento de biocombustibles, pero empiezan a tener problemas con porcentajes superiores”.

Respecto de si la medida podría morigerar las subas en el precio de los combustibles, Kicillof sostuvo que desde el Gobierno tenían “la mirada en el mercado de combustibles” y que iban a avanzar en un “acuerdo de precios” para el sector,en tanto que De Vido señaló que esta medida “no representará costos adicionales” al combustible.

En la conferencia de prensa de ayer -en la que estuvieron también los ministros de Industria, Débora Giorgi, y de Agricultura, Carlos Casamiquela- De Vido sostuvo que la Argentina posee una capacidad instalada para la producción de cuatro millones de toneladas de biodiesel. “Con estas medidas, el 33 por ciento de la capacidad se instalada se destinará a abastecer el consumo al mercado interno”, expresó el titular de Planificación.

El funcionario admitió que la medida se tomó en función de “las medidas pararancelarias adoptadas por la Unión Europea, especialmente por España”, que restringieron el ingreso de biocombustibles argentino a ese mercado. Ello ha sido motivo de fuerte queja de la ARgentina, que a su vez se encuentra denuncia por Bruselas en la OMC por las trabas a las importaciones tildadas de excesivamente proteccionistas.

Curiosamente, Kicillof destacó ayer que “a este Gobierno le preocupan las políticas de protección injustificada de la Unión Europea, principalmente de España”. De todos modos, señaló que “a los precios actuales del gasoil y de la soja (la medida adoptada) representa un ahorro de divisas para las cuentas externas del país”, que estimó en el orden de los 50 millones de dólares.

Las restricciones a la importación de biodiesel se venían analizando desde mediados del año pasado, en lo que algunos especialistas consideraron una represalia del bloque y en especial de España por la expropiación de las acciones de Repsol en YPF, ahora en arreglo. Bruselas lo oficializó el miércoles pasado.

DISCURSOS 02/12/2013 12:50 hs.

Julio De Vido: -(…) mi querido amigo y colega Axel Kicillof, en función del trabajo que viene realizando la comisión que tiene a su cargo la instrumentación de la ley de soberanía energética que como decíamos días pasados permitió la recuperación de YPF y que proponga la diversificación de la matriz y por supuesto de todas las fuentes de energía potencialmente posible de ser utilizadas para alimentar nuestra matriz energética. En el seno de esta comisión que preside el Ministro Kicillof se han tomado dos medidas que serán anunciadas en el día de hoy. Es otro paso más en el sentido de involucrar los biocombustibles en la matriz energética, y consiste en primer lugar, aumentar el corte obligatorio del gasoil automotor con biodiesel del 8 al 10% en forma escalonada, 9% a partir del 1ero de enero 2014 y ya llegar al 10% el 1ero de febrero del 2014. La segunda medida es la implementacion del corte obligatorio en el 10% en el gasoil que consumen la centrales termoeléctricas de la Republica Argentina. El impacto de las dos medidas representa la incorporación de 450000 toneladas adicionales de biodiesel al mercado local, 210000 al subir el 10% el corte del gasoil automotor y 240000 a implementar el 10% del gasoil que consumen nuestras usinas térmicas.

Argentina posee una capacidad instalada de producción de biodiesel de 4 millones de toneladas y hasta hoy el 21% de esa capacidad unas 850000 se destinaban al mercado interno. Con la implementación de estas dos medidas que anunciamos en el día de la fecha el 33% de la capacidad instalada de la producción de biodiesel será destinada a abastecer el consumo argentino de gasoil. Vale la pena aclarar que estas medidas no tendrán efecto alguno en el costo de los combustibles. Como ustedes sabrán las barreras para arancelarias que decidió aplicar la Unión Europea al biodiesel argentino afectaron negativamente a nuestras exportaciones de bio. Entre los años 2011 y 2013 las exportaciones de biodiesel cayeron 450000 toneladas. Las medidas que estamos anunciando mitigan esa disminución de exportaciones al continente europeo. Nuevamente Argentina vuelve a demostrar su liderazgo en materia de biocombutible. A nivel mundial solo en algunos estados de Colombia se aplica actualmente el 10% de gasoil con biodiesel y solo algunas usinas de EE.UU y Europa utilizan cortes de gasoil con biodiesel para la generación eléctrica. En el caso de la generación el biodiesel que se incorporara al gasoil que consumen las usinas representa el consumo anual de energía eléctrica de 400000 hogares de la Argentina. Esto debe ser un incentivo para la industria aceitera y de biodiesel para generar nuevos mercados de exportación porque la Argentina tiene capacidad para procesar producción de soja que actualmente se exporta como poroto, lo que permitirá profundizar la política de incremento de valor agregado a las materias primas industrializando la ruralidad.

Quiero finalizar recordando que cuando asumimos esta gestión de Gobierno, con la Presidenta Cristina Fernandez de Kirchner en el año 2007 como con el Presidente Nestor Kirchner el 25 de mayo del 2003, así ademas del abandono en el que encontramos la infraestructura energética con la mitad de las provincias desconectadas al sistema eléctrico, nuestras obras de centrales nucleares e hidroelectricas como Atucha y Yacyretá parada, la mitad de los argentinos sin gas y la industria quebrada por falta de energía y competitividad, no se producía un litro de biocombustible y no habia ni siquiera escrito un renglón sobre desarrollo industrial de las energía renovables. Estas gestiones de Gobierno tomaron la decisión estratégica de involucrar las energías renovables en la matriz energética incorporándolas al plan energético nacional enunciado el 11 de mayo del 2004 en el salón blando de la Casa de Gobierno e instrumentando su planificación a través de distintas leyes que emitiera el Congreso de la Nación. La ley 26.093 de abril del 2006 dispone el régimen de promocion para la producción y uso sustentable de biocombustible definiendo como tales al biotanol, al biodiesel y al biogas, destacando como principales beneficiarios a los productores agropecuarios, las pymes y nuestras economías regionales. La ley 26.190 de enero del 2007 que impulso el régimen de fomento para el uso de fuentes renovables de energía para la generación eléctrica y la ley 26.334 de diciembre del 2006 que aprobó el régimen de promoción de producción de bioetanol mediante la conformación de cadenas de valor entre productores de caña de azúcar e ingenios azucareros. Diez años después se llevan invertidos 5000 millones de dolares en energía renovable que crearon 5000 puestos de trabajo y los resultados son contundentes: 35 plantas de biodiesel con capacidad de producción de 4 millones de toneladas al año, 12 plantas de bioetanol con capacidad total de producción de 800000 metros cúbicos anuales, 29 centrales de energía renovables por 370 megas de las cuales 8 son parques eólicos, 12 son pequeños aprovechamientos hidroelectricos por 65 megavatios, 2 son centrales a biogas por 15 megavatios y 4 son parques solares por 8 megavatios. Todo esto es posible porque hay un Estado que planifica y porque el sector industrial entiende el desafío de desarrollar nuestras energías renovables. La industria tiene que considerar que el anuncio es otro punto de partida más para nuevas metas. Quiero anunciar también que en el día de hoy se esta produciendo el inicio del montaje de la segunda turbina de 270 megavatios de la central Vuelta de Obligado. Esta central tendrá una potencia total de 810 megas, su entrada a ciclo abierto por 540 megas se producirá en junio del año próximo y sera parte de casi el 50% del crecimiento del parque generador que se ha hecho en Argentina en estos 10 años. Sera fundamental para continuar el abastecimiento creciente de demanda a costo competitivo. No cabe duda que en el esquema que hemos trabajado con Axel y su equipo, hemos ido avanzando en infinidad de temas en un marco de interactividad y sinergia entre todos los organismos de gobierno. Creo que los resultados van estando a la vista y evidentemente la Argentina va enriqueciendo su matriz energética en el marco de la diversificación de los combustibles. Muchas gracias.

A partir del primer bimestre de 2014, el gasoil para uso automotor y el que se destina a las centrales de generación eléctrica tendrá un corte del 10% de biodiésel. Hasta ahora, el gasoil vehicular tenía un componente de biodiésel equivalente al 8%; el 1 de enero deberá elevarse al 9%; y el 1 de febrero, al 10%.

La medida anunciada ayer por los ministros Julio De Vido y Axel Kicillof apunta sobre todo a recuperar el nivel de actividad de la industria local, que sufre las medidas paraarancelarias dispuestas por la Unión Europea para frenar la importación de biodiésel argentino. En un segundo plano, por su importancia económica, el corte con biodiésel, que insumirá 450.000 toneladas más de ese producto, significa una reducción de la importación de gasoil en igual volumen. Según Kicillof, esto permitirá ahorrar importaciones por u$s 50 millones anuales.

De Vido reveló que la Argentina posee una capacidad instalada de producción de 4 millones de toneladas de biodiésel, y hasta ahora sólo alrededor de 850.000 se vuelcan al mercado local. Anticipó que con las nuevas medidas la utilización de la capacidad instalada para producir biodiésel destinado al mercado local se elevará del 21% al 33%, mientras que "el aumento en el corte no tendrá impacto en los precios actuales de los combustibles". No obstante, según algunos analistas, los motores podrían reducir el rendimiento al utilizar más cantidad de biocombustible.

El funcionario reseñó que "las medidas paraarancelarias de la Unión Europea al biodiésel argentino afectaron negativamente las exportaciones, que este año serán 450.000 toneladas menores que las de 2011" (precisamente el mismo volumen que desde 2014 se destinará al consumo interno). Según los números oficiales, este año cerrará con ventas de biodiésel al exterior por 1.150.000 toneladas.

De Vido también indicó que, con la decisión , "la Argentina se convierte en líder mundial en corte obligatorio de gasoil con biodiésel, ya que sólo en algunos estados de Colombia se corta al 10%, mientras en el caso de las usinas, la incorporación representa la demanda eléctrica anual de 400.000 hogares". Recordó que la Argentina produce unos 49.000.000 de toneladas de soja, de los cuales 8.000.000 exporta sin procesar. Agregó que la medida anunciada representa la molienda de 2.400.000 de esos 8.000.000 de toneladas de soja, una cifra equivalente al 30% del total enviado al exterior sin agregado de valor.

El Gobierno ordenó aumentar del 8 al 10% el corte con biodiésel del gasoil en forma escalonada a partir del mes próximo. El ministro de Planificación, Julio De Vido, dijo que la medida permitirá agregar unas 450.000 toneladas adicionales al mercado interno. Además, las usinas térmicas deberán utilizar hasta un 10% de biodiésel. Por su parte, el ministro de Economía, Axel Kicillof, estimó que la medida permitirá ahorrar 50 millones de dólares por año en importaciones de gasoil. La industria de biodiésel recibió este año un duro golpe por parte de la Unión Europea, que fijó un arancel antidumping del 24,6%. Esta medida provocó el cierre del mercado europeo, principal destino del producto argentino.